76

388 39 10
                                        

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.




No era costumbre, pero esa vez decidí arreglarme en casa. Algo en mí no tenía ganas de vestirse frente a extraños. Me gustaba el silencio de Los Ángeles cuando el sol apenas comenzaba a colarse por las ventanas, aunque no tenía idea de qué hora era realmente. El jet lag me estaba matando. Había vuelto de Oceanía hacía menos de dos días. El tour había sido brutal. Hermoso, sí, pero agotador. Estaba demasiado cansada para fingir emoción por los Grammy. Y eso que no solo tenía que caminar la alfombra: iba a abrir el evento.

Sentía el cuerpo como si siguiera a bordo de un avión que nunca aterrizó del todo.

Estaba sentada frente al espejo, con una bata gris encima y Max recostado a mis pies. Estaba profundamente dormido, una pata sobre mi tobillo, su cabeza pesada contra mi pantorrilla. A veces se movía y suspiraba, como si también estuviera drenado por la gira. Lo envidiaba.

INVISIBLE STRING [H.S] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora