Mi vida no es fácil, es lo que me ha tocado, pero no me quejo. Me llamo Rachel Adams tengo diecinueve años y vivo en el Bronx, sí, el Bronx el barrio más peligroso de New York pero que se le va hacer. Tengo una madre se llama Julianne, trabaja para poder mantenernos a mis hermanas a mí y mi hermanito de siete años Jack. Mis hermanas se llaman Kim de dieciséis años y Annie de quince años, mi padre nos abandonó hace cinco años estoy muy furiosa con él, cómo alguien puede hacer algo así, no lo entiendo es muy frustrante. Mi madre es lo único que me queda, no puedo evitar sentirme mal por ella ha sufrido mucho, no se lo merece.
Estoy harta de buscar trabajo, pero no encuentro, pero hoy tengo una entrevista espero que salga bien y que me den el puesto. Ahora mismo acaba de sonar el despertador son las cinco de la mañana, me voy a levantar para salir a correr, necesito despejarme un poco, librarme de la frustración y los problemas durante un rato.
-Santa mierda que cara de zombi.
Lo que pasa cuando no te duermes.
-Cállate conciencia. -Nota mental tengo que dejar de hablar sola.
Entro a la ducha, me ducho, me relajo cojo una toalla la rodeo en mi cuerpo y cojo otra pequeña para el pelo, y lo seco con ella. Salgo del baño y voy al closet cojo unas mayas deportivas de color negro, una camiseta de tirantes gris y me hago una coleta alta, me pongo mis zapatillas deportivas y salgo a correr.
30 minutos después...
Estoy corriendo, pensando reflexionando, pero caigo en que he estado pensando tanto que me he perdido. No sé a donde he llegado, solamente veo un barrio que no conozco ¿o quizás sí? ¡Espera! ya se, es el barrio rico. Estoy rodeada de mansiones y de pronto ¡Boom! me chocó contra alguien y mi trasero impacta contra el suelo.
-Auch mira por dónde vas idiota. –Le suelto cabreada.
-l...lo siento ¿estás bien? –Pregunta.
- ¿Y tú qué crees? –Le digo poniéndome de pie, que considerado, ni siquiera me tiende la mano.
-Yo creo que sí pero no soy yo el que iba distraído guapa, tienes que estar más atenta. -¡Pero que engreído!
- Vete a la mierda estúpido.
Y de allí me aparto furiosa, él me mira con esos ojos azules que penetran en los míos, me pongo roja y cuando estoy dispuesta a correr de nuevo el me sujeta del brazo y me atrae hacia él.
-Suéltame ¿que se supone que haces?
- ¿He presentarme? Soy Ryder Collins ¿y tú eres...?
-No te interesa. Suéltame.
Me marcho de ahí corriendo cuando me giro para verlo de nuevo lo veo mirándome con una sonrisa pícara en sus labios.
-Nos volveremos a ver lo presiento. –Dice.
-Ya lo veremos. -Le digo con un tono de suma arrogancia.
El solo sonríe con la misma sonrisa que antes, se da la vuelta y se va. No lo entiendo ¿cómo que nos volveremos a ver? está loco, creo que me saldrá un moratón en el trasero.
Sigo corriendo otros treinta minutos de vuelta a casa, llego y son las siete de la mañana. Todos se han despertado, mis hermanas están en las duchas, mi querido hermanito esta desayunando y mi madre a punto de salir a trabajar.
Subo a ducharme y para mi sorpresa Kim sigue en la ducha.
- ¿Cuánto lleva Kim en la ducha? -Le pregunto a Annie.
ESTÁS LEYENDO
Mi Nueva Vida Como Modelo ©
Teen FictionATENCIÓN: Habrá muchas faltas de ortografía, la novela aun no se ha editado, es un borrador. (Son faltas de ortografía muy estupidas, la he escrito sin revisar. Cuando termine la novela la corregiré y editaré). ...