Al término de la hora, nos fuimos a la siguiente clase; en esta nós tocaba separados, por suerte no estuve sola. A Mario le tocaba igual en esa clase, así que me senté al lado de él; le conté entusiasmada lo que había pasado en Química, él me miraba haciendo varias muecas y negando con la cabeza.
— Bueno, lo que te puedo decir es que no te apresures. Ve con calma, aún no sabes si él esta realmente interesado en tí o tú estás viendo las cosas de otra forma. — Suspiré un poco triste. Tiene razón.
— Tienes razón, Mario. Iré con calma; — contesté como si me hubieran regañado, — pero es que, es tan...
— ¿Idiota? — dijo tratando de completar la frase.
— ¡No! Es tan lindo. — solté un suspiro.
— Sólo te aviso que si él te hace sufrir, lo voy a golpear tan fuerte en su "linda" cara, — dijo entre comillas, —para dejársela deforme y así que a las chicas les deje de parecer "lindo". - dijo la última palabra en un tono de mujer, por decirlo así.La clase no estuvo aburrida, Mario me hacía platica mientras trabajábamos en el cuaderno.
La hora de salida por fin llegó. Salí de ahí acompañada de Alan y Sam que habían estado conmigo en la última clase. Me despedí de ellos para buscar a Mario, (ya que siempre él me llevaba a mi casa), cuando lo vi en su auto platicando con unos amigos de él, apresuré el paso porque seguro que me estaba esperando. Sentí a alguien tomarme de las muñecas provocando un dolor en ellas, era Bryan, (otra vez). Traté de no soltar un gemido de dolor, pero fue inevitable. Lo bueno fue que él no lo escucho. Me solté de su agarré y luego lo miré.
— Bryan, eres tú. — sonreí tratando de ignorar mi dolor, pero creo que en vez de sonreír, fue una mueca.
— _____... Me preguntaba si qui-quisi-quisieras que te-te lle-lleve a tu ca-casa... — dijo con ficultad. — reí, estaba nervioso; el gran Bryan "meacuestoconcualquiermujer" Mouque se había puesto nervioso al preguntarme eso.
— Claro. —sonreí. — Oh... — recordé a Mario.— Espera, debo avisarle a Mario. — volteé a ver a mi amigo, ahora no estaba con compañía, sino todo lo contrario. Nos miraba fijamente con el ceño fruncido. Me acerqué a Mario acompañada de Bryan.— Mario, Bryan se ofreció a llevarme; lo siento, te prometo que mañana nós iremos juntos. — hice una cara suplicante para que no dijera nada malo. Él asintió con semblante serio, me dió un beso en la frente como siempre lo hacía cuando me quería proteger, vió sin ninguna expresión a Bryan y luego regresó su vista en mí.
— Mañana te veo, ____. — sonrió y luego se dió la vuelta para entrar a su auto. Tomé a Bryan del brazo para luego ir a su auto; ya no supe más de los otros chicos, (amigos de Mouque)Entramos a su auto. Bryan iba sonriendo, y yo igual; al fin él sabía que yo existía. Había comido conmigo, me había tomado de la cintura para juntarme con él, me había tomado de la mano, incluso ahora se había ofrecido a llevarme a mi casa. Que ironía yo era la antisocial y ahora estaba acompañada por uno de los chicos más atractivos y deseados por casi todas las chicas del instituto, esto era un sueño del cuál nunca quería despertar.
— ¿En qué tanto piensas? — preguntó Bryan sacándome de mis pensamientos.
— Nada en especial. — encogí mis hombros.
— ¿Qué te parece si te invito una malteada? — preguntó cuando estaba el semáforo en rojo.
— Me encantaría. — sonreí grandemente.Bryan se desvío del camino, tiempo después llegamos a un local muy lindo. Como todo un caballero bajó del auto rápidamente y antes de que yo abriera la puerta de su auto, él la abrió por mí y como siempre me sonrió. Entramos al local y nos sentamos en una mesa que estaba en la esquina.
— ¿De qué quieres tu malteada? Yo la quiero de...
— ¡Fresa! — dijimos al unísono, luego reímos.Fue a pedir las malteadas. Después de unos minutos ya estábamos tomando esas deliciosas malteadas; esta vez Bryan me contó de su vida. Resulta que Alan, Alonso, Jos y Freddy, era sus mejores amigos, en especial Freddy, Bryan le había contado muchas cosas a Freddy y Freddy a él, pero prometieron que nunca se lo dirían a nadie, como mejores amigos que eran. Dijo que tenía papá, mamá y una hermana, pero su hermana casi nunca estaba en casa. También me conto que no le hace falta nada, pero que tiene que terminar sus estudios si es que quiere que su padre le deje a cargo la empresa, pero que el padre de él no era el único que pensaba en eso, sino que también los padres de Jos, Alan, Freddy y Alonso. Da el caso que sus papás también eran amigos, no los mejores como ellos, pero había veces en que se reunían a tomar unos tragos y a platicar. Estaban muy de acuerdo en que sus hijos en un futuro fueran socios, también me contó que Alonso y Alan son los más "responsables" de los cinco. Ellos obligan a los demás a ir a clases, para que después no se queden en la calle sin un peso, y porque no quieren que sus futuros socios, sean unos buenos para nada y unos idiotas. Reí mucho con eso, Bryan igual.
Al estar un poco más de una hora ahí, Bryan me fue a dejar a mi casa. Se despidió de mí con un beso muy cerca de mis labios y eso hizo que me pusiera roja. Salí de su auto, no sin antes darle las gracias por todo, el sólo asintió con una linda sonrisa en su rostro.
Entre a mi casa sonriendo, ¡este día había sido fabuloso! Pero yo siempre había tenido algo muy en claro: la felicidad no dirá por siempre, cada vez que estés o más bien que yo esté feliz, va a haber algo o alguien que va a arruinar todo.
Fui a la cocina aún con mi mochila en mis hombros, tomé un vaso de agua para llevarlo a mi habitación y ahí tomarlo. Iba subiendo las escaleras cuando escuche la voz de mi madre, — ¿qué estará haciendo aquí? — pensé.
— Mande, mamá.
— ¿Quién era ese chico? — preguntó seria.
— Un... ¿Amigo? — lo dije en un tono de pregunta.
— No lo conozco, no sé que intenciones tenga contigo, ____. — frunció el ceño. Me chocaba cuando mi mamá se ponía en el plan de ser "buena madre".
— Dice la verdad, ¿apoco crees qué ese chico guapo se fijaría en ___? Sólo mira cómo se viste, mira su cabello, es un desastre. — comentó Kim con desagrado. Mi mamá no dijo nada, estaba seria; Kim se rió de mí, mis ojos se aguadaron, quería llorar.
— Te quiero lejos de ese chico, ¿entendido? — me ordenó mi madre con autoridad, entonces las lágrimas salieron de mis ojos, pero esta vez con coraje.
— No, mamá. Tú no conoces a Bryan. Te pido que no lo juzgues sin antes conocerlo, ¿por qué todo lo que me hace feliz para ustedes es molesto? ¡¿Por qué?! - pregunté con dolor.
— ¡Ay, ____! ¡No me salgas con eso! Deja de llorar y consíguete otros "amigos" — dijo entre comillas.Estaba más que molesta, pero también triste, estaba destrozada. Era una mezcla de emociones que sólo me hacían daño. Subí a mi habitación, puse seguro a mi puerta, me eché a mi cama a llorar, ¿por qué cuando estaba más que feliz, siempre había alguien que lo arruinara? ¿Por qué mi madre me prohibió verlo? Se supone que las madres quieren lo mejor para sus hijos, pero ella estaba haciendo todo lo contrario. Bryan era lo mejor para mí, ¿por qué Kim me odiaba? Se supone que los hermanos se deben de apoyar, parecía como si ella me aborreciera. Me sentía destrozada, sola. Fui a mi baño, tomé una de mis navajas y de nuevo empecé con lo mío.
* * *
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¡Paz!PD. Tal vez mañana suba otro capítulo, ah y también les quería decir que subiré capítulos los Miércoles, Sábados y probablemente los Domingos también ╯﹏╰
Editado. 02.10.16
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La Chica de las Pulseras Negras. | Bryan Mouque |
FanfictionElla: Una chica suicida, su madre pareciera que no la quiere, su hermana la detesta y su padre aveces ni se acuerda que tiene familia, ella sólo quería un final feliz; cuando por fin pensó que lo iba a tener, todo se viene abajo. "El amor de su vid...