Capítulo 2

1.2K 151 14
                                    

La clase de gimnasia era algo que temía profundamente; me vestía despacio, como si en esa protesta silenciosa pudiera evitar lo inevitable. Antes de mi transformación, había sido buena en gimnasia y disfrutaba de los juegos competitivos; me encantaba la intensidad, el impulso de dar lo mejor de mí. Pero ahora... ahora tenía que mantenerme al margen, y al hacerlo, sentía que estaba traicionando una parte de mí. En esta nueva escuela, al menos, nadie sabía lo que antes había sido. No conocían mi habilidad ni mis reflejos; aquí podía esconderme un poco más, aunque aún no sabía bien cómo ser "delicada" en algo que me pedía intensidad. Sabía que, tarde o temprano, alguien notaría que intentaba no sobresalir, y en el fondo, eso me inquietaba. ¿Qué haría cuando nos pidieran algo más que simplemente correr?

"Esto va a ser un desastre," pensé, resignada, mientras salía del vestuario, mirando el suelo hasta integrarme al grupo. Al llegar, vi a los demás estudiantes sentados en las gradas, expectantes. Noté la mirada del profesor sobre mí, un reconocimiento rápido antes de que apartara su vista y continuara con la organización de la clase.

Mis pasos se detuvieron, y mi ritmo se hizo más lento al descubrir, en la primera fila de las gradas, a la diosa de cabello oscuro. Alice. Estaba sentada un poco apartada del resto, y mi mirada se fijó en el espacio vacío a su lado. Era extraño; había un hueco grande entre ella y la chica más cercana. Como si los demás, inconscientemente, hubieran decidido darle espacio. Un espacio que nadie parecía atreverse a ocupar... excepto yo.

Alice se removió ligeramente en su asiento, y pude sentir su incomodidad, su inquietud. Quizás estaba tan fuera de lugar como yo, o eso quería creer. Me acerqué despacio, cada paso lleno de una mezcla de dudas y curiosidad. Cuando nuestras miradas se cruzaron, me di cuenta de que ella me estaba estudiando; sus ojos tenían esa chispa inquisitiva, y su cabeza se inclinó apenas, como si intentara ver más allá de mi rostro, de mi apariencia.

Me senté a su lado, conteniendo la respiración por miedo a que mi olor pudiera molestarla, aunque sabía que no podía hacer nada al respecto. Respiré hondo de forma disimulada, y su aroma llegó a mí como una brisa inesperada, rica y dulce, un perfume tentador que me hizo desear inclinarme más cerca, en un impulso primitivo de querer saberlo todo sobre ella. Pero me controlé; el profesor había comenzado a hablar.

—Vamos a empezar el año escolar con un partido de dodgeball —anunció el profesor con una sonrisa.

Sentí que el pánico se encendía en mi interior. La simple idea de lanzar una pelota y romperle las costillas a alguien sin querer era demasiado posible.

—Mierda —murmuré, y al alzar la vista, noté que Alice me observaba de reojo. Parecía divertida, como si mi nerviosismo le resultara entretenido. Solo pude responder con una sonrisa débil mientras nos dividían en equipos. Sabía que debía ser extremadamente cuidadosa; aunque sentía una urgencia casi dolorosa por impresionarla, tenía que reprimir cada impulso. Me costaba contener el deseo de destacar, de ser vista, de ser notada... pero ahora no tenía opción.

"¿Cómo lo hacía ella?" me pregunté. Alice había tenido que ocultar su naturaleza vampírica por mucho más tiempo que yo. Yo apenas estaba comenzando a entender lo que era vivir como una loba, mientras que ella... ella era un misterio aún más antiguo.

—¿Cómo lo haces tú? —pregunté finalmente, sin poder contenerme. Mis palabras salieron en un susurro, pero cargadas de curiosidad.

—Práctica —respondió Alice, con una sonrisa que me desarmó.

Su voz era tan melodiosa que, por un instante, me perdí en el sonido. Podría haberme dicho cualquier cosa, incluso leerme la guía telefónica, y aun así me habría tenido hipnotizada. Su tono contrastaba con el mío, grave y algo más áspero desde la transformación, pero al mismo tiempo, su sonrisa me hizo sentir que no importaba.

𝑳𝒐𝒃𝒂 𝑺𝒐𝒍𝒊𝒕𝒂𝒓𝒊𝒂 || 𝑨𝒍𝒊𝒄𝒆 𝑪𝒖𝒍𝒍𝒆𝒏 (𝒈𝒙𝒈)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora