La persona que me besa es la que daña mi alma.
Lloro desconsoladamente en mi habitación; las noches comienzan a transcurrir esperando la famosa despedida de Chandler. Hundo mi rostro en la almohada para ahogar mi llanto en ésta, pero mientras más intento callar, más fuerte y doloroso se vuelve.
Las emociones chocan sin parar, en las mañanas sonrió, en las noches lloro hasta quedar dormida. Me giro, y veo la ventana, el delicado viento que entra por las hendijas golpea las cortinas y las eleva suavemente. Así mismo ese aire fresco y mañanero entra por mis pulmones para detener mi llanto. Respiro hondo unas cuantas veces y elevo mi mirada para contener las lágrimas.
Me veo en el espejo de mi baño; mi piel viste blanca, como papel, mis ojos rojizos como si hubiese embarrado colorante rojo en ellos, y mis labios resecos. Eso no deja más lugar a duda que he estado llorando.
Tomo un poco de corrector y lo esparzo por éstos, pellizco un poco mis mejías y éstas lanzan un leve rosa y así salgo de mi habitación, sin antes no pintar una alegre sonrisa.
-Buenos días -dice Madison.
Ella bate un poco de masa para waffles. Y tiene el teléfono en su oreja sostenido por su hombro-. Yo también te amo. -Me da a entender por gestos que habla con Abraham.Asiento con una sonrisa. Y me dispongo a tomar una taza de café.
Toc. Toc.
Me levanto del sofá y abro la puerta. Ahí veo a Chandler, éste sostiene una bolsa café y dos starbucks. Sonrío al verlo, y le permito entrar.
-Buenos días, señorita -dice sonriente.
-Buenos días -respondo mientras rodeo con mis brazos su delgado cuerpo.-
Camino por los pasillos de Clintton, mientras tarareo una canción, Be alright de Justin Bieber. Esa canción siempre me calma. Esa canción calma cualquier alma vacía.Llego al salón al ala este del edificio de medicina -el ala de práctica- entro al salón y tomo asiento. Veo a todos mis compañeros hablar y reír sin parar, pero por alguna extraña razón mis oídos ignoran sus charlas, evitan cualquier conversación. ¿Desde cuando he sido así? Tan vacía, triste... sacudo mi cabeza para sacar esos pensamientos. Debo tener pensamientos buenos para tener un día bueno.
-Buenos tardes, jóvenes -saluda el profesor mientras recorre el aula hasta su escritorio.
Todos asienten en busca de sus asientos.
-Profe, ¿es verdad que debemos ir al hospital Josepht? -pregunta un alumno.
-De eso quería hablar con ustedes. Dentro de unos minutos debemos irnos. Así que que no vayan a olvidar sus batas y sus libretas.
Todos -a excepción mía- comienzan a gritar de alegría. Si me ilusiona la idea, ya estamos a poco de ser profesionales.El profesor comienzan a narrarnos historias de su vida, y así los minutos pasan deprisa llegando a la hora de dejar la Universidad.
-Increíble, ¿no? -dice una voz atrás de mi.
Volteo y veo a Dylan sonriente. Asiento.
-Yo no soy como Jason -murmura-, soy su amigo, pero eso no significa que sea igual que él.
Me sonríe y pasa uno de sus fornidos brazos por mis hombros, dejando caer su peso sobre mi.
-¡Dylan! -chillo-, pesas mucho -digo y suelto una risa.
Él quita cierto peso y me mira con una sonrisa.
-Eso quería lograr, una sonrisa. -Guiña su ojo y me sonríe divertido.Dylan es un chico muy atractivo, tiene una sonrisa muy linda, ojos grises, cabello castaño claro, con muchas pecas en su rostro, y unos rasgos en su mandíbula que lo hacen ver tan varonil y bravucón.
Comenzamos a recorrer salas tras salas en el hospital. Tratábamos de no incomodar, pero era imposible. 30 adolescentes -bueno, adultos- que murmuraban sin parar cosas, que reían y preguntaban sin parar: ¿Qué? ¿Puede repetir?
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"Mi Mejor Amigo Es Chandler Riggs" (Chandler Y Tú)
Fanfiction"Hay cosas que no están destinadas a pasar como nosotros..." "Quizás pueda surgir más que una amistad entre ambos..." Será la típica historia de los mejores amigos que pasan a ser novios. O ¿no? Te atreves a averiguar si entre _______- y Chandler ex...