Que tal lectores!! Primero que nada gracias por seguir con esta historias y los votos! Sé que voy un poco lenta con las actualizaciones pero tuve problemas con mi notebook y bueno también estoy editando la historia. Espero disfruten el capítulo y espero sus comentarios!! Me gustaría saber que opinan sobre la historia.Ah y otra cosa, accidentalmente me salté un capítulo digamos que puse primero el capítulo 17 pero ahora esta corregido y pueden leer ambos!
Sin más que decir, hasta la próxima!
------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Me quedé helada mientras notaba su aliento sobre mi cuello y su fría risa en mi oído. Tardé alrededor de un minuto en ser capaz de moverme. Muy despacio traté de zafar sus manos de mis muñecas y él las sujetó con más fuerza.
Alec volvió a reír.
- ¿ Qué es lo que...?- murmuré mientras sentía sus brazos debajo de los míos.
Volví a balbucear, tratando de liberarme, pero él me silenció.
- Aquí no- dijo cortante.
Me soltó la muñeca izquierda y me jaló fuera del pasillo. Comenzó a caminar con pasos rápidos, pero sin llegar a correr, llevándome lejos del ala norte. Confundida, dejé que me guiará. Llegamos al corazón del castillo, que era un montón de estrechos pasadizos, y aunque no sabía a donde me llevaba Alec, no estaba preocupada, pues el peligro ya había pasado.
Alec tiró de mi brazo, con más fuerza de la necesaria, hasta un estrecho pasillo sin salida. No tenía ventanas pues estaba bajo tierra, y lo único que iluminaba el suelo cubierto con una polvorienta alfombra, era un par de antorchas encendidas sujetas a la pared de piedra. Alec me soltó rápidamente y se recargó en la pared opuesta, me miraba con una sonrisa burlona iluminado por el débil fuego de las antorchas. Estaba desconcertada, él jamás se me había acercado tanto sin irradiar furia u odio... o ambos. Su expresión era de especulación, como si estuviera evaluando desde mi mojado vestido hasta los rizos húmedos que se pegaban al rostro.
- ¿Se puede saber qué demonios te pasa?- pregunté apenas tuve oportunidad indignada, con los brazos en jarras. Ofreciendo el aspecto más ofendido que podía aparentar considerando mi aspecto de gato mojado.
Él volvió a reír. Era una risa fría cargada de un humor negro, como de perverso placer, pero aún así no dejaba de sonar angelical. Me moví nerviosa y noté como la fina tela del vestido se me pegaba al cuerpo como una segunda piel.
- Se trata ni más ni menos de lo que acabas de hacer- replicó él animadamente. Fruncí el entrecejo, olvidándome momentáneamente de las gotitas de agua que escurrían por mis muslos y brazos.
- ¿Hacer qué?
- Lo que hiciste.- contestó divertido. Lo miré exasperada, no entendía nada.
- No estás respondiendo a la pregunta. –agregué con dientes apretados y él suspiró.
- Jamás pensé que vinieras corriendo a delatarte con Aro. Ya me había ilusionado con la posibilidad de chantajearte un poco.
Sus ojos brillaron con malicia y una sonrisa traviesa iluminó su rostro al mismo tiempo que se cruzaba de brazos.
- Pensé en esa posibilidad- repliqué con frialdad mientras que él enarcaba las cejas como gesto de incredulidad, abrió la boca para interrumpirme pero me apresuré a continuar- ¡No soy tonta! Además no me hace ninguna gracia. ¡Como sí me causará algún placer cumplir ordenes de un fanfarrón como tú!
ESTÁS LEYENDO
Fría Eternidad
FanfictionMadeline Blair es una vampireza libre, aventurera, seductora y misteriosa con un pasado coronado con sombras, extraño y nebuloso. Después de vagar por su cuenta mucho tiempo, ha decidido regresar con su antiguo clan, pero entonces Madeline se ve at...