INVISIBLE STRING [H.S]

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El backstage era un caos absoluto. Técnicos y asistentes iban de un lado a otro, managers gritaban instrucciones en sus radios, y algunos invitados intentaban no estorbar demasiado mientras esperaban su turno para saludar a Harry. A estas alturas, estaba acostumbrada a este tipo de ambiente, pero ver a Sophie y sus amigas en medio de todo me recordaba lo abrumador que podía ser para alguien que no vivía esto a diario.

— ¿Siempre es así? — Preguntó Sophie, echando un vistazo alrededor.

— Depende. Cuando hay invitados, es un poco más desastroso — Respondí con naturalidad.

Sophie asintió, más acostumbrada que las otras dos. No era la primera vez que veía a Harry en un entorno así, pero aun así, su admiración por él estaba presente, solo que la manejaba mejor. Hannah y Lily, en cambio, parecían estar en otro planeta.

— Dios, no puedo creer que estemos aquí —  Murmuró Hannah, pegada a Sophie.

— Relájate — Bromeó Lily, aunque estaba igual de impresionada.

Sophie rodó los ojos con una leve sonrisa.

— Si siguen así, Harry va a pensar que son dos muñecas de cera — Bromea tratando de poner más nerviosas a sus amigas.

— Perdón, es que… es Harry Styles — Susurró Hannah, como si decirlo en voz alta fuera un delito.

— Lo sé. Es mi novio — Respondí con diversión, apartando una cortina para llevarlas hacia el camerino.

Toqué dos veces la puerta del camerino antes de abrirla. Harry estaba sentado en el sofá, con una botella de agua en la mano y su teléfono en la otra. Llevaba la misma ropa con la que salió de casa y tenía el cabello aún un poco húmedo, probablemente por la ducha rápida que siempre tomaba antes de salir al escenario. En cuanto levantó la vista y me vio entrar, sonrió de inmediato.

— Oh, mads.

Su voz sonó relajada, como si el caos afuera no existiera. Caminé hacia él sin apuro, ignorando el silencio tenso detrás de mí, y me incliné para darle un beso rápido.

— Te traje visitas — Murmuré, señalando a las chicas que se habían quedado paradas en la entrada como estatuas.

Harry miró a Sophie primero y le sonrió con familiaridad.

— Hey, Sophie. Qué bueno verte.

— Igual — Respondió ella con naturalidad, aunque la forma en que entrelazó sus dedos delataba cierto nerviosismo.

Hannah y Lily, en cambio, parecían en estado de shock.

— ¿Y ustedes son…? — Preguntó Harry, girándose hacia ellas con curiosidad.

— Uh, soy Hannah.

— Lily.

— Un placer conocerlas — Dijo él con una sonrisa amigable.