Dueños del Tiempo

Capítulo 14: Yo estoy contigo.

      Capítulo 14.
     Yo estoy contigo.

Aurelio.

Al fin habíamos terminado todo lo que teníamos que hacer en la casa de Escobar cada una de las cosas ya estaban en su lugar y no tuvimos ningún inconveniente.

Cuando terminamos de hacer todo Mónica ya quería regresar a la casa así que nos despedimos rápidamente del señor Escobar y junto a Luciana, Víctor y Javier nos vinimos a casa a descansar.

Yo me encontraba en la sala tomando un vaso de tequila, estaba cansado pero a la vez preocupado por lo que le estaba pasando a Mónica.

Estaba asustado de que fuera algo grave o de perderla, ella era todo aquello bueno que yo tenía.

Me senté de nuevo en la sala contemplando la chimenea que estaba prendida.

— ¿Te pasa algo? — escuche decir a Javier.

— No, es que estoy preocupado por Mónica. —

Javier tomo la botella de tequila y un vaso sentándose a mi lado.

—Todos estamos preocupados por ella, pero desde que la conozco ella es así. — dijo sirviéndome tequila en mi vaso.

— ¿Cómo que ella es así? —

—Sí, ósea ella desde muy pequeña ha tenido diferentes enfermedades porque no come bien y eso, hubo una época donde sólo estaba tirada en cama por que la anemia no la dejaba levantarse, estoy seguro que eso que tiene son todos los síntomas.

— ¿Ella está muy enferma? — pregunte dándole un trago a mi bebida.

—Si bueno no muy enferma que digamos pero si no come vuelve a recaer y no es muy fácil sacarla de ahí, la última vez que los tuvo duraron como un año y fue muy difícil para todos.

— ¿Estas insinuando que han vuelto? —

—No, sólo te estoy diciendo lo que creo que es. Conozco a Mónica y si no es eso puede ser que tú no la estés cuidando.

—Yo siempre la cuido. — dije confundido.

—No me refiero a eso, me refiero a otras cosas Aurelio. Mónica no es alguien común y corriente eso debes saberlo y si esto lo mantienen en tanto secretó la bomba explotara y a ti te irá muy mal con sus hermanos. —

—Es lo mismo que yo le he dicho Súper Javi, pero no me hacen caso. — dijo ahora Lilo quien venía fumando.

—Yo se las consecuencias que puede llevar esto, los dos lo sabemos y estamos juntos en todo. No puedo dejarla por miedo ella es mi vida entera chicos, no la dejare nunca. — mi voz era firme viéndolos.

—Me alegra escuchar tanto eso, tú no sabes lo mucho que es importante Mónica en nuestra vida, siempre la hemos cuidado como una princesa y ahora nos alegra que te haya encontrado. — Lilo se limitó a decir, yo sonreí.

—Ella es todo lo que yo necesito para ser feliz y no la dejare. Yo creo que lo más importante es que mañana venga el doctor a primera hora a verla ¿no? —

—Sí, de hecho ya le dije a Espanto que mañana fueran por uno a primera hora por si era necesario alguna otra cosa que nos dijera y así conseguirla. — dijo Javier.

— ¿Son como sus hermanos mayores verdad? — les pregunte y ellos rieron.

—Lo somos, o más bien queremos serlo para mantenerla protegida ella es una mujer muy tierna y linda pero a la vez es una fiera para defenderse tú no sabes por todo lo que ella ha tenido que  pasar y todo lo que ha sufrido. Por eso la cuidamos como un valioso tesoro además que sus hermanos nos matarían si algo malo le pasa. Por ella ellos hacen todo esto. No creas que por el poder y eso, no, ellos simplemente quieren que Mónica tenga una vida llena de muchas cosas.