Bajo el mismo techo

Capítulo 22

-Esto... Hola, Logan-lo saludé y de inmediato me mordí el labio con arrepentimiento. Lo había plantado con mi falsa enfermedad y aquí estaba riéndome con Becca-Qué casualidades de la vida ¿No?

Frunció el cejo con notable confusión y luego entrecerró los ojos.

-Creí que estabas enferma. Dijiste que estabas enferma.

-¿E-eso dije? ¿En serio?

-Si no querías salir conmigo solo tenías que decírmelo.

-No, no es...

-Fui yo-habló Becca de repente-Yo te envié el mensaje porque Claire estaba en el baño y yo cogí el móvil en su lugar. Te dije eso porque teníamos que estudiar y sabía que ella estaría muerta por quedar contigo y no querría estudiar-lo que más me sorprendió de la declaración de Becca (aparte de que fue jodidamente buena) fue que lo dijo completamente indiferente, como si fuera lo más común del mundo.

-Oh, en ese caso. Lo siento-se disculpó Logan-Con que estás muerta por salir conmigo ¿Eh?-dijo con una sonrisa torcida.

Sonreí de vuelta. No por quedar bien ni por hacerlo sentir mejor, esta vez sonreí porque me apetecía sonreírle.

-Solo un poco.

-Mi propuesta sigue en pie-añadió.

-¿Cuándo?

-¿Mañana?

-Hecho.

-¿En serio?-parecía impresionado.

-Sí.

-¿En Millenium Park a las cinco?

-Sí.

Llevaba unos shorts vaqueros y una camiseta ancha hasta debajo de mi ombligo. Me hice una trenza desenfada y por primera vez en mucho tiempo cogí un pequeño bolso que combinaba con mi atuendo. Yo nunca llevaba bolsos, nunca. Pero supongo que esta cita lo "requería". Becca había quedado en llevarme y estaría a punto...

Sonó la pita de un coche y en un ágil movimiento desconecté mi móvil y lo introduje en el pequeño bolso. Tomé mi cartera y las llaves de la mesita de noche y corrí a la planta baja. Jake salió su habitación al tiempo que la pita sonó por segunda vez. Me miró correr escaleras abajo y me siguió pero con más calma. Seguíamos sin hablarnos pero por lo visto decidió que cuando tenía prisa sería el momento idóneo para hablar. Giré el pomo para abrir la puerta pero él me detuvo al momento y se apoyó en ésta.

-¿A dónde vas?-preguntó en tono neutro.

-A salir.

-¿Con quién?

-Con nadie que te importe-dije molesta.

-Si por ese alguien te pones un bolso, sí que me importa.

Vaya, había percibido el bolso.

-Déjame salir-espeté.

-¿Con quién?-repitió.

-Pero ¿Qué te importa?-no se movió y decidí rendirme-Con un amigo.

-Oh, bien-dijo apartándose de la puerta con el ceño fruncido.

¿Era solo eso? Abrí la puerta con brusquedad y salí de inmediato.

Suspirar fue todo lo que conseguí al tirarme a la cama. Había sido simplemente fantástico. Me dieron ganas de pegar a mi anterior yo por haber dejado a Logan. Porque Logan era sin ninguna duda el chico perfecto. Era amable, era sincero y era detallista y romántico. Y estaba interesado en mí, cosa a la que no paraba de darle vueltas. ¿Cómo alguien como él podía estar interesado en alguien como yo? Habíamos pasado una tarde fascinante, habíamos recordado viejos momentos que al principio fueron incómodos pero luego se rompió el hielo.