Ryan Ross y Spencer Smith.

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[Narrador omnisciente]

Ryan era buen chico, aunque un poco  tímido, pero eso no le impidió entablar una conversación con Gerard, quien, hablando con Ryan, se olvidó de todo lo que pasó anteriormente, incluida su incómoda e hiriente conversación con Frank.
A Ryan le gustó todos los chicos de aquel extraño grupo, bueno, todos excepto Frank, quien no se fiaba de los nuevos como siempre.

Ryan cogió mucha confianza con Gerard y patrick (sobre todo con Gerard). Aunque les conocía a penas de 20 minutos, jamás había hablado tanto con alguien como con ellos.

La comida pasó y se dirigían cada uno a su habitación ha hacer sus deberes o ha hacer el vago (ejem, Frank, ejem).

–hey RyRo, ¿te vienes a nuestra habitación a estudiar? Creo que tenemos el mismo profesor de Historia.– le dijo Gerard a Ryan pasándole el brazo por los hombros.

–oh claro Gee, ¿me ayudarías con el tema 9? Voy de culo.– Gerard rió y asintió. Mientras Frank estaba mirándolos desde el otro lado del pasillo al lado de Ray, Bob y Spencer.

–enano, ¿nos estás escuchando?– Bob le pegó para que prestara atención.– deja de mirar tanto a Gerard y concéntrate en la iniciación.– se giró de nuevo para hablarle a Ray– a ver, llamamos a las chicas y bajamos como a las 00:30 que es cuando apaguen las luces.– Ray y Spencer asintieron mientras que Frank estaba perdido en sus pensamientos otra vez.

Gerard, Ryan y Patrick andaban por el pasillo de las habitaciones de la planta baja camino a la habitación de el pelinegro. Cuando llegaron abrieron la puerta dejando a Pete, Ray, Bob, Spencer y Frank sin siquiera despedirse.
En la habitación, Gerard le seguía explicando la misma página del libro de historia desde hace 1 hora, Ryan era incapaz de concentrarse, mira que Gerard lo repetía una y otra vez de la manera más sencilla y resumida que se le ocurría, pero a Ryan sólo se le quedaban los 3 primeros párrafos, y lo demás se le olvidaba por completo.
Patrick se rindió porque él ya se sabia todo el tema y más esa maldita página que no paraban de repetir.

Cuando al fin se la aprendió y pasaron a la siguiente, era  casi la hora de cenar, así que Ryan se fue a su habitación a vestirse para la cena y Gerard se fue a ducharse mientras llegaba Patrick.
Ya vestido, esperó a que Patrick saliera del baño para ir al comedor.

Bajando las escaleras se encontraron con Ryan y Spencer, así que decidieron bajar juntos. Mientras Patrick le contaba algunas anécdotas del grupo a Spencer, Gerard hablaba con Ryan sobre música. Así siguieron hasta llegar a la mesa donde ya se encontraban los demás.
Ryan comía mientras le contaba a Gerard el por qué de estar en ese internado, resulta que los padres de Ryan son muy religiosos y no soportan que su hijo sea "maricón".
Gerard le dió su apoyo, pues el comprendía bastante de aquello.

Por primera vez desde que estaba en ese grupo, Gerard no paraba de hablar. Incluso se reía, pero no falsamente, sino de verdad. Mikey lo miraba impresionado, pues su hermano no solía coger tanta confianza con alguien así.

Al terminar de cenar, se dirigieron al armario de los productos de limpieza como siempre. Ryan y Spencer los miraban raro, claro, 9 chicos encerrados en el armario del conserje esperando a que apaguen las luces para salir de ahí, no es muy normal que digamos.

Cuando les enseñaron el túnel se quedaron flipando, o sea, se sentían como si en realidad estuvieran en una película de miedo.
Ryan no se despegaba de Gerard quien le hablaba de lo jodido que era estar encerrado en un internado y bla bla bla. A Ryan sólo le interesaba oír su dulce voz, es que, Gerard tiene una voz tan dulce.
Frank iba detrás de ellos, mirándolos con desdén, ¿cómo se atrevía ese estúpido mini-intento de emo a hablarle a Gerard? Frank se maldijo por pensar esas cosas, tenía que ignorarlos, se centraría en no meterse en problemas.
Cuando terminaron la iniciación estaban todos cansados, había sido un viernes largo, y para Gerard y Mikey, una semana muy rara y tortuosa.
Lo único en lo que pensaban era en hundir la cara en la almohada y no despertar jamás.
Las chicas a penas les dejaron respirar, menos Jamia y Melanie, quienes estaban en una esquina hablando apartadas del grupo.
Lin-z no quería alejarse de Gerard, éste quería alejarse de ella, Ryan miraba a Lin-z con cara de odio, Frank miraba a Ryan y a Lin-z con cara de odio. Lo normal en un grupo de amigos que se quieren.

Spencer es un chico muy callado e intimidante, de esos que te da miedo acercarte porque crees que te irás calentito, pero en realidad es un buen chico, con sonrisa cálida y ojos claros... Aunque con muy mala hostia si le enfadas. Él se hizo muy amigo de Mikey esa noche, le parecía tierno su gusto por los unicornios y le daban ganas de espachurrarle con un fuerte abrazo de oso. Eso cabreó a Bob, quien los miraba desde lejos mientras Ray y Pete discutían con Hayley de yo-qué-se-qué.
Estaban planeando algo para pasar el sábado todos juntos por la noche y volver tarde. Aunque el domingo tengan misa... Si, misa, donde le rezas a un dios de dudosa existencia, pidiendo que te resuelva todos los problemas de tu miserable vida. Si, misa, donde un cura te da sermones que lee en un libro supuestamente "sagrado". Sí, misa, donde te tienes que estar callado y ser bueno, porque si no dios te castigará o arderás en el infierno.
Pues eso, misa.

Olvidando ese tema, nuestros chicos andan ilusionados, dado que los sábados se pueden alejar lo que quieran de ese internado, siempre y cuando vuelvan antes de las 5 de la mañana, la hora en la que las monjas se despiertan y revisan las habitaciones.
Nuestros chicos planean algo grande para el sábado por la noche.

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NoTaH

Pues eso, es un poco muy corto el capítulo, pero es que me va mal el móvil y lo subo desde ahí 😭
Llegarán muchos más personajes a parte de Ry y Spence.🌚

🌚

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Mama we all go to hell.(Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora