Capítulo 6.

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Y ahí estaban. Taehyung encima de Jungkook, sobre sus muslos, para ser exactos, mientras que acariciaba su entrepierna con lentitud, relajado, aunque relajado era lo que menos estaba Jungkook en aquella situación.

Sí, le estaba masturbando, y eso le encantaba, ¿pero cómo podría no perder la cordura y empezar a gemir como una chica cuando a este se le ocurriera dar un paso más allá?

- No te corras todavía.- soltó Taehyung sin más.
- Eso intento.- respondió entre leves gemidos. Taehyung había aumentado la velocidad, así no iba a aguantar mucho más tiempo.- Para.- susurró sereno agarrando las muñecas del mayor.

El moreno sonrió de lado mirándolo a los ojos.
- Así que... ¿Qué te gusta hacer?- y le sorprendió la pregunta, pues llevaba bastante tiempo callado, a excepción de la advertencia anterior, mientras él torpemente intentaba sacar algún tema de conversación. Se encogió de hombros y sonrió tímido.

- No lo sé... Ver la tv, dibujar...- Taehyung no pudo evitar reír tiernamente ante aquella respuesta.
- Me refiero en la cama.- y sonrió levantando la cabeza, haciendo que sus ojos miraran hacia abajo.

- ¡Oh!- el mismo se autoinsultó en su cabeza y sonrió avergonzado. La mandíbula de Taehyung se marcaba junto a la nuez, y le estaba poniendo nervioso, además.- Esto está bien...
- ¿Te gusta dar o recibir?- Jungkook no tenía ni la menor idea, es decir, era virgen.

- Dar...- el mayor levantó las cejas, aquel pequeño no tenía ninguna pinta de ser el activo, y él no se iba a dejar hacer nada en su preciado culo.- Y recibir...- realmente el pelinegro no tenía ni idea de que decir.

- Oh, eres reversible, entonces.
- Y ambidiestro. Fue muy confuso la primera vez, ya que no sabía con que mano empezar.

Taehyung se estaba dando cuenta de que era un inexperto, pero no iba a preguntárselo directamente.
- ¿Te gustaría una medida?- preguntó con cara de sospecha.
- ¡Claro!- sonrió ilusionado el menor, entusiasmado de que además de ser su primera vez, no sería nada aburrida.

Taehyung quitó las manos de su miembro, haciendo que soltara un quejido, y lo miró esperando.

- Pues venga, hazlo.- propuso el castaño.
- Eh...- la sonrisa de Jungkook se desvaneció y observó la cara de decepción del moreno. El teléfono de la mesita de Taehyung sonó y este susurró algo para si mismo, pero el pelinegro lo escuchó.

- Lo suponía.- cogió el teléfono.- Quién.- y siguió masturbándolo.
- ¡Al fin!¿Dónde coño estabas?¡Te he llamado como veinte veces!- era ChaeRin, su secretaria y mejor amiga.
- ¿ChaeRin?¿Qué pasa, por qué me llamas?- Jungkook se iba a volver loco, Taehyung no paraba, pero le daba vergüenza que alguien más le escuchara gimiendo.

- Es Hye Sun, está todavía en la sala de partos, ¡ven al hospital ahora mismo!
- ¿¡Qué?!¿¡Desde hace cuanto?!- preguntaba sin darse cuenta de que el menor iba a venirse en seguida.

- Para... por favor...- pedía Jungkook aguantando las ganas encogiendo los dedos de los pies.
- Desde esta tarde, pero de seguro que te habías ido a follar con algún tío de Babylon.
- En eso estaba ahora mism- y Jungkook lo interrumpió llegando al climax, eyaculando en su mano, de quien le había dicho que no lo hiciera, por lo que puso una cara de disgusto.

No por asco, si no por que el otro no aguantaba nada.- ¡Joder! Ahora me has manchado.- se quejó con cierta molesta.- ¿Qué? No, no es nada, un niño se acaba de correr en mi mano, nada más.- Jungkook estaba avergonzado, joder, no tenía porqué decir aquello.

- No soy un niño...
- Vale, llamaré a Jimin, estaremos allí en veinticinco minutos.- y colgó bajándose de la cama y así del menor.
- ¿Qué pasa?- preguntó el otro decepcionado.
- Vístete, tienes que irte.- y le tiró la ropa que recientemente se había quitado.

- No puedo volver a casa, mis padres creen que estoy con una amiga.- lo miró mientras se ponía sus boxers.
- ¿Vives con tus padres?- preguntó Taehyung sorprendido, aunque en realidad no le sorprendía tanto.
- Claro, todavía voy al instituto.- Jungkook paró un momento rectractándose.- Digo, a la Universidad.

- ¿A que curso?
- A segundo... bueno, debería ir a segundo, pero repetí primero.
- ¿Cuántos años tienes?
- Veintiuno.- respondió seguro.
- ¿En qué año naciste?- Jungkook tardó unos segundos en responder.
- En el 95.
- Y una mierda, te lo has pensado.- y bajó los escalones, dejándose ver entre las cortinas.- ¿Cuántos años tienes realmente?

- Veinte...- Taehyung pasó una de las cortinas mirándolo intimidantemente.- Diecinueve...- y otra.- Dieciocho...
- Oh, venga ya, ¿estamos lanzando un misil?- preguntó alzando los brazos.

Jungkook se cruzó de piernas, en posición india, y suspiró cabizbajo, algo que a Taehyung le pareció muy lindo.
- Tengo diecisiete.- respondió firmemente.
El mayor suspiró agarrando su camiseta del suelo de la cocina y subió de nuevo los escalones.
- ¿Qué le pasa a la joventud de hoy en día?- y se sentó en su cama poniéndose también sus pantalónes.
- Pues que queremos follar, como todo el mundo.- sonrió el más pequeño sentándose a su lado.

- Por supuesto...- masajeó su entrecejo, pensando.- Aunque tampoco te voy a decir nada, ni soy tu padre y sinceramente quiero follarte,- el menor se ruborizó.- ni voy a negar que yo a tu edad era igual o peor.
- ¿Peor?

- Sí. Mi primera vez fue a los quince.- Jungkook rió.- Con el profesor de Educación Física.
- ¿¡Qué?!- y Taehyung rió.

- Sí. Acabábamos de terminar la clase, y ya era hora de irse a casa. Todos se habían marchado ya, pero yo volví a por algo en mi taquilla.- Jungkook estaba curioso. ¿Cómo habría sido la primera vez de "su primera vez"?- Y entonces lo vi. Estaba duchándose. Su musculoso cuerpo lucía expectacularmente sexy, aún más mojado. Y tenía una erección. No sé por que lo hice, pero me metí bajo la ducha junto a él.

- ¿Con ropa?- Taehyung asintió.
- Me puse de rodillas y se la chupé. Después de eso pasó lo que pasó, y estoy seguro se que esa fue la mejor mamada que ha tenido en su vida.

- Wow... ¿y no estabas asustado?
- Claro, ¿y quién no?- se quedó pensando un momento.- ¿Tú estas asustado?- el pelinegro asintió levemente.- Lo imaginaba...- confirmó el mayor desanimado.

- ¡Pero aún así quiero hacerlo!- Jungkook se acercó a él como un niño sin darse cuenta de lo coqueto que había resultado aquello.

Aunque a Taehyung le daba igual lo que sintiera el menor, tampoco era un violador ni lo iba a obligar a nada que él no quisiera.

Pero si hace unos instantes pensaba que ese niño era inocente, todo aquello desapareció cuando Jungkook meneó sensualmente sus delgadas caderas, ahora vestidas con tan solo un delgado boxer, frente a él.

Pero ahora no podía, luego sí, luego haría que el pequeño gritara su nombre pidiendo por más. Ahora Hye Sun necesitaba su ayuda.

Agarró el rostro del menor con una mano y le dió un casto beso haciendo que soltara un gemido.

Al separarse y dejarlo atontado, agarró su teléfono dispuesto a llamar a Jimin y centrarse en el tema.



Estaréis contentxs :) me duelen los pulgares. Pero os sigo amando. Bellas personas ♡ Xau.

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