Segunda llamada entrante de Lali -vos-. Rechazó y apagó el teléfono.
-¡Al fin, nene! -El mismo día y al mismo momento que fuiste a pedirle ayuda a Gastón, Peter ingresaba al hogar de Rocío.
-Bueno, che... tampoco es tan tarde. -Y qué raro era que repitan lo mismo. -Me tenes que ayudar, Ro. -Se sentó sobre un puf negro y decidió no moverse hasta que su problema se resuelva.
-¿Con qué? -Ella tomaba asiento en otro puf pero de color celeste.
-¿Cómo con qué? Con Lali, obvio. -Llevó sus manos a su cabellera y comenzó a despeinarse. -No aguanto más, Ro. Vos sos la amiga, te cuenta las cosas... ¿te dijo algo sobre mi?
-Sí, que se yo... algo hablamos.
-Y bueno, vos sos mi amiga entonces me tenes que contar lo que hablaste con ella. -Y le ponía carita de perro para que comience a hablar.
-¡No, no! Así no es la cosa. Son charlas que no se le dice a nadie y menos cuando ese nadie está involucrado en la conversación. -Peter suspiró y se recostó sobre el puf.
-Es que ya no sé que hacer, te juro que pensé que lo que pasó en la gira iba a quedar ahí pero no... hoy me llamó dos veces y no la atendí.
-¿Por qué?
-Porque no sé qué me pasa. Ella se debe estar sintiendo para la mierda con lo que le hace a Benjamín... el flaco la quiere y por más que a mi no me caiga bien, es el novio. -Rocío notó que un par de lágrimas se le acumulaban en los ojos y sonrió.
-¿Te volviste a enamorar de ella?
-No sé Ro... -Dijo en un suspiro. -Ayudame.
Llevaron el puf negro hasta la habitación de tu amiga y allí se instalaron con dos vasos de chocolatada y un paquete de galletitas dulces. Colocaron una cartulina blanca en la puerta del armario, Peter se encargó de pegar fotos tuyas en ella y darle un beso a cada una.
-Bueno, hagamos así. Vos me vas diciendo que es lo que te gusta de Lali y yo lo anoto. Después vemos si estás enamorado de ella o es calentura solamente. -Y sacó una lapicera de un cajón de la mesita de luz.
-Es buena. -Dijo Peter después de tomar un sorbo de chocolatada. Rocío comenzaba a escribir. -Está buena... y es buena en la cama.
-¡Peter! No voy a escribir eso.
-¡Pone que es buena en la cama, Rocío!
-¡No! A ver... ¿Qué sentís cuándo la ves? -Siempre fue muy sentimental.
-No esperes que te diga mariposas en la panza. -Advirtió y Rochi revoleó los ojos. -Pero... sí, que se yo...
-¡Hablá, Juan Pedro! -Ya se estaba poniendo histérica como vos.
-Me muero cuando la veo, el corazón se me va a la garganta. Siempre intento que no se note pero... no sé, me hace bien verla. Cuando cortamos me sentía como el orto, y vos sabes que fue por mi culpa... -La rubia asintió y se acercó para acariciarle el pelo, ese que tanto te gusta sea largo o corto. -A veces la llamaba sólo para escuchar su voz y por ahí le salía con un tema boludo para que me hable. -Peter suspiró y se limpió una lágrima que rondaba la mejilla. -No sabes como me arrepiento de haberle dicho todo eso, te juro que si pudiera retroceder en el tiempo me pegaría una trompada y cambiaría todo. Por eso la entiendo, porque la hice sufrir. Y por más que cuando empezó a salir con Benjamín a mi se me infló una vena yo... no sé... me hace bien que ella esté bien.
-¿Te hace bien que ella sea feliz con otro? -Y esas preguntas que te hacía Rochi eran para matarla.
-Al principio no me importaba... o trataba de ignorarlos. Lo que pase ahora no depende de mi... yo me la busqué y la perdí, punto. Si ella es feliz con él se lo tiene merecido pero... -Su labio comenzaba a temblar. - pero... la extraño.
Rocío abrazó a Peter para que llore sobre su hombro, trataba de calmarlo. Le acariciaba la espalda, lo despeinaba un poco, le daba besos en la mejilla mientras lo acunaba. Porque sí, cuando él lloraba parecía un nene de corta edad que solo necesitaba mimos para tranquilizarse. Pero no los mimos de ella precisamente.
-Tranquilizate un poquito. -Le acercaba un vaso de agua, él lo agarró pero no tomó ni siquiera un sorbo.
-Me siento un pelotudo. -Y sonrió un poquito por el hecho de estar con los ojos colorados, la cara empapada por lágrimas y la voz un poco quebrada.
-No. sos un tiernito. -Le frotó un poco la espalda. Se volvieron a abrazar. -Lali está confundida ¿sabes? Y nunca es tarde para recuperarla.
-No se, Ro. Yo veo que ella todavía siente cosas por mí pero tengo miedo.
-¿Miedo a qué? -Se separó un poquito para verle la cara.
-A todo. A volver a lastimarla. A que no sea lo mismo que antes. A mí, me tengo miedo a mí.
-No digas esas cosas, tonto. ¿Por qué no hablas con ella? Capaz que así se le va un poco toda esa confusión. Contale todo lo que me dijiste.
-No, Ro. -Y se dio vuelta para recostarse en la cama de su amiga. -No me sale hablar con ella. Quiero decirle hola y la termino besando. Quiero decirle te amo y terminamos en las sábanas. -Rocío saco una risita porque recordó la mañana del hotel en que los había visto desnudos.
-Por ahí necesita eso. -Se recostó al lado de él. -Que la ames un poquito a tu forma. Ella te conoce más que nadie no creo que tengan problemas para entablar una conversación como la gente. Y si terminan revolcándose... por lo menos que sea con amor.
-Que se yo... -Ya se estaba resignando.
-Sí, Pitt. Donde hubo fuego, cenizas quedan. Tenes una posibilidad enorme de volver con ella, no te la podes perder. Que te salga como te salga, si es con palabras que sea con palabras, si es con besos que sea con besos pero si seguís esperando se van a volver viejos y cuando te quieras acordar Lali ya va a estar casada, con siete hijos. -Y se dio vuelta para mirarlo. -Ninguno de los dos va a ser felíz, porque no quiere reconocer que no está enamorada de Benjamín.
-¿Y vos? ¿Ya reconociste que estas enamorada de Gastón? -Peter se rio de la cara de Rocío. -Vez que no es tan fácil.
-Yo sí lo reconozco, que no me anime a encararlo es otra cosa. -Y se recostó en el pecho de su amigo.
-Para mí que Gastoncito también siente cosas por vos pero tampoco se anima. Se ve que somos todos cagones... ¿Querés que hable con él?
-Vos ocúpate de hablar con Lali, ya voy a ver que hago con Gas.
-Tengo una idea. - Y se puso de costado para mirarla. -Si Lali me da vuelta la cara y vos no te animas a encarar a Gastón, nos casamos y ponemos a Benjamín como padrino. -Se rieron y chocaron manos. ¿Habrá dos bodas?

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Secretos Laliters
FanfictionSinopsis: El primer amor es el más fuerte, se vive con más pasión, más energía, más emoción y más adrenalina. Durante esta etapa haces muchas cosas que nunca pensaste que harías, compartis momentos con la persona a la cual más amas, la que es tu mun...