Líos y más líos.

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[Narra Andy]  

Cuando entré en la habitación, Oliver me miraba mal, aunque no sé de qué me sorprendo, él lleva tratándome así desde que entré por primera vez en la habitación. El hecho de que me guste, sólo lo empeora. Si, lo sé, ¿cómo me puede gustar alguien que no me soporta? ni idea, solo, pasó. 

La verdad... yo no quiero "sacarles información" a esos chicos, me caen bastante bien. Sólo lo hice para acercarme más a Oliver, pero no funciona, me odia más. Ahora tengo que hacerle los deberes, y yo me dejo mangonear por él porque... bueno porque... me gusta, mientras él se va a la habitación de su novio. Sí, tiene novio, se llama "Bert McCracken" y es un hijo de puta de mucho cuidado. Conozco a los gilipollas como él, si le pones una puta rubia con tetas de silicona en los morros, no dudaría ni 3 segundos en tirársela, pero Oliver no se da cuenta. 

Me estoy hartando de ésto, llevo aquí 2 semanas y me dejo mangonear por un grupo de mierda, por culpa de un chico con el que, desgraciadamente, no tendré oportunidades. Me rindo, me gusta más el otro grupo, se nota que hay amistad de verdad. 

Salí de la habitación, tenía que... pensar. Pensar en qué hacer, en a cuál de los grupos traicionar. Salí al patio, pidiéndole permiso a una de las monjas, diciéndole que necesitaba tomar aire, que tenía "claustrofobia" y la muy idiota se lo tragó. 

Me senté en uno de los árboles y me puse a pensar, la verdad, no sabía qué hacer, de verdad que Oli me gusta mucho, demasiado diría yo, pero para qué, está con ese idiota, yo soy un cero a la izquierda. Estaba tan hundido en mis pensamientos que no ví que alguien se acercaba a mí con paso acelerado. Noté que me cogían de la camiseta y me levantaban.

-a ver idiota- era Frank. Hablaba entre dientes.- no te acerques a nosotros, nunca te diremos nada sobre el túnel.- me dijo muy enfadado, mientras yo le miraba con los ojos muy abiertos.

-no sé de qué me hablas...- le dije con dificultad, pues me agarraba muy fuerte del cuello de la camiseta.

-no te hagas el idiota, te escuché, dos malditas veces, hablando con tu grupito.- dicho ésto me soltó, dejándome caer al suelo.

-Frank, no es lo que parece... yo sólo lo hago por una razón...- le dije asustado al ver que se disponía a pegarme.

-¿a sí? ¿cuál?- me dijo con el puño alzado.

-eso no te lo voy a decir, aunque me pegues.- le dije sonriendo. Me pegó un puñetazo, ¿ninguna monja de mierda está mirando cuando lo necesitas?- para, para.- le paré el puño.

-dime la razón.- dijo más enfadado aún.

-me gusta alguien...- le dije sonriendo, no, no le iba a decir que era Oliver, no quiero que me mate el gilipollas de su novio. Tenía que pensar algo rápido, le miré y le besé. Sí, le besé, a Frank, a ese idiota, le besé, beso, del verbo besar... me correspondía, sí, él me correspondía, por alguna razón. No hacía nada para separarse de mí, al menos hasta que escuchamos un crujido de las hojas del suelo...

-p-perdón... mejor me voy.- dijo Patrick caminando hacia atrás.- pensé que... estaban peleando y... da igual... perdón.- dicho ésto se dió la vuelta y salió corriendo. 

-PATRICK ESPERA!- gritó Frank muy nervioso.- mierda... no nono...- se pasó las manos por la cara- ésto es tu culpa... no sé en qué pensaba... mierda mierda- dijo entre dientes.

-tú me respondías el beso.- le dije enderezándome, me sangraba el labio y dolía...

-fué por... miedo.- dijo mirando a la nada.

Mama we all go to hell.(Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora