Capítulo XLII

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Eres tan hermosa que es injusto verte sufrir.

Abro mis ojos lentamente y siento un brazo sobre mi cuerpo, giro un poco mi cabeza y veo a Chandler dormir con parsimonia. Esbozo una sonrisa y me giro para hundir mi rostro sobre su pecho.

Aún trato de asimilar lo que paso la noche de ayer, aún trato... ¿Pero cómo? Mis pensamientos vuelven a sumergirse en los torturadores recuerdos, que dolor más grande se siente ver a la persona que amas cometer una alevosía contra ti, la que pensaste que también te amaba. Siento como las lágrimas caen en silencio por mis mejías.

-__________, no sufras más -murmura Chandler.

Pero no solo lloro por lo que paso ayer, sino por todo el dolor acumulado. Las peleas, los celos innecesarios, las mentiras... Todo, todo invade mi cabeza y salen de mi cuerpo en forma de lágrimas. Chandler rodea con fuerza sus brazos a mi cuerpo y mi rostro queda tan pegado a su pecho que escucho sus latidos.

-No dejes que los recuerdos ofusquen tu mente.
-Es que...
-Duerme, hoy es domingo, y apenas son -mira su reloj de mano-, las 7:35.

Hago caso a su orden y cierro mis ojos, inspiro hondo y exalo el aire muy lento y en segundos el nombre de Jason vuelve a aparecer a mi cabeza y ¿qué más? Llorar, eso es lo que hago cuando pienso en él.

-Oh, mi _________ ya, ya. Por favor no llores -suplica Chandler-, haces que se me rompa el corazón.

Lo veo con tristeza y el me observa con más, suelto un gran quejido y me escondo -una vez más- en su pecho.

-
Luego de tres semanas torturadoras y escondida en una enorme depresión, por fin sonrío. Chandler ha pospuesto su viaje y ha estado más cerca de mí. No se despega de mí ni por un segundo, siempre esta buscando la manera de hacerme sonreír, y aunque a veces no lo logra, su esfuerzo me llena el alma de alegría. Una alegría muy latente.

Estamos sentados en un hermoso campo de flores, esta lleno de barbaridades de colores y tipos. Desde tulipanes hasta margaritas, colores llamativos, olores penetrantes y ricos. Vemos el encanto del atardecer, el cielo esta azul con pequeñas nubes y toques rosas en el cielo, Dios, es hermoso. Tenemos al mejor pintor, Dios.

Chandler toma mi mano y la besa con suavidad, me sonrojo en segundos.

-Eres tan hermosa que es injusto verte sufrir -murmura.

Oh mi Dios...

Este tipo de personas no se deben escapar de nuestro mundo. Permanecen junto a ti cuando más necesitas un abrazo, te reconfortan, te sacan sonrisas, te sosiegan y te ayudan a mantenerte a flote ante los problemas. Así es Chandler, hace bonito mi mundo, con él mi relación a sido leal y sólida.

Él jamás me ha juzgado, al contrario siempre está allí abrazandome y susurrando: todo estará bien. Aunque quizás no lo vaya a estar.

La noche comienza a caer poco a poco, y en minutos el cielo esta totalmente oscuro y parpadean grandes luces... las lindas estrellas. Siempre deseé estar con Jason así, disfrutar del silencio de los momentos, el silencio de ver un atardecer, de ver las flores... Pero no fue así, él era todo lo contrario. A él nunca le gusto el silencio y mucho menos disfrutar de él.



Narra Chandler.

La observo mientras trato de discernir lo que piensa, aunque no es muy difícil: Jason. Cuanto daría por ser el dueño de sus pensamientos, de sus labios de todo, de todo.

Ella es hermosa, y no como esas chicas de revistas con belleza solo superficial, ella es hermosa por su forma de ser, por como piensa. Es hermosa por esa chispa que tiene cuando habla de aquello que ama -aunque ahora no está-

Me duele escucharla decir: ¿Por qué la vida es tan cruel conmigo? Y solo puedo abrazarla y consolarla. Lo que no sabe es como me destruye al decir eso. Quisiera correr y curar su alma con besos y silencios... Pero no puedo. Me toca estar ahí como un donante de abrazos y consejos.

Estos últimos meses la vida se le ha venido cuesta abajo emocionalmente, y lo peor es que la afecta por completo. Ella se deja sumergir en los sentimientos dolorosos, deja que ellos la hunda poco a poco y solo deja una mano arriba para buscar rescate. Quizas yo sea su rescate, bueno esos son los amigos.

Es tan injusto ver como sufre, desearía arrancarle del pecho ese dolor, y llenar su corazón de alegría, completa felicidad. Si tan solo...

-Chandler -murmura.
-¿Si? -pregunto.
Es que provoca por completo que me desconcentre.
-No te irás nunca de Florida ¿verdad? -pregunta y me ve con desdén.
Oh, Dios no...
Guardo silencio. Es que no puedo mentirle, pero no quiero decirle la verdad.
-No te preocupes por eso aún -respondo.

Por nada del mundo detengas tu viaje, es tiempo que te ames como siempre lo mereces, amor. Retumba en mi cabeza lo que me dijo mi mamá hace  un mes. Quizás tenga razón, quizás deba alejarme de aquello que nunca será mío, aquello que nunca me pertenecerá. Este amor es de aquellos que por más que desees, anheles, ansies que suceda, no pasará, quedará como un amor más. Pero este no es un amor más, es un amor puro y sincero, es aquel amor que no había sentido con nadie, me hizo transformarme. Pero, el amor no es recíproco.

-Gracias por tanto, Chandler. Gracias por estar ahí para mí, eres lo mejor de mi vida. Te adoro.

Se lanza sobre mi cuerpo y abraza con sus delgados brazos mi cuello, su respiración golpea con delicadeza mi cuello, y su olor penetra por mis fosas nasales y las invaden por completo. Cierro mis ojos y la abrazo con fuerza.

-Esto no es una despedida, ¿verdad? -pregunta pegada a mi cuerpo.
-No, no -digo de inmediato.
-Siempre serás mi mejor amigo, el mejor en todo el mundo -dice con un tono de voz de niña pequeña.
-Auch -exclamo.
Ella suelta un risa y se separa de mi cuerpo.

La observo como siempre me ha gustado hacerlo. Ella ladea su cabeza y me regala una hermosa sonrisa y... Sus labios están sobre los míos. ¿Qué? ¡¿Qué?! Acompaño a sus labios en el recorrido, sus brazos rodean mi cuello, mis manos toman su pequeña cintura. De nuevo ¿Qué? Oh, mi Dios, muero. Es tan perfecto. Es algo que siempre esperé, siempre esperé que ella tuviese la iniciativa de besarme, ¿Es verdad? Me abofeteo mentalmente y abro mis ojos y la veo allí, besándome, besándonos. Cierro mis ojos y cuando voy de nuevo a disfrutar de sus labios ella se separa.

-No lo hagas -musito.
-Esto no...
Tomo su rostro con mis manos y ahora yo llevo el control. Junto nuestros labios en una sola armonía, es un solo paso. Nuestras narices chocan unas cuantas veces, la respiración comienza a ser irregular.

Y sí, paso lo que siempre quise.



Espero les haya gustado 💕
¿Alguna teoría de porqué _________ beso a Chandler, así, inesperadamente?



"Mi Mejor Amigo Es Chandler Riggs"  (Chandler Y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora