¿Cuánto esta bien entregarle al otro? ¿Con cuanto alguien se siente satisfecho?
Dinero, fama, éxito..
O tal vez... ¿nuestra propia vida?
Fiorella se perdió por darle todo a Patrick,
Patrick perdio a Fiorrella por quererlo todo..
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Patrick...
El sonido de la alarma me despertó nuevamente, tal vez esa noche había dormido cerca de tres horas o menos lo que a comparación de la semana anterior, era mucho. La jaqueca producto de todo el alcohol que me había bebido anoche hacia que quisiera lanzarme por el balcón del pent-houses donde me estaba quedando.
Mi móvil volvió a sonar, esta vez mostrando el nombre de la pelirroja. Por más que quisiera bloquearla, no podía, no cuando todo ya estaba en marcha y pronto la llevaría a la ruina junto con ese hijo de puta que la estaba acompañando —Hola cariño —su voz chillona resonó en mi oído —¿por qué no me respondiste al primer tono? ¿ya no me quieres?
—No es así, buenos días linda. —rodé los ojos mientras me acomodaba en el espaldar —¿Qué paso? —hable mientras buscaba el otro móvil, tratando de ver si tenía noticias de mi contacto.
El sonido a través del altoparlante fue de su quejido, actuando como una puta niña caprichosa —Pero...
—Char.. solo estaba durmiendo. Hoy voy a estar muy ocupado. No es que no te quiera, te elegí a ti ¿lo recuerdas? —Por el momento estaba pudiendo mantener a Charlotte Fernand bajo control mientras armaba todo lo que necesitaba para acabar con ella y su cómplice.
Aquello pareció calmarla ya que luego dijo algo relacionado con qué debía irse y me colgó, dejándome en paz. Lance el aparato que reboto primero en el colchón para luego acabar en el suelo. —MIERDA —descargué la rabia que tenía por dentro.
En mi mente se seguían repitiendo las imágenes de Timothy abrazándola, tocando su cuerpo y yo ahí, impotente sin poder hacer algo. Su mirada llena de odio y dolor me iba a perseguir por toda la puta vida. El celular sonó otra vez, ese día iba a ser jodidamente largo, me arrastré por la cama y lo cogí otra vez, notando que era solo Jack.
—¿Dime?
—Tiene tres reuniones y dos nuevos inversores que quieren conocerlo.
—Buenos días a ti también, Jack.
—Señor Duke, ¿quiere que cancele alguna o va a asistir a todas?
Suspiré, claro que él iba a estar enojado, al final Fiorella era su amiga y él podría volverse un puto loco si alguien la lastimaba. Demasiado considerado había sido conmigo ya que aún mantenía mi cabeza pegada al cuerpo.
—¿Cómo esta ella? —escuché una pausa —Jack solo quiero...
—Lo veo en la oficina, Jefe. —terminó la llamada abruptamente.
Bufe, sabiendo que debía levantarme —me lo merezco —murmure mientras iba en dirección al baño para asearme y volver a la maldita rutina de oficina que, siendo sincero, era la única que me mantenía aun un poco cuerdo. Apenas el agua toco mi cuerpo quise quedarme allí, un lugar donde había tranquilidad y no pensaba en nada.
