Llegó la navidad más rápido de lo que imaginé, y con ella, mi cumpeaños.
Ese día me dejaron dormir hasta tarde, lo que me encantó, pero al ir a la cocina me encontré a mis compañeros rodeándome y a la cocinera acercándose a mí con un pastel y una brillante vela en el centro.
Mentiría si dijese que no me sorprendió.
Me cantaron y pidieron que pidiese un deseo antes de apagar la vela. Entusiasmado me acerqué, y pensé en mi deseo, pero una frase cruzó por mi mente.
"Nunca crezcas Peter"
Y la vela se apagó.
Pero no estaba feliz, ya que si celebraba mi cumpleaños, significaba que crecía.
Y rompería mi promesa.
Tiré la tarta de la mesa, y esa fué mi última fiesta.
Hasta que llegaste tú.
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Cartas a Wendy [#1.5]
Short StoryCartas dirigidas a la chica que nunca las llegaría a recibir. Acabando abandonadas en un pequeño cofre; y ahí, en el fondo del cajón, quedaron ocultos los pensamientos de Peter Pan. #472 historia corta 21/09/16