Eran eso de las cinco de la tarde. No veía a Jake desde el día anterior por la noche y delante de mí se cruzó una leve preocupación que aparté a la bóveda de mi mente. Desde que... discutimos por ponerle un nombre a la situación, me había sentido como si me hubieran quitado una parte de mí. Me costaba reír de los chistes de Becca, me costaba más que nunca hablar sinceramente con mi madre y sobre todo me costaba no poder mirar a Jake a los ojos. No poder reírme con él, no poder besarlo, no poder hablarle, no poder tenerle. Pero era simplemente imposible hacerlo sin preguntarle un porqué a todo, un porqué que no sería respondido, y eso me dolía.
Becca se sentó sobre la encimera mientras yo preparaba unos sándwiches. Me miraba intensamente y eso solo podía significar una cosa: quería hablar.
-Tengo que contarte algo, es sobre Jake.
-No quiero oír cómo ha ganado una carrera o como se ha tirado a tres a la vez.
-¿Crees que después de lo que ha pasado ha salido si quiera de su habitación? Ya veo que cuando decías que lo ignorabas realmente hacías como si no estuviera. Se ha pasado estas dos semanas encerrado en su habitación.
No respondí. Desde luego había estado demasiado ocupada auto compadeciéndome con chocolate y libros como para fijarme en sus movimientos.
-Ya sé porqué a Jake se le fueron los estribos.
-Si se drogaba o algo así tenía que habérmelo dicho.
-Su padre los maltrataba de pequeños, a él, a su hermano y a su madre.
Me olvidé de los sándwiches y la miré petrificada.
-Yo estaba enterada de eso pero hace años que decidió abandonarlos y por fin rehicieron su vida. Hace unos días cogí el móvil de Jake y vi que su madre le había pedido ayuda porque su padre había vuelto. Por eso se marchó a su casa para poder... aclarar las cosas. Claire, si apareció hecho mierda al día siguiente es que algo no había salido bien.
Seguí mirándola unos segundos. Noté como mis ojos se humedecían pero parpadeé un par de veces y evité las lágrimas.
-Mira, la has cagado, es normal. Solo ve y pídele disculpas, lo ha pasado fatal...
-Espera, ¿Que haga qué?
-Que te disculpes y él...
-Becca, no voy a disculparme. Él aun así me mintió, intenté ayudarle y decidió echarme a un lado. Me quedé a su lado y...
-¿Qué te quedaste a su lado?
-¡Deja de defenderlo!-exploté.
-¡No puedo evitarlo, estás ciega si no ves que...
-¿Qué yo estoy ciega? Oh, vamos no eres la más indicada teniendo en cuenta que fuiste tú la que salió con Chase y encima te engaño.
Mierda.
Se hizo un silencio casi eterno entre nosotras y ella se bajó de la encimera con los ojos ligeramente vidriosos.
-Lo siento-me apresuré a decir-solo quiero decir...
-No-sentenció-tienes razón, no debo meterme en esto, es entre tú y Jake. Lo mejor es que me mantenga alejada de ti y punto-espetó y salió de la cocina.
-Becca, espera, B-pero ya se había ido.
Y aunque intenté no hacerlo, al final lloré en silencio.
***
Estaba leyendo en mi cama cuando alguien tocó a la puerta. Apenas había pasado un cuarto de hora desde que B se marchó y aun seguía con más ganas de llorar me tragué las lágrimas y bajé a abrir. Me sorprendí al ver a Logan sonriente.
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Bajo el mismo techo
Teen FictionClaire se muda sola a Chicago con motivos de ir a una nueva universidad. Para ello alquila la habitación de la casa de una chica; pero no esperaba encontrarse con que la "dueña" era un chico. Era Jake: arrogante, mujeriego y sexy... Empiezan los pro...