Once.

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"-Ya pasó, La, ya pasó... - La agarraste de la cintura para impulsarla y desprenderte de ella pero se aferró más a tu cuerpo. No te quedó otra que volver a frotar su espalda.

-Perdoname... por todo. -Te lloraba en el oído y eso te hacía peor. Dejó que su mano derecha se hunda entre tus pelos, el cuello lo sentías demasiado húmedo por la mezcla de sus lágrimas con las tuyas. Mariana apoyaba su boca sobre tu hombro y te hablaba desde ahí. -Te extraño. -¿Y vos? ¿La extrañabas? Notó tu silencio y de a poco se separó, buscó una servilleta de papel para limpiarse la nariz. -Peter, quiero que sepas que te entiendo, que sé que debe haber sido feo todo lo que pasó y... nada, yo estoy dispuesta a esperarte.

-Lali, no es sólo eso...

-Dejame terminar. A mi me gustaría verte bien y si yo no soy parte de tu felicidad te voy a entender. Si sos feliz con otra chica o no sé... te lo mereces pero no tengo problema en esperar sentada porque sé que muy en el fondo está guardado todas las ganas que tenes de volver conmigo.

-¿Puedo hablar ahora? No se trata de que me esperes ni de que yo me tome un tiempo. Se muy bien lo que siento por vos y eso no lo va a cambiar nadie. Se trata de que vos te tomes un tiempo, La. No podes salir de una relación y entrar a otra cada dos segundos, necesitas un lapso, tenes que pensar, descansar tu mente. Todavía no lloraste a Benjamín y sabes muy bien que estas sufriendo por eso. ¿Me prometes que vas a disfrutar de tu soledad? -Asintió.

-Está bien.

Te levantaste, abriste la puerta, miraste a tus amigos que estaban con la oreja en la puerta vecina y apretaste el timbre del ascensor. Rocío se fue con vos y Gastón y Nicolás entraron a ver cómo estaba Mariana."

Entonces los meses pasaron. Las noticias sin anticipo volaron por todo el mundo y ya las revistas hablaban de la separación de Mariana con su, ahora sí, ex Benjamín. Formaban hipótesis de lo que pudo haber ocurrido como para que la relación se termine e increíblemente las fans estaban demasiado felices.

Pero claro que eso no era todo, ahora también aprovechaban para sacarles fotos en cada momento que pasaban juntos. Es por eso que un simple acercamiento para un beso en la mejilla se transformaba en un "a punto de besarse", es por eso que cada vez que iban a cenar con demás amigos se creía que la pareja se volvía a formar. Es por eso que se acrecentaban las cercanías en los shows del Gran Rex que habían comenzado hace poco y es por eso que una parte de vos quería terminar esta semi amistad que creían tener.

Te pusiste de pie para aplaudirla, hoy se estrenaba "Las Brujas de Salem" y junto con tus compañeros de banda y algunos familiares decidieron ver su debut como actriz de teatro. Una cena entre amigos para felicitarla sellaba el día y luego te viste estacionando tu auto en la vereda de tu casa. Tu mamá y Bautista que habían ido con vos se bajaron de inmediato para descansar de un día agitado, vos decidiste quedarte pensando con la cabeza pegada al volante.

"-¿Lista para grabar el casamiento de Mar y Thiago? -Ese día iban a realizar la tan famosa escena de colores azul, amarillo y verde aunque todavía faltaban horas para hacerlo pero ya venías con el libreto en la mano. Interrumpiste su camarín mientras escuchaba un poco de música, Euge y Cande salieron al verte.

-Sí... -Palmeó el puff que había para que te sientes a su lado. -¿Podemos charlar un segundito?

-¿De qué? ¿De nuestro casamiento? Yo diría que esperemos un poquito. -Y la agarraste de la nuca para mostrarle el camino hacia tu boca.

-No... estoy hablando en serio.

-¿Pasó algo? -Sí, Peter pasó de todo.

-¿Viste Benja? -Asentiste. -No que... hace unos días vino a decirme algo que me pareció raro y me puse a pensar...

-Redondea.

-Sí, em... me vino a plantear que está enamorado de mí. -Por un acto reflejo se cerró tu puño. ¿Enamorado? ¿Y los códigos? ¿Por qué no habló con vos antes de decírselo a ella?

-¿Y eso que tiene que ver? ¿Desde cuándo que siente cosas por vos?

-Según él desde que entró.

-O sea que desde el año pasado me quiere ver muerto y cada vez que hablábamos de vos en realidad tenía ganas de clavarme un cuchillo. -Fue tu conclusión.

-No sé si será tan así pero... me puse a pensar un poco en nuestra relación.

-Para, no me vengas a decir que las palabras de un flaco que no tuvo códigos conmigo te hizo suponer que lo nuestro tiene que terminar. -Agachó la cabeza y vos comenzaste a respirar un poco más fuerte. -¿Lali?

-No terminar... por ahí darnos un tiempo.

-¿Qué tiempo? Si nosotros estamos bien, si... ¡el pelotudo este te viene a confesarte y de repente ya no sentís nada más por mí! ¡No, ya se! Siempre estuviste enganchada con él y metes la excusa más vieja del mundo.

-No, Peter. Lo único que pasa es que no sé, siempre fuimos vos y yo y hay millones de personas en el mundo. Nos tomamos un tiempo y si nos damos cuenta que queremos estar juntos...

-Vos te lo tomas todo muy fácil, yo sé muy bien lo que siento por vos ahora mismo y si dentro de un tiempo venís a buscarme pero no quiero saber nada más con vos ¿qué? ¿Te vas a querer meter las palabras por el orto?

-No sé, Peter... pero ya no podemos estar juntos."

Sí... esa escena que te hizo te sacó de las casillas. Tanto que saliste dando un portazo y entraste al camarín de tu, ya no, amigo para plasmar ese puño cerrado sobre su cara con demasiada fuerza.

Vos mismo se lo habías pronosticado, en algún momento ella iba a querer volver y así pasó. Ahora sos vos el que tenes que decidir. Desde marzo que ella la viene remando para que la perdones pero obviamente ya lo hiciste hace rato, muchas charlas con Rocío te hicieron entender que un deslice en una relación lo puede tener cualquiera y que el secreto está en cuanto se decide volver a pelearla juntos y decidir si quieren ser la misma pareja de antes o ser una nueva.

Pusiste en marcha el auto y te concentraste, con Mariana últimamente se habían echo muy cercanos. Ella te había prometido que no iba a interferir en tu vida amorosa y así lo hizo. Lo que ni ella ni nadie entiende es que vos no querías tener una relación amorosa con otra persona que no sea tu ex, por eso era que tus salidas nocturnas y tus romances de una noche siguieron con el correr de los meses.

¿Tenes ganas de seguir de joda en joda o queres sentar cabeza en una relación con ella? Mariana estaba dispuesta y te lo hacía saber cada vez que te miraba, cada vez que te agarraba de la mano en alguna caminata, cada vez que se te acercaba de más en algún show, cada vez que te besaba la mejilla con ganas de hacerlo en otro lugar y vos que le sonreías cada ves que demostraba alguno de esos gestos porque prometió que te iba a esperar y lo está haciendo hace bastante.

Estacionaste el auto en frente de su edificio y tocaste timbre por el portero eléctrico.

-¿Quién? -Escuchaste una voz metálica a través.

-¡Peter! -Contestaste fuerte porque un colectivo pasaba cerca y el ruido no le iba a permitir escucharte.

-¿Abrió? - Escuchaste el mecanismo que abría la puerta desde su departamento.

Entraste directamente y pulsaste el botón del ascensor hasta el sexto, ella ya te esperaba con la puerta abierta y apoyada sobre el marco con su bata rosa en el cuerpo.

-Te hago una propuesta. -Fue tu saludo. -Volvemos pero a mi forma. ¿Te animás?

Secretos LalitersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora