Mi Nueva Vida Como Modelo ©

Capítulo 41 Promesas y una futura cita.

Hey, antes de que leáis, quiero deciros que si teneis alguna pregunta respecto a la novela o cualquiero cosa que querais decirme, podeís hacerlo sea en los comentarios o por privado, os quiero y disfrutar del capítulo.

P.O.V Keegan.

Okay, no creo haber estado tan nervioso como lo estoy ahora, mira que es difícil que una chica me ponga en este estado.

Según lo que me dijo Rachel, debería llevar a Keyla al karting, porque le encantan las carreras. Se me ocurrió la idea de llevarla a las clandestinas pero me dijo que debería llevarla a hacer algo diferente y divertido. Y aquí estoy, enfrente del espejo dándome valor para no meter la pata con la chica que me gusta.

Alguien pica en la puerta y digo que pase. Es Rachel.

-¿Estás listo para la gran cita? –Preguntó dando saltitos de emoción.

-Lo estoy. –Dije dando un suspiro alentador.

-Ya es hora de que te vayas o llegaras tarde, y no queremos eso. –Dijo señalándome.

-Bien, allá voy. Abrí la puerta y me dirigí hacia el aparcamiento y coger el coche.

Rachel's P.O.V

Hoy es sábado, significa nada de trabajo y con suerte nada de tarea.

Pero no, no puedo estar tranquila. No paro de pensar en cómo poder evitar que Justin haga algo contra mí, y el primer paso para eso es saber quién es su compinche y de eso se encarga Logan. Hasta que no dé con él, no puedo hacer nada salvo esperar a la tormenta y eso es lo que más me aterroriza.

Todos han hecho planes para este sábado, salvo yo. Oí que hay una fiesta esta noche pero tengo cero ganas de ir. No creo que deba ir estando en la situación en la que estoy. Devon no paró de intentar convencerme pero sus esfuerzos han sido en vano.

Prefiero coger un buen libro, prepararme una taza de chocolate caliente y sentarme en la enorme sala de estar a leerlo con tranquilidad. He seguido la dieta al pie de la letra y según Zac al final de la semana puedo permitirme un capricho como el chocolate pero no un gran capricho como la pizza. Así de injusto es este mundo.

Entro en mi habitación y busco uno de mis libros favoritos "La coincidencia de Callie y Kayden" amo este libro desde que le eché el ojo. Los personajes son tan profundos, frescos, sencillos y encantadores, es inevitable no enamorarse de ellos.

Lo cojo de la estantería y me dirijo a la cocina. Cuando llego, me encuentro a Brithany tomándose un café mientras leía una revista. Pongo el agua a hervir y me siento en el otro lado de la barra del lado izquierdo, empiezo a leer el libro mientras espero que el agua empiece a hervir.

-Con que eres una fiel lectora de libros. –Dijo Brithany.

Levanté la mirada del libro.

-Se puede decir que sí. –Dije volviendo a mi lectura.

-Es un libro genial. –Dijo. Volví a levantar la mirada.

-¿Tu lees? Aparte de revistas claro.

-Claro, es uno de mis pasatiempos favoritos.

-Vaya. –Dije algo asombrada.

-Hay mucho que no sabemos la una de la otra. –Dijo levantándose, poniendo la taza de café en el fregadero. –Deberíamos trabajar en eso. –Dijo saliendo de la cocina... ¿Qué rayos acaba de pasar? Acaso ha insinuado que deberíamos ser algo         como... ¿amigas? Esto es muy raro. Es evidente que ya no nos llevamos tan mal  como hace unos meses pero tampoco tan bien supongo.