🍒「𝐄𝐩𝐢𝐬𝐨𝐝𝐞 𝟐𝟔」🍒

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Es domingo

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Es domingo. Desde el viernes que no veo al Señor Good, mis papás si lo han visto porque el viernes en la noche fueron a su casa y ayer mi papá se fue a enseñarle unas cosas de su trabajo, pasaron un día de amigos porque al parecer se había extrañado y querían pasar tiempo juntos como los mejores amigos que son.

¿Qué ha sido de mí? Realmente nada, sólo he pasado en mi habitación viendo televisión o escuchando música tratando de olvidarme un poco de él y pensando o creando un plan para que él vuelva conmigo pero sinceramente no se me ocurre nada porque estoy muy triste.

Mi mamá se ha dado cuenta de mi estado de ánimo y es que es tanta la depresión que tengo que ni siquiera hambre me da, lo que le dije a ella fue de que había terminado con mi novio y por eso estaba triste, ella me creyó y me dio su sermón, como era de esperarse, pero ninguna de esas palabras me da aliento para pensar que volveré a estar con Jonathan. No sé qué voy hacer sin él.

Escuche unos golpes en mi puerta, es mi mamá.

—Buenos días, linda —Sonríe mi mamá al entrar.

—Hola, ma...

—Levántate y ve a ducharte porque te necesito.

—Mamá, discúlpame pero no quiero hacer nada... —Dije y me sumergí abajo de mis sabanas.

—Mi amor, en serio te necesito, Jonathan va a venir a desayunar y almorzar, ya sabes como todos los domingo a hacer una barbacoa, que siempre hacían con tu padre, te necesito para que me ayudes a poner los cubiertos y servir la comida.

Al escuchar a mí decir eso sin pensarlo salí de las sabanas y la vi. Literalmente mi corazón saltaba de alegría de saber que lo iba a ver y él me iba a tener que tratar como si nada estuviera pasando entre nosotros.

— ¿Puedo usar vestido?

—Se ve que será un día caluroso así que por supuesto, igual yo me pondré uno... —Dijo mi mamá.

—De acuerdo, creo que eso me distraerá un rato —Sonreí y mi mamá de igual forma.

—Así se habla princesa, ahora ve a ducharte y luego me ayudas, yo igual me iré a duchar rápido.

Mi mamá se retiró de mi habitación y yo salte de la cama a mi closet para ver que vestido me pongo. Tengo pensando en un vestido color crema que la tela es como tejido finamente a mano, es fresco pero lo que más importa es que mi cuerpo se ve increíble en él porque es de tirantes, un poco ceñido a mi cuerpo pero me queda un poco holgado y corto, muy corto, probablemente a medio muslo. Mi papá me dijo que podía usarlo solamente en casa por lo corto y que es literalmente transparente por el tejido así que puedo usarlo aquí.

Me fui a duchar y aproveche a depilarme rápidamente, hace una semana no lo hacía y si las cosas salían bien muy pronto estaría con el Señor Good nuevamente, espero que vuelva a caer como la primera vez, en mis encantos y sobre todo mi cuerpo porque aunque él me haya dicho que no yo sé que por eso él accedió a tener sexo conmigo en mi baño, apuesto un millón de dólares a que si no tuviera pechos y trasero bien formados él ni siquiera se recordara de mi nombre, pero gracias a mi mamá que me dejo buena herencia él estuvo conmigo.

Termine de ducharme, me puse las bragas que él me había regalado y un sostén blanco porque el que Jonathan me dio me queda pequeño y hoy lo que quiero es resaltar mi cuerpo para que él me vea, luego me coloque el vestido y unas zapatillas brillantes plateadas, seque rápido mi cabello y baje a la cocina. Mi mamá ya estaba encendiendo la estufa y calentando una sartén para hacer... Imagino que huevos.

—Ay hija, mírate, que linda estas —Dice mi mamá sonriendo.

—Tú te ves hermosa, mamá —Halague.

Trae puesto un vestido celeste que marca su hermoso cuerpo. Mi mamá es ese tipo de mujer que enamora sólo con verla, tiene lindo rostro, cabello ondulado marrón y un sensual cuerpo curvilíneo, gracias a Dios que es así y que me heredo sus curvas.

—Gracias hermosa, recuerdo que ese vestido era corto pero no tanto —Dijo mi mamá viendo mis piernas.

—Recuerda que tú me lo regalaste, mamá. —Rodé los ojos.

—Lo sé pero creo que es por tu trasero que te queda más corto... —Dijo y seguía viendo.

—Además mi papá me dijo que podía usarlo aquí en la casa. —Agregue. Ella suspiró y asintió.

—Revuelve unos huevos, quiero hacer unos omelet.

Hice lo que mi mamá me pidió y por último fui al comedor para arreglar la mesa y poner los cubiertos y platos. Los puse en los lugares donde siempre nos sentamos excepto por el mío, mi papá se sienta al inicio de la mesa, de lado derecho puse a mi mamá y a la par de ella el mío.

Al Señor Good le puse sus platos a la par de mi papá de lado izquierdo, el cual es mi lugar normalmente así que eso significa que él estará enfrente de mi mamá y de mí, lo hice a propósito para que me pueda ver.

Papá bajo y se sentó en su lugar y se puso a leer el periódico. Con mi mamá llevamos la comida a la mesa, estaba lista sólo para que nos sirviéramos cuando el timbre sonó y mi papá fue a ver quién era.

—Debe ser Jonathan —Supuso mamá.
—Sí —Respondí.

En efecto es él. Entró al comedor al lado de mi papá y lo primero que vio fue a mí, directamente a mí, fue discreto, lo acepto pero no dejaba de ver mis piernas.

𝓉𝑜 𝒷𝑒 𝒸𝑜𝓃𝓉𝒾𝓃𝓊𝑒...

「𝐒𝐄𝐍̃𝐎𝐑 𝐆𝐎𝐎𝐃﹢₁₈」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora