Epílogo.

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Cami llegó a su casa después de una larga mañana en el colegio. Almorzó sola porque sus padres trabajaban y aprovechó para dormirse una larga siesta. A las tres y treinta de la tarde se despertó con la alarma del celular que había activado antes de acostarse y ni loca se iba a permitir los cinco minutos más. Rápidamente se lavó la cara y encendió la computadora. Abrió su twitter y se quedó navegando por internet hasta que a las cuatro en punto un link apareció.

-¡Hola! ¿Se ve? ¿Se escucha? -Preguntó Lali haciendo señas delante de la webcam que los grababa para que el mundo entero los vea.

-Sí, ahí están escribiendo. -Contestaste y te sentaste a su lado, abrazándola de costado. -Para todos los que querían una twitcam nuestra ¿no, La? -Pegaron mejilla con mejilla y sonrieron. Las fans lo único que escribían eran intentos de gritos expresados en palabras.

-Bueno, pregunten, ¿qué es lo que quieren saber? -Ella siempre tan histérica. -Peter, te amo... -leía en el monitor.

-Ya sé... -Le contestaste y todos adoraron a la fan que escribió eso para que esa escena Laliter ocurriera. Ellas eran así.

-Peter, te doy... -Ya se aburría de leer comentarios parecidos.

-No digas esas cosas frente a cámara. -Te reíste y ella se mordió el labio.

-Peter, te hago diez hijos.

-¡Aguantá! Ya tenemos uno. -Disfrutabas molestarla y los fans disfrutaban de esto a pesar de que el video se les tilda cada dos segundos y el sonido no coordinaba con la imagen ni a gancho.

-Está durmiendo... -Respondió Lali cuando leyó a una chica que preguntaba por el susodicho. -Estaba... -El llanto se hizo presente y tu novia se escapó para ir a calmarlo.

-¡Traelo, La! -Le pediste cuando leías tweets reclamándolo en la pantalla. Mariana apareció a los minutos con un bebé, cerca de un año de edad, igual a vos. -Acá está, Juan Manuel Lanzani. -Y se lo quitaste de los brazos para pararlo sobre tus piernas.

-¿Por qué le pusieron Juan Manuel? -Leyó a una fan de Colombia. -Juan por Juan, no sé que tiene tu familia con ese nombre. -Te criticó.

-Te dije que es tradición. -Pelea en vivo y en directo.

-Y Manuel porque me gustó. Si fuese por el padre seguiría sin nombre, el chico. -Le dejaste un beso en la mejilla para tranquilizarla.

-¿Tiene los lunares del papá? -fan de Uruguay. -¡Seeeeeee! -Gritaste levantando las manitos de tu hijo. -¿Se ven? -Lo acercaste más a la camarita para que se vea la pequeña manchita en el cachete izquierdo.

-Y también tienen la misma sonrisa. ¿O no? -Le preguntó graciosa a JuanMa porque él sonreía de costado como vos. -A ver que más... -Y agarró el mouse para buscar alguna pregunta... -Un beso a las Laliters... un beso a España... ¡a Rosario! ¡¿Un beso a las benjalis?! -Fruncieron las cejas los dos.

-¿Todavía quedan? -Te codeo porque te zarpaste.

-¿Para cuando la parejita? Eh... no sé, por ahora no. ¿No?

-Nah, primero disfrutamos de uno. Ya va a llegar Allegra.

-¿Casamiento? -Leyó a una de México.

-Algún día... dentro de unos años. -Contestaste. -¿Vos te queres casar conmigo? -Lali se rio porque sabía que se lo hacías a propósito.

-Obvio, nene. -Chocaron labios y sepan que esa imagen de ustedes dos besándose con JuanMa en el medio iba a ser la foto de perfil de todas las Laliters.

-¿Es verdad que van a estar en una novela juntos? -Negaron con la cabeza.

-Tenemos muchas propuestas pero no, no vamos a trabajar juntos.

-Por ahora, después la convenzo. No se preocupen. -Guiñaste el ojo porque te encantaba estar a favor de las fans. Y ellas que te amaban.

-¿Cómo se porta JuanMa? ¡Bien! Es un santo. Hermoso de la mamá... -Te lo arrancó de los brazos para llenarlo de besos porque estaba enamorada de su hijo y él de ella.

-Bueno, bueno... es mi novia no la tuya. -Agarraste sus piernitas para tirar de ellas y que se separen.

-¡Soy la madre! -Y ya estaban por partir en dos al chico. Las fans apostaban por quien ganaba la pelea, lloraban, se reían y hasta tosían de la emoción.

-¡Sí! -Le contestaste a una fan de Córdoba. -Obvio que va a jugar en Alumni.

-Ya tiene la remerita del equipo. Es así. -Hizo un tamaño extra small con las manos y puso carita tierna.

-¿Por qué dicen que te vas a Brasil con tus amigos? -Leíste desde la pantalla.

-¡¿Cómo que te vas?! -Se alteró. -Ya te aviso que te vas y no ves más al chico por el resto de tu vida.

-Shhhhh. -Te acercaste demasiado a su boca y dejaste un pico sobre ella. -Ya se terminaron hace rato las vacaciones con amigos. -Miraste a la camarita. -Ahora me dedico a ser papá.

-Te conviene. -Reíste. Sus celos no iban a terminar más. -¿Se pelean muy seguido? ¡Yo no peleo con nadie! -Le discutía a la fan.

-Todos los días nos peleamos. -Tu sinceridad.

-Porque vos no le querés cambiar los pañales, pobre mi chiquito que está todo sucio hasta que llega la mamita. -Se dispuso a acunar a JuanMa que le estaba entrando el sueño.

-Y vos no te querés levantar a la noche, lo tengo que hacer yo.

-Yo lo parí. Y los Lanzani son cabezones. -Te lo criticó durante el parto mientras hacía fuerza para dar a luz.

-Disculpame, si querés no buscamos a ninguna Allegra.

-No, sí. Quiero, quiero. -Se arrepentía y a los dos segundos la pelea ya estaba resuelta. -Bueno, una última pregunta y terminamos así voy a acostar a JuanMa. -Ya estaba completamente dormido en los brazos de la madre.

-¿Qué sintieron cuando tuvieron por primera vez a JuanMa en sus brazos?

-Para mí, fue algo único, nació mi primer hijo y de la persona que amo. Creo que es un sentimiento inexplicable, irrepetible e inolvidable lo que me pasó ese día.

-Yo creo que es la razón por la cual preferimos olvidar todos los malos momentos y pensar en él y en todo lo que se nos está por venir. ¿No? -La miraste y te sonrió con un par de lágrimas en la cara.

La besaste y con esa imagen de los tres juntos se terminaron los secretos.

Gracias por leer esta historia. Es una de mis favoritas y queria compartirla con ustedes. Nunca dejen de creer en laliter, resistir es lo unico que nos queda cuando ya nada nos queda.
Voten por favor.

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