Las chicas.

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Sonó el timbre que indicaba la hora de cenar, Patrick se quitó su uniforme (el cual me dan mañana y sinceramente, lo veo horroroso) y se puso ropa normal, una camiseta oscura con una chaqueta de cuero negra, unos jeans negros y una fedora.
Yo me puse mi sudadera favorita de "The Ramones" y unos jeans oscuros.
Al parecer en este internado dejan a los alumnos expresarse al menos en su tiempo libre.
Salimos de la habitación hablando de música, me gusta cuando hay alguien que sabe de música tanto como yo, y Patrick no sólo escucha música, sino que compone canciones y toca una gran variedad de instrumentos, éste chico cada vez me cae mejor.
Llegamos al comedor y lo primero que hice fue buscar a Mikey con la mirada, y lo encontré hablando animadamente con Bob en la mesa del grupo.
Cuando llegamos a La mesa nos sentamos, yo junto a Mikey y Patrick junto a Pete, que le abrazó tan fuerte cuando lo vió que creí que me quedaba sin compañero de cuarto.

-{estos dos van a liarse}- me susurró Mikey mientras sonreía y, es verdad que Pete es muy cariñoso con Pat, y éste se sonroja cuando lo abraza.

-{me parece que tienes razón}- dije sin quitar mi vista del rostro sonrojado de Patrick.

No quería comer, no por nada, sino porque a ésto no se le podía llamar comida, es como puré sin sabor.

En frente de mí estaban Frank y Ray, quienes nos miraban a Mikey y a mí como si les fuera la vida en ello, alcé la vista y los miré confundido.

-¿que?- dije mirándolos nervioso.

-¿nerviosos?- nos preguntó Ray a mí y a Mikey.

-¿por qué tendríamos que estarlo?- preguntó Mikey aún mas confundido que yo.

-la iniciación, estúpidos- cómo no, Frank tan simpático como ésta tarde.

-no hace falta insultar Frank- dijo Ray dándole un codazo.

-ay, si, que vale.- dijo molesto y jugó con su comida.

-esto no se puede comer- mascullé soltando el tenedor y apartando la bandeja.

Cuando subí la mirada, me encontré con unos ojos avellana que me miraban fijamente, quería apartar la mirada por lo que dijo esta tarde, pero no puedo, me quedé atrapado en su mirada, estaba como paralizado.

-¿tengo monos en la cara?- claro, olvidaba a quién estaba mirando.

-lo siento- bajé la mirada a mis manos y me ruboricé. Espero que no lo note.

Al terminar de cenar Pete nos dirigió hasta el armario del conserje, con las fregonas y los productos de limpieza.

-Hay que quedarse aquí hasta que se apaguen las luces.- nos explicó.

-pero... ¿No se darán cuenta de que no estamos?- preguntó Mikey.

-Nah... Lo hemos hecho un millón de veces y nunca nos pillan- explicó Bob.

-hagamos algo para entretenernos.- dijo Pete sonriendo.

-contemos por qué estamos aquí- sugirió Frank.

-buena idea- dijo Ray- yo estoy aquí porque me pillaron drogándome en el baño- lo miramos todos con los ojos abiertos- tranquis tíos, era solo marihuana, pero mis padres hicieron un drama de ello.- dijo encogiéndose de hombros.

-yo estoy aquí por mis asquerosas notas- explicó Pete- qué puedo decir, soy un rebelde sin causa- le guiñó un ojo a Patrick y éste se puso rojo. Es jodidamente adorable.

-a mí me expulsaron por romperle una pierna a un chico más mayor que yo- dijo Frank- sólo me defendía, pero mis padres se querían librar de mí y aprovecharon la situación- parecía estar a punto de llorar y me entraron ganas de abrazarlo- pero se llevó su puto merecido- sonrió maliciosamente, y... Adiós ganas de abrazarlo, hola ganas de ahorcarlo.

Mama we all go to hell.(Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora