Sangre [SANGRE & ACERO #1]

Capítulo 32 - Venganza

La cabeza me daba vueltas.

La claridad de la habitación era demasiada, me obligaba a cerrar los ojos.

Poco a poco, lo conseguí, adaptándome a la pequeña habitación blanca.

¿Que coño hago en un hospital?

- Hey, ya iba siendo hora. - La dulce sonrisa de Arya me hizo pegar un salto.

- ¿Dónde está Ryan? - Hizo una extraña mueca con la cara, echándose hacia a atrás.

No puede ser.

No, el tiene que estar vivo.

No puede dejarme, no así.

- Él ... está grave Sophie, pero los médicos creen que va a mejor. La herida tardará en cerrarse y tendrá que hacer reposo, pero si tiene cuidado se recuperará.

No sabía como sentirme, ¿aliviada? ¿Culpable? Casi mato a Ryan.

- No fue tu culpa, hiciste lo correcto.

La miré, intentando sonreír un poco.

- ¿Cómo es que están atendiendo a Ryan en un hospital?

- Oh, aquí trabajan unos viejos amigos de mis padres, nos están ... ayudando.

- ¿Seguimos en Canadá?

- Sí, aunque en unas hora volveremos a Alaska.

Asentí, poniéndome de pie.

- Hey ¿Dónde vas?

- A ver a Ryan.

- De eso nada, has perdido mucha sangre.

- Arya, por favor. - Le supliqué con la mirada.

Vi cómo debatía algo en su cabeza, y luego asintió.

- Está bien, pero sólo un rato. Cómo venga tu hermano o James y te vean fuera me van a enterrar viva.

Me agarré a ella para no caerme, mientras nos dirigíamos a la habitación de Ryan.

Los pasillos estaban completamente vacíos, supongo que nos habrán mandado a una planta abandonada o que no se use ahora mismo.

- Y ... ¿Adams?

- Cuando llegamos ya no estaba, de echo sólo quedaban unos pocos guardias, no fue muy difícil entrar.

- bEstáis todos bien?

- Jayce se partió el brazo luchando contra uno de ellos, pero ya lo tiene bien. Ventajas de ser vampiro supongo. - Hizo una extraña mueca con la cara mientras me sonreía. - Aquí es, yo te espero fuera, querréis intimidad.

Le agradecí con la mirada mientras entraba.

Me adentré por el pequeño pasillo hasta llegar a la habitación, dónde Jayce se encontraba con Ryan.

Tosí un poco para que se percataran de mi presencia.

- ¿Sophie? ¿Que haces aquí? - Me preguntó Jayce acercándose, no podía ver a Ryan porque estaba en medio y eso me ponía muy nerviosa.

- Vengo a ver a Ryan.

- Ah, bueno, yo ... yo voy a ... tomar un .. ¿café? si un café.

Salió prácticamente corriendo de la habitación, haciéndome reír, definitivamente nunca iba a cambiar.

Dirigí la mirada hasta Ryan, quien me miraba inexpresivo.

¿Ahora qué? ¿Estará enfadado conmigo? ¿No me querrá ver más? Joder le he clavado un puto cuchillo de plata, seguro que me odia.