Love Race (Marc Márquez)

"Capítulo 32: Desafío"

Habíamos llegado a Italia, como dirían la casa de Valentino Rossi y la de varios pilotos también. Era la tarde cuando quedamos frente a un imponente hotel, ya me había acostumbrado un poco a esa clase de lugares, la próxima pediría algo menos llamativo bueno eso intentaría ya que esto depende más del equipo, un edificio de cinco o seis pisos más una terraza, todo era de color salmón combinado con dorado, apenas cruzabas una calle y tenías el río y el puente.

El interior también era del mismo color solo que había objetos de color rojo como los sofás y algunas sillas, los muebles antiguos oscuros pero bien cuidados y arriba una araña que brillaba en todo su esplendor, los muchachos fueron a donde se encontraba el recepcionista por las llaves y demás mientras yo me miraba frente a un gran espejo hasta que detrás de mi aparecieron los del team Yamaha y Ducati, rieron al verme presumir al espejo mientras me tomaba una fotografía con el teléfono que me sonrojé "Pero...¿Qué hacen ellos aquí?" me voltee a verlos.

- El hotel está reservado para todos los pilotos- me dijo Pol en cuanto lo tuve a mi lado intentando meterse en mis fotos, quise reír, había leído mi mente-Me pregunto cuál será el desafío de este año-me sonrió aunque yo no entendía nada.

- ¿De qué hablas?- pregunté al terminar de sacarnos las mismas.

- Bueno todos los años que llegamos aquí nos ponen en un mismo hotel y hacemos un desafío para ayudar a diferentes fundaciones.

- Ya veo, suena interesante y es muy bueno-le sonreí para luego irme con los demás a descansar, aún faltan un par de días antes de la carrera para mi suerte tendría una habitación solo para mí eso me hacía feliz.

A la mañana siguiente me levante bastante temprano y como siempre mi ropa estaba preparada sobre la cama, George era muy bueno; me vestí con un short blanco y una musculosa de color turquesa, cuando llegue a un gran salón todos estaban desayunado que me clavaron la mirada y eso que yo no era la única mujer allí, también estaba Helena y otras chicas de los equipos que no les preste atención.

- Hoy comienzan los desafíos- dijo Alex en cuanto me senté a su lado, tomé el jugo de naranjas y el sándwich para comenzar a comer mientras lo escuchaba, en ese instante una voz masculina potente se escuchó a todos que de inmediato prestaron atención.

- ¡Anunciaré los desafíos!- era uno de los técnicos principales del equipo Yamaha que comenzó a señalar- Moto tres, ¡tendrán una maratón!, moto dos ¡una carrera de bicicletas! Y la categoría reina ¡un partido de futbol!- todos se veían emocionados con lo que les había tocado a cada uno, eran como unos niños pero les agradaba hacer eso por los demás se les notaba, cuando terminamos pronto nos dijeron que fuéramos a prepararnos porque los autobuses nos esperaban. El calor comenzaba a sentirse, no faltaba mucho para que el verano llegara que rogaba que la próxima estuviéramos en una playa, cuando subimos solo me dedique a ver los paisajes y los edificios de Italia, fantástico en todos los sentidos hasta que llegamos a un pequeño estadio de futbol, los dividieron en grupos, el equipo de Marc seria el color rojo y el de Valentino sería el azul, antes de sentarme cómodamente escuche.

- ¡Nos hace falta uno!- no sé qué hice pero levante mi mano por impulso.

- ¡Yo jugaré!-dije que todos me miraron sorprendidos, pero les mostraría que era buena que tomé una remera roja, claro que Helena por poco no me mataba con la mirada mientras estaba sentada al lado de George que me animaba.

- Esto es interesante, signorina-me sonrió Valentino en cuanto entre, eso no me gustaba para nada, en más a Lorenzo no parecía importarle muchos después de lo que paso entre nosotros o trataba de no meterse demasiado, bueno debíamos hacernos los indiferentes- Que te parece una apuesta-cuando escucharon eso todos se interesaron, pero a Dani, Marc y a mí no nos gustaba para nada-Si mi equipo gana me prestas a la chica para que sostenga mi paraguas en la carrera y pagar la merienda de los demás.

- Ni lo sueñes.

- ¡Acepta, será divertido!- dijeron los demás en coro "¿Están locos? ¡Me están apostando!", y sin más rodeos comenzamos a jugar cuando escuchamos el silbato, tendría que defender mi honor y dignidad ante todos ellos, que en un pase que le hice a Dani pudo evadir a unos cuantos y meter un gol para festejar, estaríamos uno a cero en el marcador; me di cuenta que no estaba en forma porque me estaba cansando fácilmente aunque anduviera en bicicleta con los muchachos y eso que casi llevábamos la mitad hasta que escuché gritar a todos los del equipo contrario, el marcador estaba empatado.

De a poco la tarde se iba asomando y claro que el partido de fútbol debía terminar, solo faltaba un gol para ganar, no me daría por vencida que junte todas mis fuerzas para correr y hacer los pases con los chicos, todos eran buenos en esto no solo en la pista de carreras, pero también debía admitir que me estaba divirtiendo mucho que valía la pena ver tanto futbol con mi padre y todo el deporte habido y por haber.

Marc tenía la pelota, la estaba dominando muy bien pero los lados apareció Lorenzo para quitársela y esquivar a todos, Dani y yo corríamos detrás de él pero había sido tarde, había logrado hacer ese gol y así poner fin al partido cuando escuchamos el silbato del árbitro, todos celebraron, pero al menos ayudaríamos a una fundación.

- Bienvenida al team Yamaha-me susurró Valentino al oído en cuanto paso a mi lado, Marc en cambio se fue un poco molesto a cambiarse de ropa que me acerque a él, mucho no le gustaba perder.

- Hey campeón, ¿estás bien?- me miro con seriedad, más bien parecían celos, hasta Dani se había dado cuenta- No es nada malo, solo será una vez- le sonreí dándole una toalla para que secara su sudor.

- Tienes razón, pero la idea no me agrada.

- Se defenderme, si se quieren pasar de listos- eso lo hizo reír que le guiñé el ojo, lo único que faltaba era esperar el día de la carrera.