029. Ese incómodo momento en el que Hunter te ve besándote con Connor.

40.9K 2.2K 401
                                    

-Así qué.... tienes una cita.

Mi hermano repasó mi vestimenta cuidadosamente, parándose en cualquier parte de mi cuerpo que no estuviese cubierta adecuadamente. Yo apreté los labios mientras él cruzaba los brazos sobre el pecho y se apoyada en el marco de la puerta de mi habitación con una ceja enarcada.

-Sí, bueno... solo iremos al cine -contesté, tratando de sonreír inocentemente-. Además, Bianca y Evan estarán con nosotros.

Y Hunter y zorra-Claire también, añadí en mi mente. Claro, que él eso no lo sabía. Yo tampoco tenía ni idea hace media hora, pero así era. Esta estaba destinada a ser la cita más incómoda de toda la historia de las citas incómodas.

-Ya... -Sus ojos se volvieron a pasear por mi vestimenta con una mirada de desaprobación. Rodé los ojos. No podía quejarse, me había puesto una chaqueta encima para que me dejase salir de casa-. ¿Y quién es el afortunado?

Me rasqué la nuca nerviosamente. Ah, pues es tu hermanastro. Connor, sí, él. ¡Oh, sí! Y nos hemos besado. Dos veces. Y creo que me gusta. Por cierto, ¿tienes unas gafas de sol por ahí? Las mías me las he dejado en la habitación.

Recordando esto último, entré en mi habitación en busca de mis gafas de sol. Logan no se despegó de mí, me siguió dentro y fuera de nuevo. Le sonreí una vez que las gafas estuvieron colocadas sobre mi cabeza.

-No lo conoces. Es... un chico del barrio.

Mentía tan mal que ni yo misma me lo creía.

-¿Cuál es su promedio de notas? ¿Número de casa? ¿Su apellido? ¿Cuántos años tiene? ¿Ha sido arrestado alguna vez? ¿Qué tiene planeado trabajar?

El vómito verbal de preguntas salió tan rápido de entre los labios de mi hermano que apenas me dio tiempo a pestañear y a asimilar todo lo que había dicho. Logan me miró, impaciente. Me limité a dedicarle una sonrisa tranquila. Esperaba sinceramente que se viera así.

-Eso pienso asegurar esta noche. Una cita es para conocerse, ¿no? -respondí con una gran sonrisa. Traté de escabullirme-. Si me disculpas...

-¿Él te gusta?

La pregunta de mi hermano me pilló desprevenida. Realmente no me esperaba aquello. ¿Y ahora qué le decía? ¿Qué sí me gustaba? Y él respondería que querría conocerlo. No podía pasar eso.

-Dylan -repitió, con los ojos entrecerrados-, ¿te gusta ese chico?

Tragué saliva. Bueno, iba siendo hora de contestar, ¿no?

-Si por gustar te refieres a físicamente... sí -contesté finalmente. No era cierto, Connor me gustaba en todos los aspectos (madre mía, lo había vuelto a decir). Pero no iba a decirle eso a mi hermano-. El chico es guapo, hombre.

-¿Ah, sí? -preguntó mi hermano, de una manera que hizo que todos los pelos de mi nuca se erizaran. Eso no podía significar nada bueno, no señor-. Entonces, me encantaría tener unas palabras con él cuando venga a buscarte.

Genial. Absolutamente genial. Bueno, cerebro, o piensas una maldita excusa o yo estoy muerta. Y Connor también. Más te vale pensar rápido, o si no te patearé el trasero lo mismo que Logan lo hará con Connor. Y yo quiero el trasero de Connor perfecto, gracias.

-Es qué... él no va a venir a buscarme, ya está allí por... asuntos personales. Connor va a llevarme, a él le pilla de paso.

Mi hermano alzó ambas cejas, sin creérselo del todo. Se inclinó sobre mi rostro y luego esbozó una gran sonrisa. Yo retrocedí, riendo, y puse una mano sobre su rostro para apartarle.

Viviendo con los Evans © [Evans 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora