90 escalones (AU) -Español [Clexa]

Capítulo 19

LEXA

Después de lo ocurrido con Clarke se había quedado como una gilipollas sin entender nada. Absolutamente nada. Sabía que lo que habían hecho no estaba bien, Clarke tenía novio, para su desgracia, y podía llegar a entender que la rubia se sintiese mal, pero tampoco estaba bien volver a dejarla cual monigote dando un portazo. El caso es que ni había intentando llamarla ni mucho menos ir a su casa. Ella no había hecho nada malo para que la actitud de Clarke cambiase así de un momento a otro, lo que pasó esa noche tenía que haberlo pensado en su momento.

-Está loca. Completamente loca. –Se decía mientras aparcaba la moto en la puerta del trabajo.

Observó que aún le daba tiempo a tomarse un café, así que lo aprovechó. Algo de cafeína no le vendría mal para empezar el día.

Cuando entró a la cafetería divisó rápidamente a Anya y Raven en una mesita, bastante cariñosas.

-Tú amiga está loca. –Dijo sentándose junto a la parejita y rompiendo su momento de manitas bajo la mesa.

-Buenos días a ti también. –Dijo Anya fulminándola con la mirada.

-¿Qué ha hecho ya? –Preguntó Raven.

-¿O qué has hecho tú más bien? –Preguntó ahora Anya.

-Qué no he hecho nada joder. –Se quejó Lexa. –Echamos un polvazo y se tiró todo el día en mi casa. Pero de un momento a otro se le fue la cabeza. Que había sido un error y que no se iba a repetir.

-No sé cómo defender ahí a mi amiga... A veces es muy contradictoria. Quizás la hayas asustado. –Decía Raven.

-Joder Raven. –Dijo Lexa mirándola. –No le he jurado amor eterno ni le he pedido nada. Sólo fue sexo. Y del bueno, debo decir.

-¿Te la has tirado? –Preguntó Anya rápidamente y bastante confundida mientras miraba a las dos.

-Oye. Que fue ella quién me provocó. –Dijo Lexa. –Y ahora no entiendo nada.

-¿Por qué no hablas con ella? –Preguntó Anya aún un poco sin dar crédito.

-¿Y por qué debería hacerlo? –Respondió Lexa. –No somos nada. Y ella fue la que se marchó de mi casa sin más. No soy ningún perro faldero.

-Yo hablaré con ella. –Dijo Raven llamando la atención de las dos.

-No es necesario. Si es lo que ella quiere... –Contestó Lexa. –Sólo hazme un favor. Pasa luego por mi casa para devolverte algo de ropa que se dejó.

CLARKE

Sabía que no había hecho bien desapareciendo así del piso de Lexa. Sin ninguna explicación, no tenía nada que reprocharle. Ella había sido la que propició el encuentro, fue la que la provoco en todo momento. Y aunque realmente lo disfrutó por completo... su parte razonable le decía que aquello no estaba bien y que debía cortar rápidamente ya que había metido la pata hasta el fondo. No debió dejarse llevar, debió controlarse, pero le fue absolutamente imposible. El deseo por tener a Lexa, por sentirle y que la hiciese suya pudo con su raciocinio por completo.

Estaba hecha un ovillito con una pequeña manta tirada en el sofá cuando el timbre sonó. Casi había pasado todas las horas de vuelta a casa en esa posición, dándole mil vueltas a lo ocurrido. Intentando canalizar sus pensamientos. Intentando convencerse de que había hecho lo mejor, pero los recuerdos de lo bien que Lexa la había tratado esas horas volvían a su mente una y otra vez. Siempre la recordaba con una sonrisa en los labios, siempre con palabras amables, y hacia tanto tiempo que no se sentía tan bien...Obvio que luego su realidad chocaba fuertemente contra esos recuerdos.