La Chica de las Pulseras Negras. | Bryan Mouque |

Capítulo 41. << Final >>

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Guardé la carta en el cajón de mi mesita de noche, me acosté en mi cama, puse mis manos sobre mi cara. Tenía que hacer algo, pero no sabía que. ¿Tendría que detener a Bryan? ¿Ó dejarlo ir? Puedo hacer una vida al lado de él, empezar desde cero, ¿no? Todos merecen otra oportunidad. No logré conciliar el sueño, sólo pensaba que lo que haría sería una locura.

En la mañana le marqué a Alonso, preguntando por Bryan. Me dijo que sus papás le harían una comida de despedida y al terminar él y los chicos llevarían a Bryan al aeropuerto. Le dije lo que iba a hacer, él me hizo muchas preguntas acerca del plan, pero estuvo de acuerdo.

Al terminar de hablar con Alonso le marqué a Mario, él me ayudaría con todo.

Este era el plan, en realidad no era la gran cosa, sólo iría a detener a Bryan para que no se fuera, pero no podría ir a su casa, ya que no conozco a sus papás. Iría al aeropuerto y estando ahí iba a hablar con él, Mario me llevaría hasta allá.

Horas después Alonso me mandó un mensaje avisándome que ya se irían al aeropuerto, subí al auto de Mario para ir al aeropuerto, había empezado a llover, el trafico había aumentado e íbamos despacio, faltaba menos de un kilómetro para llegar, estaba desesperada.

- Mario, iré corriendo, ¿bien? Tú me alcanzas allá. - le di un beso en la mejilla y salí de su auto. Él empezó a decir no sé que cosas, vi la hora, faltaba muy poco para que Bryan se fuera, empecé a correr, rezaba porque no me atropellaran y que no me cayera gracias a los charcos.

Al llegar al aeropuerto entre corriendo, busqué con la mirada a los chicos, y ahí los vi. Hacían su abrazo grupal, Bryan me contó que no lo hacían en público porque les daba vergüenza, pero creo que esta vez hicieron una excepción. Bryan se despidió de ellos agitando su mano, corrí detrás de él, antes Alonso me vió.

- Creí que te habías arrepentido. - dijo riendo.
- Creíste mal, - conteste dirigiéndome al área que estaba Bryan.

Al llegar ahí lo vi, mi corazón se empezó a acelerar más, espero que todo esto haya valido la pena.

- ¡Bryan! - grité pero no volteó, grité de nuevo su nombre pero solo conseguí que un señor me viera con una mala expresión. ¡Bryan Mouque! ¡Voltea! - él por fin volteó. Se salió de la fila, y se acercó a paso lento hacia mí. - No te vayas, por favor. - dije llorando. Él me vió serio.
- Debo irme, ____. Es por el bien de los dos. - respondió cabizbajo.
- Al carajo el bien de los dos, tú eres mi bien, eres todo lo que necesito ¿no lo entiendes? Me di cuenta que tú eres el que me hace ser fuerte, el motivó de mis sonrisas, de mis desvelos, el motivo por ello cual yo estoy aquí. Eres el gran motivo por el cual corrí desde una avenida llena de carros, entre la lluvia para detenerte. Sólo quiero estar contigo, si te vas no podría soportarlo. Olvida esto de irte, - apunté sus maletas. - Vamos a intentarlo de nuevo, ¿sí? - él me tomó de mi cadera para besarme, esto significa que lo había logrado. Bien, todo valió la pena. Me deje llevar por el beso, lo abracé lo más fuerte que pude. - Me llamo, ____ ¿y tú? - pregunté al terminar de besarnos. Él se empezó a reír y me beso de nuevo.

- Genial, creí que no lo habías alcanzado. - se escuchó la voz de Mario. Volteé y vi a los chicos ahí, sonreí y abracé de nuevo a Bryan.
- Si te vas a ir de nuevo, que no sea porque piensas que estoy mejor sin tí, ¿bien? - dije juntando su frente con la mía.
- Te amo, - dijo Bryan dándome un corto beso.

Los chicos cargaron las maletas de Bryan porque yo les dije, aparte estaba cansada, obligue a Bryan para que me subiera en su espalda y así que me llevara al carro de Mario. Las personas nos miraban de una forma tierna, bajé la mirada sonrojada y salí de ahí con Bryan.

* * * *

Meses después...

Pasaron los meses, Bryan y yo íbamos muy bien en la relación, los chicos estaban muy bien, seguían siendo unos inmaduros, pero así los quiero. Mario me contó que ya tenía novia, le di un golpe, ya llevaba con ella más de dos meses y no me había dicho. Sam regresó, ese día lloré de felicidad, nos pusimos a llorar y a gritar en el aeropuerto, todos nos miraban y reían, creo que Bryan paso más vergüenza, ya que él me llevó a esperar a Sam. Sobre la terapia con Camila, todavía iba a unas sesiones, me dijeron que tenía "bipolaridad". Me explicaron que por esa razón aveces reaccionaba de diferente humor, también por esa razón golpeé a la chica en el instituto, aveces tenía mucha energía y otras no. Pero ya me había calmado, Bryan me había ayudado mucho al igual que los chicos y Sam. La relación que llevaba con Víctor y Kim cambió, ellos ya no me tratan mal, mamá seguía trabajando pero siempre me llamaba y así no me sentía sola. Aunque nunca lo estaba, Bryan siempre estaba conmigo. Regresamos al instituto, todos hablaban de nosotros pero no nos importó, él y yo estábamos felices y era lo único que importaba.

Toda mi vida había cambiado, era feliz, Bryan y yo teníamos nuestras altas y bajas, pero así son todas las relaciones, ¿no? Él estaba perdidamente enamorado de "La chica de las pulseras negras" dice que así me llamaba cuando no sabía mi nombre. Bueno, él es mi razón de vivir, es por él que estoy aquí con vida, mi corazón tiene el nombre de Bryan grabado.

¿Quién dijo que una suicida no puede tener un final feliz?

<< Fin. >>

Se acabó :c
Me siento triste, pero feliz, ya que he logrado mucho con esta novela.

Mañana subo el epílogo y los agradecimientos :')

Voten y comenten, por favor :3

Las amo, beibes \•~•/

Por favor lean "Mi Chico Tumblr" subí esa historia hace unos días, ahí subo todo lo que me pasa con mi crush, si tienen uno tal vez se sientan identificadas. ;)

También no se olviden de leer "Algo Casi Imposible" de Breddy Meyva (:

Paz!