Capitulo II
1ra. Ley de Newton: Si no se ejerce una fuerza para cambiar el curso de un objeto, éste continúa en la misma dirección que llevaba. Igualmente, un objeto en reposo tiende a continuar en reposo.
Llegar a la escuela después de un día libre siempre es difícil. La flojera que habías dejado atrás en el fin de semana regresa como renovada y más fuerte que antes. Avente mi mochila en la primera butaca que vi y me desplome en una silla a tal punto que mi cabeza colgaba fuera de la paleta. Tal vez, sentía tanta flojera porque mi día libre había sido todo menos eso. Mi madre había llegado temprano, como usualmente lo hacía, pocos minutos antes de las siete para que mi hermano no se quedara solo, porque siendo entre semana yo tenía que ir a la escuela. Sin embargo al recibir la buena noticia de la suspensión de clases mi madre inmediatamente se deslindó de tales quehaceres argumentando que estaba cansada y tenía que entrar a trabajar en menos de 2 horas. Y ahí empezó mi tortuoso día. Haciéndome cargo de mi hermanito, arreglando la casa, haciendo de comer y terminando mis deberes escolares, en la noche, mamá y Rubén llegaron y me hicieron cocinarles otra cosa porque a Rubéncito no le gustaba lo que yo había cocinado en el día, después se habían encerrado en su cuarto, que por cierto está al lado del mío, para hacer sus cochinadas. Sobra decir que con una pared tan delgada no me hace falta pegar el oído para saber que rayos están haciendo, puedo escuchar todo claramente y sin esfuerzo. Razón por la cual ahora mismo estoy asqueada y desvelada. Sí. Fue un excelente día libre comparado con otros que he tenido.
Parece que te apalearon- dijo Samy sentándose a mi lado y acariciando mi cabeza
-para ya, que no soy un gato- quite su mano.
-y qué, ¿dónde fue la fiesta?- lo vi tomar asiento al lado mío
-en el cuarto de al lado- Sam tenía intenciones de preguntar más detalles pero la entrada de la profesora Pola se lo impidió.
Una vez terminada la clase fui a la dirección a preguntar por mis calificaciones, el lugar estaba casi vacío, maestros y alumnos estaban en clases, sabía que tenía unos minutos extra porque mi maestro de Quimica siempre llegaba tarde. Cuando vi la lista me sorprendí mucho al descubrir que era la única que tenía 10. Una estúpida sonrisa se formó en mi rostro. Iba saliendo de la dirección cuando vi a Vera entrando.
Lo vi mirar alrededor antes de hablar - hola Andy - me dio una sonrisa sencillamente encantadora.
-hola Ing. Vera - arrugo el ceño ante la mención de su apellido
-creí que habíamos dejado esos formulismos atrás- se recargo en el marco de la puerta anulando cualquier intento de huida de mi parte.
-creí que eso no sería prudente, después de todo usted es mi maestro y estamos en la escuela...-
-pero no estoy dándote clases ahora mismo- estaba jugando conmigo, así que mejor seguirle el juego.
-bien, entonces, adiós Sergio - pase por la puerta y él no se movió, ni siquiera se arrimó un centímetro para dejarme más espacio. Pude sentir al pasar el leve roce de su cuerpo apenas perceptible y sin embargo un ligero cosquilleo me acompaño en todo el trayecto hacia el salón.
Para cuando la hora del receso llego moría de hambre y sueño. Así que me precipite a la cafetería y me dispuse a devorar una rica hamburguesa con papas. En eso estaba cuando lo vi entrar en la cafetería. Miro alrededor como buscando algo. Trague mi bocado y por instinto baje la vista a mis papas. Que interesantes eran mis papas en ese momento
-ya viste a Vera - Esme codeo a lucero otra chica que estaba sentada con nosotras.
-está hecho un cuero el maldito - Lucero lo veía descaradamente.
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Atracción Física
RomanceLa fuerza del amor, la potencia del deseo, la inercia del miedo...Una chica complicada, un apuesto profesor y su extraña forma de enseñar sobre la materia.