Capítulo 9: Estrella

3.3K 100 10
                                    

-Lo que no entiendo es cómo te enteraste que iba a ir a la manifestación para evitar que los barcos zarpasen a la caza furtiva de las orcas... ¿me espías o algo por el estilo?

Félix, Daniela y Diana ocupaban la parte trasera del vehículo mientras que Adam conducía y Berto ocupaba el asiento del copiloto hablando sobre que tipo de bebidas podrían servir en la fiesta. Aunque Berto parecía interesarle más que pasaba por la cabecita de Diana, la cuál miraba por la ventanilla del coche, con nostalgia y con el rostro sereno.

-El papel de la información de la manifestación estaba en el bolsillo de tu cazadora.- Félix lo comprobó y así era.- Sí de verdad piensas que pierdo mi tiempo espiando a alguien tan aburrido cómo tú tienes un grabe problema de ego.

-Ya, no creo que seas las más oportuna para hablar de egos, señorita mecreolamejordelmundo.

-¿Y quién dice que no lo soy?- Félix rodó sus ojos y los volvió a clavar en la carretera.- ¿Y qué haremos cuando lleguemos?

-Pues manifestarnos.

-¿Enserio? ¿Eso lo has decido tú solito o te han ayudado?

-¿Púes si es algo tan obvio porqué me lo preguntas, estúpida?

-¿Será porqué sólo he visto manifestaciones por la tele y no sé cómo va todo esto?

-¿Y quién te ha preguntado?- Daniela le pegó un puñetazo en el brazo que pareció que Félix ni siquiera había recibido, aunque Félix tampoco se quedo atrás y le devolvió el puñetazo.

-¡Pero que haces! ¡A las chicas no se les pega!

-¡Esto es el colmo! No sólo tengo que soportar tú presencia sino ¿Que encima me estás diciendo qué tengo que aguantar tu pito de voz que me deja sordo y que me pegues y yo sin hacer nada?

-Por supuesto.

-Bueno parejita.- Dijo Adam mirando por el retrovisor.- ¿Y porqué no dejáis de discutir, de pegaros y de ignorar a la pobre Diana e intentamos salvar a las ballenas entre todos?

-Gracias, alguien que me tiene en cuenta para algo.- Dijo Diana cómo una indirecta que Berto que pareció que la había captado al instante.

-Y dale con las ballenas ¡Orcas! ¡Son OR-CAS! ¡OR-CAS!- Félix se cansaba de repetirlo.

-Tranquilo amigo de las ballenas o te saldrán arrugas en tu cutis antes que se empiece a caer el pelo.- Daniela seguía mostrándole la mejor de sus sonrisas mientras que Félix le miraba con una mirada irritada.

-¡Vale! ya hemos llegado. Todo el mundo abajo.- Adam apagó el motor del coche y fue el primero en abandonar el vehículo.

Una vez todos abajo, el chico de cabellos rubios puso el seguro del coche y comenzó a caminar por delante junto con Félix y Daniela que no se separaba del chico de rizos voluminosos. En cambio, Berto espero a Diana la cuál se había parado un momento para atar uno de los cordones de sus bambas.

-¿Porqué has dicho eso?

-No sé a que te refieres.- Diana siguió caminando detrás de el trío particular.

-¡Oh vamos!- Pero Berto tampoco se quedo atrás y alcanzó a la pelirroja del grupo en menos de un segundo.- Des de que hemos salido no me has dicho nada ¿He hecho algo que te ha molestado?

-Tú sabrás lo que haces con tú vida.

-¿No me jodas que todo esto es por lo de la fiesta?

-Pues sí.- Espetó Diana escondiendo toda su dulzura.- Sí no te dije nada sobre la fiesta era porqué no quería que fueras.

Perdona pero, te vas a enamorar de míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora