Capítulo 27
SOPHIE
Sus manos viajaban por mi cuerpo tratando de deshacerse de la prenda que llevaba puesta. Su aliento me embriagaba con el dulzor del licor que había ingerido unas horas antes en el evento. Nuestros besos se intensificaban al pasar de los segundos y mis manos se perdían en su cabello. Sin embargo, no quería seguir con eso de aquel momento. No estaba lista.
― ¿Qué sucede? ―me preguntó Ben con el aliento agitado al ver que me senté en un rincón de la cama.
Lo miré solo por un segundo y luego me perdí en una de las paredes de la habitación.
Sentía ese típico nudo en la garganta, el que no te deja hablar ni hacer nada porque el próximo paso es el llanto sin poder contenerlo. Suspiré dificultosamente y fue todo lo que necesitó para entender la situación. Sus brazos me rodearon y besó mi cabello. Sollocé en silencio mientras él acariciaba mi espalda.
―Te esperaré el tiempo que sea necesario, Sophie ―me susurró sosteniendo mi rostro para que lo mirase.
Lo besé en los labios en gesto de agradecimiento y lo abracé de nuevo.
[...]
―Louis, no lo hagas ―una voz en el pasillo se escuchaba a medida que me aproximaba.
―Debes mantener la calma ―repitió la voz.
Supe en ese momento que era Harry.
―Louis, en pocos días estaré de vuelta ―al verme, se impresionó―, debo irme pero recuerda lo que hemos hablado.
Colgó la llamada y esperó a que hablara.
― ¿Está todo en orden? Sonabas preocupado.
―Nada que no pueda controlar ―espetó seco mirándome de arriba abajo.
Suspiré.
― ¿Siempre me tratarás así?
― ¿Así cómo?
―Tú sabes, Harry. Indiferente.
Rió por lo bajo.
― ¿Cómo se supone que deba tratarte? Saber que eres la novia de mi primo... ―masajeó sus sienes―. Diablos... ―susurró.
― ¿Qué?
Me miró por un momento.
―Sólo olvídalo. Pronto te darás cuenta.
Y se fue, dejándome sola en la cocina a altas horas de la madrugada.
[...]
Una melodía suave provenía de la sala principal de la casa. Una voz a lo lejos acompañaba el sonido del piano. Mis pies se arrastraban sobre el piso frío en medio de la madrugada mientras fregaba mis ojos por la pereza que invadía mi cuerpo. Maldije por lo bajó cuando mi dedo pequeño se golpeó con un mueble del pasillo.
Ben se encontraba sumergido en las teclas del piano y Harry cantaba con sus ojos cerrados sentado en el sillón mientras extendía sus piernas a lo largo de él. Ninguno de los dos se percató de mi presencia y pude presenciar su hermoso número desde un rincón de la sala.
―Vaya, sería lindo tener público más seguido... ―Ben comentó con una sonrisa al verme.
Reí por lo bajo y me acerqué hacia ellos. Harry no hizo comentario alguno y se reincorporó en el sillón. Sólo sus ojos me daban una señal de que prestaba atención a la situación porque parecía que no iba a hablar.
― ¿Qué haces despierta a esta hora? ―susurró en mi oído de manera cariñosa enredando su brazo en mi cintura. Besó mi frente y me miró esperando mi respuesta.
―Los escuché y quería verlos ―murmuré escondiendo mi rostro en su cuello.
Sentí la respiración pesada de Harry por mi gesto con Ben. Sabía que eso le molestaba pero tampoco iba a evitarlo porque era mi novio quien me estaba abrazando y no me privaría de nada.
No es tu novio aún, Sophie. Diablos.
―Bien, creo que iré a descansar ―comentó escueto Harry.
Lo miré por última vez para encontrarme con sus ojos verdes en las penumbras de la sala y se marchó lentamente.
― ¿Quieres ir a descansar?
Lo miré por un momento y envolví su rostro con mis manos. Sonreí cómplice y él se unió al gesto. Negué con la cabeza como respuesta y comencé a besarlo. Poco a poco nos fuimos aproximando al sillón en donde se encontraba Harry. Me recostó suavemente y se posicionó sobre mí sin hacerme daño.
Al principio los besos eran lentos e inocentes, pero luego se fue tornando todo más apasionado y debía admitir que comenzaba a sentir algo en mi interior. Nuestras respiraciones se iban alterando con cada beso y juego de labios y dientes. Mis dedos tironeaban de su cabello haciendo que él perdiera totalmente la cordura e incitando a sus manos que recorrieran mi cuerpo. Reímos entre besos por las pequeñas cosquillas que me producía su tacto cuando levantó un poco mi camisa para acariciar mi vientre. Su mano delineó el borde de mi pequeño short y sentí que quería más en ese momento. Gemí como respuesta.
―Alguien está más despierta de lo que pensé... ―susurró sobre mis labios pícaro.
Reí cambiando la posición quedando arriba de su cuerpo.
―Podría decir lo mismo de ti ―contesté juguetona con el mismo tono que había utilizado él y lo besé nuevamente.
Comencé a mover mis caderas contra las suyas haciendo que la temperatura de ambos aumentara completamente de lo que ya venía ascendiendo. Sus manos se posicionaron en mi cadera marcando un paso. Sus ojos miraban directamente los míos totalmente sumergidos en ese momento lleno de lujuria.
El ruido de la puerta nos hizo parar y nos reincorporamos en el sillón.
― ¿Qué hacen despiertos a esta hora de la madrugada? ―preguntó la madre de Ben.
Sentía que el calor en mis mejillas se apoderaba de mí.
―O debería preguntar yo dónde ha estado mi madre a estas horas de la noche ―dijo tratando de ser simpático Ben.
Sin embargo, sabía que hablaba en serio y no entendía por qué su madre llegaba a esa hora.
ESTÁS LEYENDO
Unknown World||H.S
Fanfiction"―No lo haré. Él rodó los ojos ante mis palabras. ―Eres el suplente y no practicaré contigo ―refuté mi decisión. Rió pero su sonrisa se borró al hablar conservando el brillo en sus ojos verdes. ―Sin embargo, lo necesitas. Ahora cállate y bésame...