Historia de Vida - Wigetta MPREG

Capitulo I

Por qué mierda a Rubén se le antojaba salir de fiesta por todo? Por qué dios, por qué? Esta vez el argumento era la celebración por los cuatro millones de suscriptores de Mangel y la fiesta no sería poca cosa. Hay un bar, Lexuus era el nombre. Era uno de tipo antro, donde los culos de todos se restriegan con los culos de todos y los baños son escenarios de episodios de sexo salvaje entre adolescentes y no tan adolescentes consumidos por el alcohol y las drogas que a veces llevaban en su sangre. Lindas ideas las del Rubius, no? Preciosas. Bueno... El caso, los diez amigos allí estaban, sentados todos en unas mesas exclusivas pero que todavía no tenían la capacidad de aislar el sonido excesivo de la electrónica que sonaba y es que, macho, con lo cara que salió esa reserva hasta deberían estar suspendidas sobre propulsores y llevarte hasta París si así quisieras.
Vegetta estaba sentado, solo, con las piernas cruzadas, cara de pocos amigos y jugando en el móvil a modo de evitar hacer creciente su dolor de cabeza. Él odia este tipo de antros, es un chico más de casa y este ambiente le tenía sofocado.

- Tío, por qué no bailas y tomas unos tragos? Tienes una cara de culo que.., uff!- se le acercó Frank aparentemente con unas copas de más y Vegetta lo fulminó con la mirada. Ahora su único deseo era que se hicieran las seis de la mañana para así poder irse pero su esperanza caía al ver que recién era media hora pasadas de las doce.

- No me gustan estos lugares, macho. Estoy contento por Mangel y eso pero me quiero ir! Tengo un dolor de cabeza que flipas- respondió tratando de ser lo menos grosero posible.

- Tomate algo, aunque sea una cerveza. Tío, verte así me deprime. Parece que recién te hubieran dejado- sin duda, Frank borracho era lo más asquerosamente sincero con lo que podrías toparte en tu camino, y eso que este no es su punto máximo de alcoholismo. Vegetta suspiró frustrado y bloqueo la pantalla de su móvil.

- Tomare una cerveza y solo para que dejes de joderme la existencia- era bastante complicado ver a Vegetta en ese estado, es decir, él siempre es de ese tipo de chico amable y cariñoso, tanto que cualquiera pensaría que es homosexual si lo vieran en sus momentos melosos, pero hoy no era uno de esos días. Para empezar, había grabado un vídeo de Uncharted 4 que había quedado que flipas en colores y el maldito sistema de YouTube se cayó mientras el gameplay se procesaba y lo perdió. No se sabe que leches pasó pero el vídeo no estaba ni en internet ni en su computadora. Solo basto eso para que ya se fastidiara el día de Samuel y si vamos a sumarle su malhumor e incomodidad por la discoteca... Es que el tío estaba hecho una furia y lo que más ganas tenía de hacer era de romper algo.

- Toma, a ver si se te sale esa cara de amargao- Frank le tendió la bebida y Vegetta la bebió sin rechistar.  Es verdad que el alcohol no es su sustancia favorita, mucho menos por lo deportista y cuidado que es de su figura pero era solo una vez. Es más o menos como cuando estás en una dieta súper estricta y te comes una galletita, lo mismo. Samuel se bebió toda la bebida sin respirar, y al terminar sacudió su cabeza. Inmediatamente se sintió relajado, y es que con la tensión que tenía no iba a terminar bien- Mejor?- pregunta Frank al verle dejar el vaso sobre la barra con un golpe seco. Samuel asintió y respondió de mejor forma. sTaXx se va a la pista, dejando a Vegetta solo y consigo mismo. Al casi no tomar alcohol esa pequeña ingesta había relajado severamente a este, quien se apoyaba levemente sobre la barra, pensando. Ahora el buen humor lo inundaba, como si por arte de magia fuera. Sonrió. Se sentía bien, cómodo. Miró alrededor y todo se veía borroso, no por haber tomado una cerveza si no por las luces y el humo de la máquina de humo. Trató de localizar a sus amigos en la neblina del local, cosa que era ya de por sí era complicada, con ese exceso de gente iba a ser imposible. Logró ver a Rubén, bailando con dos chicas rubias, y es que su cabeza sobresalía entre la multitud. Lógico, midiendo casi dos metros... Ese no era el punto. Miro un poco hacia la derecha y divisó a Alex y a Frank restregándose. Si bien era cierto que dentro de los amigos el Staxby estaba confirmado, nunca se los había visto así, tan... Demostrativos. Se abrazaban, toquetean, besaban delante de todo el mundo y no les importaba. Había gente que los miraba raro y otros que simplemente ignoran la situación de... Intercambio de afectos. Vegetta sonrió. Los envidiaba en cierta forma y lo peor era que no sabía por qué lo hacía. Envidiaba su forma de quererse, envidiaba la confianza que ellos tenían, envidiaba en pocas palabras su forma de hacer que el amor y el cariño superara sus diferencias y dificultades. Envidiaba su valentía de mostrarse al mundo.
Vegetta era bisexual, y para él ese tema no se discutía, él se asumía y se quería a sí mismo tal y como era solo que decirlo tanto a sus amigos como a las cámaras era algo que le aterraba. Temía por el futuro de su canal, temía que todo cambiase para mal y salir perjudicado. De todas formas... Ese no era ni momento ni lugar para ponerse a decidir sobre eso. Siguió mirando el lugar. Vio a Cheeto y a Mangel con dos chicas pelirrojas, probablemente hermanas, bailando y sacudiendo sus cuerpos atrevidamente. Aparentemente todos tendrían una noche de buen sexo menos él.