Capítulo 24 La puerta misteriosa.

1.2K 78 2
                                    


Este es el último día del año, hablé con Julieta para que me diera permiso de estar este día aquí en el plano infernal, ella sabe que no me agrada tanto esas festividades, así que ahora que somos sinceros ella me comprendió y no hubo problema alguno.

Hoy sólo espero que Matt me muestre por fin alguna técnica para combatir a Astaroth, aunque probablemente se esté haciendo el tonto, pues lo que me dijo Hilario sobre una posible manipulación hacia mí por parte de mis queridísimos hermanos, ya sólo espero la traición de uno de ellos o de los dos en cualquier momento.

Camino por los pasillos del palacio, es inmensamente grande este lugar, quién hubiera dicho que aquel demonio bastardo era un príncipe y que hasta la estúpida de la madre de Matt ahora me tiene que respetar.

Veo habitaciones, salas de estar y alcobas, todas tienen un aspecto tan lujoso como los de la tierra. Claro, tienen su toque gótico, después de todo aquí es el mundo obscuro.

Sigo caminando hasta llegar a un punto donde el pasillo hace una bifurcación, -¿izquierda o derecha?- me pregunto mentalmente, froto mi mentón mientras trato de decidir. —izqu...¡derecha!— exclamo rápidamente.

Me dirijo hacía el pasillo derecho, tiene poca luz en comparación del que vengo, el piso de hecho es diferente, es como mármol color guinda, es reluciente a pesar de la poca iluminación, pero porqué será así este pasillo. Empiezo a observar que aquí todas las puertas están cerradas, son puertas color negras y las paredes son de piedra estilo medieval.

Sigo caminando, no sé por qué sigo explorando este lugar, pero siento que tengo que llegar a un punto exacto.

Me detengo por fin, giro mi cabeza para observar la puerta que se encuentra a mi derecha, después vuelvo a observar frente a mí y veo que el pasillo de hace unos segundos ya no está, ahora sólo es una pared de piedra. ¿Pero en qué momento ha pasado esto?. Vuelvo a ver la puerta, me acerco más a ella, acerco mi mano lentamente al picaporte, pero una sensación de alerta pasa rápidamente por todo mi cuerpo, es como si alguien más me estuviera advirtiendo de algún peligro y decido detener mi mano y la alejo rápidamente.

Veo a todas partes y ya no hay nada, todo es obscuridad, han desaparecido las demás puertas, el pasillo, paredes y... Ahora sólo esta esa puerta. Sin pensarlo más decido abrirla.

¡Jack!

Escucho un grito a lo lejos, pero decido ignorarlo y abro la puerta.

Una luz cegadora se dispara directamente a mí, con mi antebrazo trato de protegerme y siento como algo se acerca.

Por fin soy libre.

***

—Jack, Jack, despierta— la voz de un hombre me habla y golpean mis mejillas para hacerme reaccionar.

Abro lentamente los ojos y veo el rostro borroso de aquella persona, —¿Joz?— le digo confundido, —¿Qué me paso?— trato de levantarme pero Joz me sujeta de los hombros obligándome a recostarme.

—Tranquilo, Jack. Primero trata de relajarte, yo esperare aquí sentado— dice Joz y enseguida toma asiento en un sofá cerca a la cama donde me encuentro.

Alguien abre la puerta repentinamente y entra dando unas fuertes pisadas, es como si estuviera furiosa aquella persona, — ¿Ya ha despertado? — pregunta con su fuerte voz.

—Sí, hace un momento despertó— escucho decir a Joz.

Vuelvo a abrir mis ojos lentamente, no se qué me pasa, siento que mis párpados pesan demasiado y mi cuerpo no se queda atrás, tan sólo el movimiento que hice hace un momento me ha robado demasiada energía.

La Confesión De Un Demonio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora