「𝐒𝐄𝐍̃𝐎𝐑 𝐆𝐎𝐎𝐃﹢₁₈」

🍒「𝐄𝐩𝐢𝐬𝐨𝐝𝐞 𝟕𝟔」🍒

Seguimos caminando con mi papá hasta el altar y de repente vi a mi mamá en la primera fila. Como siempre, hermosa y elegante, con sus costoso vestido lila de Gucci y su bolso Louis Vuitton. Lo que más me impresionó fue verla con un bebé en sus brazos. Ella me sonrió al verme y me lanzó un beso.

Mi mirada fue de nuevo a Jonathan y me encontré con la suya. Al fin llegamos y mi papá me dio un beso en la frente. Jonathan se acercó.

—Terry. —Dijo Jonathan un poco tímido. Papá lo vio con una mirada un tanto fulminante.

—Jonathan. —Respondió. —Traicionaste mi confianza, te metiste con mi princesa y te robaste a mi única hija... —Dice serio. —Sin embargo la has hecho feliz y eso es digno de mi admiración. Espero que la sigas respetando, cuidando y tratando como la princesa que es, pero sobre todo, que la ames.

—Terry, te aseguro que es lo que más deseo hacer hasta el último día de mi vida. —Asegura Jonathan y mi papá le sonríe. Estrecha su mano y Jonathan responde a su saludo. Se abrazan como mejores amigos. —Te quiero mejor amigo.

—Yo también, mejor amigo. —Dice Jonathan sonriendo y se sueltan. Papá se va al lado de mi mamá y Jonathan me ve.

—Linda sorpresa, ¿No? —Susurra.

—Hubiera preferido que me dijeras. —Aseguré y él se rió por lo bajo.

—Adoro sorprenderte, nena. —Sonríe y me da un beso en la mejilla. —Te ves increíble.

—Yo siempre... —Dije divertida y él sólo sonrió.

Nos dimos media vuelta para poder ver al tipo que nos iba a casar. Comenzó a dar su enorme y largo sermón. Odio esto, es decir, ¿No puede omitir la parte donde nos dice cómo vivir y pasar donde nos declara marido y mujer? No necesito que me diga y me recuerde que tengo que amar a Jonathan, lo he amado toda mi vida y así seguirá siendo hasta la eternidad.

Llegamos a la parte de los votos, con Jonathan decidimos decir nuestros propios votos en lugar de "Hasta que la muerte los separe, en la salud y en la riqueza..." ¿Es algo así? ¿No? Whatever, no me importa. Le toca a Jonathan decir sus votos.

—Emma, eres una niña para las personas pero una mujer para mí, la única mujer que quizás me costó más trabajo llegar a amar como lo que eres, una mujer. Todo lo que siento por ti, en algún momento llegó a ser prohibido pero me alegra saber tanto que llegamos hasta aquí, aunque lo dude en algunos momentos por tantos obstáculos que hemos tenido, sin embargo, hoy estamos aquí enfrente de todas estas personas para poder decirte que te amo y lo único que quiero hacer el resto de mi vida es cuidarte, respetarte y amarte. Emma Evans, ¿Aceptas ser mi esposa? —Preguntó y agarró el anillo para poder ponerlo en mi dedo. Para ese momento, mis ojos estaban lagrimosos y no podía dejar de sonreír.

—Acepto. —Dije finalmente y él sonrió. Puso el anillo en mi dedo y ahora es mi turno.

—Emma, es tu turno. —Dice el Sacerdote y asentí. Suspire y vi a Jonathan.