Living With Him ©

Capítulo 1 First Day

Han de pensar ¿Porque una madre dejaría a su hija a cargo de su vecino? Pues la verdad ni yo sé, según ella, el es un gran ejemplo a seguir cuando eso es una vil mentira.

-Madre ¿Porque tengo que quedarme con el? Bien puedo estar sola, se cuidarme bien.

-Lo dice la chica que incendió el microondas.-Bien, pero yo no tengo culpa.

-No sabía que tenía aluminio el vaso.

-Ves, por eso tienes que quedarte con el vecino.

-Pero sólo es dos años mayor que yo.

-Tengo confianza en él. Además el es él que se quedará aquí, tú no tienes que moverte de la casa.

-Aún así. Y si es un violador, un secuestrador, un traficante de órganos, o un brujo que te hechizó. Imagínate lo que pasará tu hija. -Me tiro al suelo y comienzo a "llorar".

-No seas exagerada, estarás bien.

-Quedaré sola y desamparada. Pediré dinero en la calle, andaré mugrosa, aguantare frío, la lluvia, noo. - Limpio una falsa lágrima de mi mejilla.

-Por Dios Emma Lucia Pierce Dinovick.

-¡No digas mi segundo nombre! - Advierto.

-Entonces ya cállate. Te quedarás con el vecino punto y final. - Hice un puchero.

-Madre.

-No.

El día siguiente me levanté temprano para despedir a mi madre, Imagínense madrugar un fin de semana, eso es un pecado. La abrazo y le doy un beso, la extrañaría tanto, no se que haré sin ella tres meses.

-Te amo madre.

-Yo también te amo. Comportate.

-¿Yo? Madre si yo soy la tranquilidad personificada. -Mi madre ríe ante mi comentario.

- Extrañaré esos chistes y sarcasmos tuyos.

- Lo se madre, lo se. - Le doy el último abrazo y beso. La miro subir al avión, y limpio mis lágrimas.

A las 7 de la mañana llego a mi casa, mi vecino ya estaba ahí, ¿Cómo diablos tiene la llave del apartamento? De seguro mi madre se la dio. El me mira y me sonríe, me sonrojo. Esperen ¿Porque mierda me sonrojo? Esto no puede suceder, Emma es anti-romance.

- Hola preciosa.

- Hola vecino. - Sonrío.

- ¿Cuál es tu nombre? - Viviré con él y no se sabe mi nombre, que barbaridad. Aunque yo tampoco me se el de él. Babosa oh les presento a mi odiosa yo interior.

- Emma. - Tiendo mi mano. - ¿Y el tuyo?

- Aaron. - Acepta mi mano. -Mucho gusto.

-El gusto es mío. - ¿Yo dije eso?

-¿Tu madre ya se fue, Emma? - Noo, su alma anda rondando por aquí. No digas eso soqueta. Mi yo interior me cacheteaba.

-Si. Hace una hora.

-Que bien. - Me mira.

- Pues si. Iré a bañarme de nuevo. -
- El asintió.

Me adentro a la ducha, quito mi ropa y dejo que el agua recorra mi cuerpo, restriego mi piel y lavo mi cabello. Salgo y me acerco al espejo, quito el vaho de él y me peino.

- ¿Que rayos haces en mi habitación?

- Andaba buscando el baño.

- Pues ya sabes que no es aquí. Te puedes ir, estoy casi desnuda. - Aaron observa mi cuerpo de arriba hacía abajo. ¡Maldita sea, estoy sonrojada!

- Eres.... Iré a buscar el baño.

- Esta....bien.

¿Que sucedió? Pues el galán te comió con la mirada.

Me pongo unos vaqueros y una camisa de tirantes, salgo de mi habitación y me encuentro con Aaron, lo diré una tan sola vez: éste capullo esta ardiente, es guapísimo.

Y te quejabas verdad.

- Hola de nuevo. - Me sonrió y esta vez logre ver dos hoyuelos en sus mejillas.

- Hola Aaron.

- ¿Quieres ver una película?

- ¿Tienes palomitas?

- Claro.

- Pues vamos. ¿Que película elegiste? - Pregunté al sentarme en el sofá de la sala.

- Guardianes De La Galaxia. - Lo observo fijamente.

- ¿Que? ¿No te gusta? Si quieres la cambio.

- ¿Que? Nooo. Me encanta la movie.

- Igual a mi. - Sus hoyuelos son tan bellos ¿Pero que estoy diciendo?

¿Seguirá así siempre?