Capítulo 42

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Dos meses más tarde...

Había pedido a Cameron que me permitiera vivir con él unos días hasta que conseguí alquilar la habitación de un hotel por unos meses con mis ahorros. Él insistió en que podía quedarme pero decidí irme. No había vuelto a hablar con Becca ni con Jake desde aquel día; mis padres aun no sabían que ya no vivía con Jake, pero no tardarían en enterarse. Respecto a Logan, después de lo sucedido corté por lo sano y le dije que si lo nuestro una vez no funcionó, ya no funcionaría nunca, fui brusca y también sentí un poco de rabia hacia él como culpándolo pero fui sincera, sobre todo para mí misma. Vi era la única que sabía con pelos y señales todo de lo sucedido y aprovechando las vacaciones de primavera que empezarían mañana decidió venir a visitarme.

Estaba por fuera del aeropuerto cuando ella apareció con una hermosa sonrisa y me abrazó con fuerza.

-No sabes cuánto te he echado de menos. Te quiero enana-dijo contra mi pelo.

No dije nada durante unos segundos por que se me estaba formando un enorme nudo en la garganta, este abrazo era el mayor contacto humano que había tenido en dos meses. Finalmente sollocé y ella me susurró unas palabras tranquilizadoras.

-Ya está-decía-estoy aquí.

***

-¿Hoy no tenías clase?-preguntó.

Estábamos en un taxi de vuelta al hotel donde hasta ahora residía. Tener a Violet conmigo me producía una extraña sensación de alivio, pero también me recordaba que estaba aquí porque yo estaba hecha mierda.

-Hice que me echaran hace una semana-dije con la mirada puesta al exterior de la ventanilla.

-Creo que eso es lo más tú que has hecho desde que...

-Pasó-completé.

Me miró.

-Oye, no puedes pasar de seguir con tu vida por eso. Ya llevas demasiado tiempo auto compadeciéndote.

-No me auto compadezco-espeté y la miré.

-Ah, ¿no? Bien, dime la última vez que comes algo que no sea ni comida basura, ni chocolate, ni helado.

-Bueno, hace...-vale, sí, no comía precisamente oro últimamente.

-¿Cuándo fue la última vez que saliste un viernes por la tarde o noche?

-Sí que he salido. El viernes pasado...

-No cuenta ir a la biblioteca.

Me quedé callada.

-Joder Claire, despierta, ahí fuera hay un mundo que espera ser destrozado por tus locuras, no puedes dejarlo con las ganas.

Eso me sacó una sonrisa de golpe. No sonreí para quedar bien, o para complacerla, sonreí porque me apetecía sonreír, y en momentos como esta solo lo podía lograr Violet.

-¿Sabes qué? Ahora iremos a tu hotelito, nos pondremos un modelito escandaloso e iremos a una fiesta a emborracharnos y liarnos con alguien.

Eso último no me gustó, lo que menos me apetecía era liarme con alguien.

-Vale, tú no te líes con nadie-dijo como leyéndome la mente-puedes irte a un convento o algo así, pero yo me buscaré a un buen tío.

-No me apetece-declaré-además tengo que...

-Mira, dentro de dos meses es mi cumple, y no podrás venir porque caen los exámenes finales, solo te pido que me regales una noche, solo una-insistió.

Me hizo un poco de gracia porque normalmente la primera en apuntarse a una fiesta solía ser yo, y ahora Vi asume el papel. Era una buena amiga, se merecía una compensación por todo lo que hacía.

Bajo el mismo techoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora