Capítulo 1

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La semana más larga de mi vida comenzó con un día tedioso y enredado. La melodía de Working for the weekend interrumpió mi profundo sueño para marcar el comienzo de lo que sería el mejor día de mi corta existencia, o al menos eso creía. Desperté con la mente despejada como cualquier otra mañana común y corriente. La rutina de estirarse y sentarse al borde del colchón viendo hacia un punto indefinido era inexplicable, pero continuaba haciendo presencia.

Por fin había conseguido despertar a las 5:30 a.m. y tenía casi una hora para cambiarme. Encendí mi celular, consulté las noticias y novedades de mis amigos. Amaba ver los superhéroes en mi fondo de pantalla. Posters de Maroon 5, Katy Perry, y obviamente de mi amor platónico, Cara Delevingne, adornaban mi recamara.

Todo iba de maravilla, con la canción de fondo como si de una película se tratase, haciendo como que hablaba con las figuras gigantes de cartón. Sin embargo, el paraíso habría durado más de no ser por el detalle de los 30 minutos atrasados en el reloj. Casi corriendo brinqué al baño buscando ganar algo de tiempo, tomé mi cepillo y me lavé los dientes. Por si fuera poco, tardé más de 15 minutos en alcanzar cada espacio entre cada cable de cada liga de los "brackets".

Inserté en mi mente la idea de iniciar un nuevo día de clases. Me propuse tomar todo con calma a pesar de las adversidades que se presentaran. Hice caso omiso a la prisa que llevaba y tomé una ducha lenta. Me sentía muy relajado pero nervioso simultáneamente. Lo creía imposible pero me encanta romper la estadística.

Eran las últimas 8 horas de clases, y lidiar con eso no es tarea sencilla. Los cursos habían cerrado y solo faltaba presentarse para recoger las cosas de los lockers y escuchar el sermón de despedida de los maestros, al igual que oír a los "tortolos" despedirse y ver cómo se regalan obsequios mutuamente. Es diversión para muchos y aburrición para otros. Para algunos, sólo es un día más.

Me ausenté parte de la semana debido a que eran días de exámenes. No presenté ninguno porque a) no los necesitaba porque b) mis calificaciones eran "buenas" y c) no soy un presumido; que por una parte es bueno. Pude descansar en mi casa durante 4 largos días. Pero por otra, perdí tiempo y estoy desinformado de los últimos acontecimientos. No sé quiénes ya fueron invitadas al baile o si aún queda alguien disponible.

Cuando me preparaba me atacaban la mente un montón de pensamientos que, a la vez que me tranquilizaban, me sentía hacían sentir inquieto:

— ¿Que voy a hacer después de que termine la preparatoria? ¿Qué voy a hacer de mi vida?, ¿Qué me espera en la universidad?

Respiré hondo y pensé:

— ¿Qué te pasa? En 8 horas estarás terminando un ciclo de tu vida. Solo tengo una palabra que decir: DISFRUTALO. Vívelo al 1000% como si cada hora fuera un día y estos fueran los últimos. Arruina tu vida si quieres pero solo disfruta cada maldito momento. 8 horas es el tiempo suficiente para poder hacer y deshacer tu vida. ¿Qué tal si tomas una decisión que cambie tu vida o que el destino llame a tu puerta esta noche?

No sabía el poder que tendrían estas palabras y si realmente lo estaba diciendo en serio o solo era resultado de mi nerviosismo pre apocalíptico.

No sé si es bueno o malo cumplir años una semana después del fin de cursos. Quizás era bueno, quizás no. Tomando en cuenta que pasaría el día completo metido en mi cama, podría ver películas TODO el día, y me libraría de ver maestros y libros en el la mejor fecha del año. Aunque también resultaba desfavorable, porque a menos que hiciera una fiesta u organizara una salida no vería a mis amigos, y quedarse en casa es igual a quedarse a hacer los deberes. Aburrición total si no planeas tu día.

Cuando amanezca ahí estaréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora