Jake*
Estaba dormida. Se había quedado dormida en mis brazos, lo que inconscientemente hizo que esbozada una sonrisa. La sensación de tener su diminuto cuerpo entre mis brazos era extraña. Extraña, pero agradable. De verdad estaba profundamente dormida y tuve que alzarla en mis brazos y caminar hasta su habitación.
La dejé sobre la cama y siento admitirlo pero lo primero en lo que pensé era en quitarle la ropa para ponerle un pijama (cosa que sería una buena excusa) pero no lo hice. En su lugar me desplacé hasta el marco de la puerta y me giré para contemplarla solo un momento, o esa era mi intención. Acabé observándola más de lo que esperaba, podrían haber sido minutos u horas pero no podía despegar los ojos de ella. A la muy idiota le caía un poco de baba que me hizo sonreír. Y seguí mirándola más y más. Me transmitía una plena sensación de paz, como si nada pudiera perturbarme. ¿Era estúpido verla dormir?
*Me sobresalté al momento. Mi agitada respiración me indicó que seguía vivo y que todo había sido una estúpida pesadilla. Siempre las tenía pero no me acostumbraba. Salté de la cama y tras darme una ducha, comencé a cambiarme. Una vez vestido me encontré con Claire en la cocina. Tenía el pelo recogido en un moño alborotado con mechones sueltos. Me apoyé en la encimera para mirar cómo le daba un último sorbo a su taza y me dirigía una mirada mordiéndose el labio.
-Esto… Lo de ayer…-bueno, efectivamente eso sería memorable-no suelo ser así, simplemente se me fueron los estribos y…
-Todos lloramos, Claire-dije en tono neutro.
-No volverá a ocurrir-insistió.
Contemplé como se puso rígida y se levantaba de golpe para recoger la mesa. Entonces se dirigió a la puerta de la cocina.
-Espera, te llevo-dije.
-¿No piensas desayunar?
-No tengo hambre-y era cierto. Después de mi pesadilla de lo que menos tenía ganas era de comer.
Se encogió de hombros y ambos salimos hacia el coche. Mientras conducía se me ocurrió poner algo de música para calmar la tensión. Estaban echando una canción bastante buena y subí el volumen. Vi como Claire extendía su brazo y cambiaba de canción. Siguió en silencio y evitando mi mirada como si nada. Volví a poner la canción anterior. Ella me fulminó con la mirada y cambió de nuevo. Y cambié. Y cambió. Y volví a cambiar. Ella cambió de vuelta. Cambié de nuevo. Finalmente ella resopló molesta y miró por la ventana.
-Me gustas cuando estás gruñona-dije sonriendo sin apartar la mirada del frente. Era verdad, siempre estaba sexy pero si se enfadaba era más excitante.
-Cállate-me espetó.
*
Acababa de llegar a la fiesta de Connor. Ya desde fuera podía observarse el ambiente. Cameron dijo que Liam también vendría cosa que me aliviaba puesto que después de que Becca y Chase salieran apenas lo veía, nuca pensé que le afectaría. Vi a Claire junto a Becca en un sillón, ambas reían mientras hablaban con unos chicos. De repente me sentí molesto y mi primer impulso fue acercarme a ellas e interrumpir sus claras intenciones de ligar, y lo hice. Ambas tenían el cabello desatado iban con shorts del tamaño suficiente para tapar lo justo y la sonrisa de Claire se perdió en cuanto me vio venir.-Hola, primito-saludó Becca y dio un sorbo a su bebida.
-Hola, B-la saludé y miré a Claire. Sonreí al ver que su cara seria seguía allí, irrompible- Hola, Claire ¿bailamos?
-Antes prefiero cortarme una mano-espetó y regresó su mirada a los chicos que seguían hablando con Becca animadamente.
Sonreí y aunque ella no me mirara acerqué mis labios a su oído.
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Bajo el mismo techo
Teen FictionClaire se muda sola a Chicago con motivos de ir a una nueva universidad. Para ello alquila la habitación de la casa de una chica; pero no esperaba encontrarse con que la "dueña" era un chico. Era Jake: arrogante, mujeriego y sexy... Empiezan los pro...