Capítulo 4 - Ryan ..

129K 7.8K 896
                                    

Punto de vista desconocido

Llegué a casa, pegando un portazo, haciendo saber a mi familia que había llegado.

-Los han cogido. -Dije observando la pequeña reunión familiar que tenían montada en el salón

-Os lo dije. -Advirtió Jayce. -Esa chica va a acabar con todos nosotros.

-No vayas tan rápido Jayce, aún no se han unido. - Rechistó Arya.

-Debemos matarla.

-Matarla? Esa es tu solución para todo Grayson. -Le dije mientras le advertía con la mirada. - Nos somos así

-Ryan, es lo mejor, no podemos arriesgarnos, sabes de sobra quien es y de que familia viene, es peligorsa. -Carter se dignó a dar su primera opinión

-Basta. -Ordenó Andrew, mi padre. - Debemos tener mas información, no podemos ir acusando sin tener mas pruebas que una simple visión de Jayce. ¿Estáis en su instituto no? Vigiladla, pero no hagáis contacto con ella, no podemos arriesgarnos.

- ¿Y que hay de su hermano? -Dije dudoso.

-Vigiladlo también.

Todos asentimos y volvimos a nuestros quehaceres habituales.

----------------------------------------
Punto de vista de Sophie

- ¿No piensas decir nada? -Mi hermano no había hablado desde que nos habían soltado.

-Olvídalo todo, solo nos están tomando el pelo.

- ¿Tomando el pelo? Aiden sabes perfectamente que no nos estaban tomando el pelo, ¿acaso no viste como le cortaba el cuello como si nada? - Me puse delante y le obligué a que me mirara.

-Ven. -contestó sin más, cogiéndome del brazo y llevándome hasta el salón, dónde mi madre estaba viendo su programa favorito.

-Siéntate. -Volvió a decir, y mi madre nos miró con duda.

-Ha pasado. -Dijo mi hermano, sin más.

Mi madre abrió los ojos como si el mundo fuera a acabar.

- ¿Que? ¿Como? -Llegó a decir.

- Nos han visto y han decidido que es el momento, saben quienes somos.

Mi madre se puso de pie, con cara de loca.

- ¡Te dije que no hicierais nada raro ni demostrarais vuestras habilidades! - Fruncí el ceño, ¿habilidades?

-Mamá solo era un partido yo ... Lo siento -Contestó mi hermano llevándose las manos a la cabeza.

-Vale, ¿podéis decirme que pasa? -Hablé por fin.

- Es hora de que se entere. - Murmuró mi hermano.

- No, no es hora. - Dijo mi madre.

- No pero ya es tarde. Tiene derecho.

Mi madre hizo un silencio, mirando al techo mientras suspiraba

-Hija ... Tu padre, no está en el ejército. - Fruncí el ceño más aún, si es que podía.

-Que... Que quieres decir? -Fui lo suficientemente valiente como para preguntar, sabiendo que lo que diría a continuación cambiaría mi vida, para siempre.

- Tu padre .. Es un cazador Sophie, caza vampiros, solía ser el líder de esta zona. Y no está en Afganistán .. Está en Canadá.

No veía mi cara pero debería ser un poema, entonces, comprendí todo.

-HAHAHAHAHHAHAHAHAHA -se pensaban que me la iban a colar. -Ya lo entiendo, ¡os queréis vengar por haber pintado la fachada de la casa de rosa el verano pasado! Vais a tener que esforzaros más.

Los miré y no vi ni pizca de gracia en sus miradas. Mierda.

-No jodas. -Me levanté del sillón.

Me miraban con preocupación mientras notaba como me faltaba el aire.

- Sophie, cariño .. -

- ¡¿Cuando pensabais decirmelo?!

- Yo .. no estabas preparada.

Me cansé de tantos secretos y corrí fuera de la casa, corrí todo lo que pude por el vecindario hasta llegar a un pequeño bosque, seguí corriendo y corriendo hasta que no pude más y me senté en un árbol.

- Todo esto es una broma, no puede ser.- me repetía a mi misma, una y otra vez.

No puede ser que me hayan mentido todo este tiempo, que mi hermano lo supiera y yo no. La incertidumbre fue cambiada por rabia en segundos, rabia por no haberme dicho la verdad, sobre papá, sobre mi propia familia.

Me levanté y empecé a pegarle golpes al árbol, necesito desahogarme, no sentirme inútil.

-Te vas a hacer daño. -Esa voz .. La misma voz que escuché aquel dia cuando estaba llorando.

Me di la vuelta, convencida de que no habría nadie y me encerrarían en el manicomio, pero no fue así. Era él, el chico del pasillo.

Esta vez no sentí miedo, ni inquietud, no sentí nada. Pude fijarme mejor en otra cosa que no fueran sus ojos. Su piel, blanca, resaltaba perfectamente con su pelo castaño claro y sus labios.

- ¿Estás bien? -Volví de mi trance.

-Si, lo siento no queria ... - ¿Por que me disculpo? - ¿Me has seguido?

-Eh, no solo estaba caminando para despejarme un rato y .. Bueno te encontré aqui.

Su voz transmitía vergüenza, pero su expresión, estaba firme, parecía que no sintiese nada.

-Puedo acompañarte a casa si quieres. -Volvió a hablar.

-No, gracias puedo ir sola.

-No te preocupes, voy en la misma dirección que tú. -Sonrió por primera vez, y joder que sonrisa.

- ¿Como sabes donde vivo?

-Te he visto llegar de allí. -un momento ..

-Entonces sí me estabas siguiendo? -Su cara, se puso más blanca de lo que ya estaba, si es que eso era posible.

Parecía que iba a sonreír, pero de un segundo a otro, cambió su cara por completo, convirtiéndose en una seria.

-Quieres que te acompañe o no.

Su cambio de humor me pilló desprevenida por completo, y solo asentí, caminando hacia él.

-Por cierto me llamo Sophie. -traté de ser simpática.

-Yo soy Ryan. - Ryan ...

------------------------------------------
Heey! Sé que este capítulo es un poco mas corto de lo normal, pero me gusta hacer los capítulos por etapas cronológicas, y no tiene sentido que ahora cambie a otro día.

Como siempre si os a gustado votad, comentad opiniones, preguntas etc y recomendad la história, nos leemos! ;)

Sangre [SANGRE & ACERO #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora