Era un autentico cabrón, eso era ¿como pude haber sido tan tonta? Y me da risa que pensé que al entrar a la escuela, todo iba a ser diferente, iba a estar con él, pues vaya que fue diferente, pero fue una diferencia que me hubiera gustado no haber descubierto. Comenzaba a anochecer y mi madre entro en la habitación.
-Tristan- dijo ella y se sentó a mi lado- ¿esta todo bien? ¿que ha pasado? Todo el día has estado muy decaída y comienzas a preocuparme, apenas y has comido y no quieres cenar.
-No lo se mamá- dije suspirando- estoy bien, solo, fue un mal día, eso es todo- me force a sonreír, no quería que mi madre se preocupara por un tarado sin sentido.
-Bueno cariño- dijo acariciándome el cabello- seguro mañana sera mejor.
"Si claro" pensé, pero no se lo dije, se fue de mi habitación y yo me acosté de nuevo, ni siquiera había pensado en que lo tendría que ver en la escuela toda la semana, rogaba por que acabara la semana, no quería verle la cara.
El día siguiente transcurrió sin novedades, realmente no tenia ganas de nada así que iba de la escuela a mi casa y mi casa a la escuela, no salia con mis amigas, no quería tomar el móvil para nada, no quería ver sus mensajes con excusas tontas, no quería nada de él.
El viernes, al salir de la escuela, sentí una inmensa paz, por fin esta horrible semana se había acabado, y tenia dos días completos para descansar de todo. Para mi sorpresa al llegar a mi casa, Danna estaba sentada en mi sala esperándome.
-Ahh cariño- dijo mi madre abrazándome- Encontré a Danna fuera de el departamento y le invite a pasar.
-Claro, ¿que pasa Danna?- dije dejando mis cosas sobre el sofá.
-¿Podemos pasar a tu habitación? Necesito decirte algo.
-Claro- dije, esto estaba empezando a incomodarme. Llegamos a mi habitación y cerré la puerta le dije que se sentara en mi cama.
-Bueno- dije- ¿que es lo que pasa?
-Se lo que paso con Tyler- hizo una pausa- se que lo viste besándose con otra chica.
Genial.
-Si ¿y?- dije intentando sonar fuerte- Él y yo no eramos nada, tenia todo el derecho a besarse con quien le viniera en gana.
-Sabes que eso no fue justo para ti, pero él tiene una buena explicación y te suplico que le escuches- decía mientras se ponía mas cerca de mi.
-¿Explicarme? Él no tiene porque darme ninguna clase de explicación, no somos nada y no soy quien para reclamarle nada.
-Ya, lo se, solo digo que deberías escuchar lo que él tiene que decirte, para que por lo menos si no van a seguir como pareja, puedan ser amigos.
-No se, no tengo ganas de hablar con él- dije mirando el móvil.
-No estoy diciendo que hables con él ahora mismo, estoy diciendo que hables con él en persona, el lunes a la salida. Él te estará esperando a un lado de las jardineras, para que arreglen todo el asunto.
-No lo se Danna- dije poniéndome de pie- no estoy segura, pero ya veremos.
-Bueno, pero inténtalo. Por favor.
Terminamos nuestra conversación y decidió que era hora de irse. Regrese a mi habitación y me quede de pie frente a la ventana. ¿En serio iba a hablar con él? ¿Iba a escuchar las mil y un excusas que todos los chicos dicen para zafarse de un problema?
Quizá todo tenia una explicación, o quizá no la había.
ESTÁS LEYENDO
The Next Three Girls
Teen Fiction"La amistad lo puede todo" Suena lindo ¿ah? Lo cierto es, que muchas veces nos pone en las encrucijadas más grandes de nuestra vida, nos gusta creer en los cuentos de hadas pero lo cierto es que no sabemos que es lo que pasará más adelante, y a que...