El apartamento estaba en total obscuridad, seguramente ya todos en un quinto sueño. Tendría que esperar hasta la mañana siguiente para la plática con mi padre. Cerré la puerta con cuidado y camine de hurtadillas hasta mi habitación. Suspire cuando estuve dentro y encendí la luz. Gire y lo primero con lo que tope, fue los enormes orbes azules de mi hermanastro sobre mi cama.
¡Santa mierda! ¿Qué haces ahí Devon? Casi me matas del susto, pareces anima en pena – le reprendí llevando una de mis manos hasta mi pecho. El corazón me bombeaba como loco. El muy sinvergüenza se echó a reír – Así tendrás la conciencia Preston – relamí mis labios y sacudiéndome el cabello me lo lleve hacia atrás. El chico se reincorporo y camino hasta el buro junto a esta – ¿Qué quieres Martin? – insistí y el cogió la fotografía sobre este, una que conservaba desde pequeña; Anthony, Elizabeth y yo, como una familia. No pregunten porque aun la conservo, ni yo misma lo sé. Debí haberla quemado o tirado a la basura hace mucho tiempo – ¿Sabes que nuestros padres piensan unir su vida en santo matrimonio, no? – Asentí, aunque él no me dirigió ni una sola mirada – ¿Y estás de acuerdo con ello? – entrecerré los ojos en su dirección ¿A qué venia esa pregunta? Camine hasta el pelinegro y le arrebate la fotografía enmarcada – No veo inconveniente. Mi padre ama a tu madre y creo que es reciproco. ¿Tú tienes algún problema?
Ahora sí, poso sus enormes ojos de gato en mí y negó con la cabeza. ¿Entonces de que quería hablar? No veía inconveniente o tema por ningún lado. Estaba decidido. Me despoje de las enormes zapatillas y las lance en algún rincón del lugar. Sin duda alguna me saldrían ampollas – Es solo que... es extraño ¿sabes? – volvió a dejarse caer en la cama y yo me obligue a no soltar un bufido. Solo deseaba descansar y aspirar el delicioso aroma que Harry había dejado en mi ropa – Ver a tu madre rehaciendo su vida después de todo lo que vivió con tu padre... - Devon obtuvo mi atención con aquella simple palabra. No sabía absolutamente nada de aquel hombre, Melissa no lo mencionaba, y era la primera vez que él lo hacía. Me senté junto a él mordiéndome la lengua para no cuestionar su vida privada y verme como toda una chismosa.
¡Ey! – Le tome el hombro – Sé que es extraño. Uno nunca se detiene a pensar si la relación de sus padres es lo suficientemente fuerte, o que, en un momento dado lleguen a separarse, es por eso mismo que cuando sucede uno pierde algo de dentro de sí... La esperanza e ilusión de algún día volver a formar una familia. A eso se le llama miedo, y no tienes que avergonzarte al sentirlo, yo también lo tuve en un momento dado, pero ahora... - encogí los hombros tratando parecer desinteresada – creo que se ha terminado. Devon, si lo que temes es que tu madre te abandone para construir una nueva familia, no lo hagas, ella te ama demasiado, siempre serás tú, después tú y finalmente tu – le dedique mi mejor sonrisa y el me la devolvió, aunque cargando un toque de tristeza en ella. Aún era un niño, comprendía su preocupación. Volví a palmearle el hombro y me reincorpore, estirándome y despeinándome el cabello. Mi hermanastro me dedico una mirada intensa, como si estuviese deduciendo en ese instante de donde llegaba.
¿Y tú a dónde fuiste? Te brillan los ojos... - ¿A mí? ¿Brillarme los ojos? Por supuesto que no, solté un bufido – Andaba por ahí, con Katy, ya sabes, haciéndola de chaperona – el, por supuesto que no se la creyó. Levantándose de un salto se colocó frente a mí, cuan alto era – ¿Fuiste a ese concierto, cierto? Al de los chicos. Y estuviste con Harry – me quede a cuadros – ¿Cómo lo sabes? – inquirí luchando por bajar el cierre de aquel estúpido y ceñido vestido. Devon, al percatarse de mi pelea, me giro por los hombros y retirándome el pelo tiro de esta con fuerza – Katya llamo. Quería ver si ya habías llegado y pues, no pudo contenerse. Me conto todo – bufé, ¿Cuándo aprendería mi amiga a cerrar la estúpida boca? Un día de estos le caería una mosca. El cierre finalmente cedió y yo di un suspiro volviéndome al de cabello azabache – Si, estuve con Harry y... -pase saliva, no estaba segura en revelarle aquello al chico, además, Katy se molestaría mucho si se enteraba de no haber sido la primera en enterarse del "chisme". Los orbes azules y brillantes de mi hermanastro me animaron a continuar – Y me pidió que fuera su novia.
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Una vez más, ¡Admítelo Preston! ✔✔ [Terminada]
JugendliteraturPorque nada sucede del mismo modo dos veces: la segunda si es posible, será aún peor. Los cinco idiotas más famosos del momento y una chica luchando por volver a la "normalidad". ____________________________________________________________________...