LEXA
Había podido hacer los cambios necesarios en el trabajo para tener el fin de semana de su cumpleaños libre e irse junto a Clarke al destino que rápidamente tuvo en mente. No era muy lejos ni tampoco algo que destacar. Era algo simple y sencillo. Un pequeño rinconcito que había conocido hace unos años junto a Gustus y la mujer de éste, desde un primer momento quedó maravillada por las grandes vistas, una mezcla entre bosque y mar. Recordaba como de pequeña visitaba el lugar junto a la pareja, haciendo acampadas y realizando alguna jornada de pesca en pleno contacto con la naturaleza. Un lugar precioso en el que descansar y poder desconectar por completo, pensando en que quizás era lo que Clarke necesitaba. Desconectar aunque solo fuesen unos días de la pesadez de vida que llevaba encima. Además necesitaba mostrarle a Clarke que ella seguía ahí, que seguiría intentándolo aunque Clarke no tuviese idea de sus ya más que claras intenciones en el asunto.
Estaba sentada en un pequeño banco junto a las vías del tren. No paraba de comprobar el gran reloj de la estación, aún sabiendo que lógicamente le avisarían por megafonía de la salida de su viaje. Más que nada se dedicaba a comprobar su móvil, a la espera de algún mensaje o llamada de Clarke informándole de la negativa de ir. Pero ni en los días de espera, ni justo esa misma mañana había recibido nada. Por lo que se permitió el lujo de crearse altas expectativas en pasar el fin de semana con ella. En poder compartir de nuevo tantas horas a su lado, de poder escuchar su risa y de poder observar sus ojos mirándola. Dios como echaba de menos pasar un tiempo con Clarke.
Media hora antes de la salida del tren empezó a ponerse nerviosa sin remedio. El hecho de que Clarke no apareciese se hacía cada vez más evidente cuando los minutos pasaban, y mientras ella no daba señales de vida, la gente que iba a coger el mismo tren se amontonaba cerca de las puertas. Esa maldita costumbre que tenía la gente de aglomerarse junto a las puertas del tren le hacía sentirse inquieta.
Suspiró frustrada cuando el último pasajero que estaba esperando junto a las vías entró en el tren. Agarró su pequeña maleta y salió de la estación rompiendo con el fantástico fin de semana que había imaginado en su propia mente durante horas y horas. Un fin de semana que había imaginado envuelto en risas, caricias y algún que otro beso robado.
Su idea era refugiarse en casa durante ese fin de semana, poco le importaba su cumpleaños, además ya había informado a sus amigos y compañeros de que estaría fuera esos días. Así que sí, lo pasó completamente en casa, viendo alguna película, serie, con un buen libro...pero en todo momento pensando en Clarke.
Sin darse cuenta esa chica había hecho mella en ella, pero una mella increíble. Algo que ella nunca pensó ni mucho menos planeado. No era su intención, no lo había buscado ni pretendido. Se había prometido hace años no pasar por algo así.
Ese lunes entró directa al taller, sin pasarse por la cafetería a desayunar. No le apetecía hablar con nadie ni interactuar de ninguna de las formas con ningún ser viviente, pero el trabajo era el trabajo. Gustus la mataría, bastantes favores le había pedido ya en tan poco tiempo.
-Buenos días. Dame dos besos cumpleañera. –Sonrió Anya acercándose. -¿Qué tal el fin de semana? –Dijo acariciando su brazo con cariño.
-Uno, mi cumpleaños fue el sábado. –Decía Lexa recogiéndose el pelo en una coleta alta. –Y dos, de puta madre. –Dijo refiriéndose al fin de semana con completa ironía.
-Ya lo sé estúpida. –Contestó Anya refiriéndose a su cumpleaños. –Pero ya que no he podido verte... ¿Qué pasó? –Preguntó interesada.
-No pasó. –Dijo Lexa dirigiéndose hacia una pequeña mesa para observar unos papeles. –No apareció Anya. –Soltó al ver la cara interrogante de su amiga. –Ni si quiera un mensaje. Nada. Quién me mandaría a mí.... –Dijo llevándose la mano a la frente.
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90 escalones (AU) -Español [Clexa]
Hayran Kurgu¿Qué pasaría si alguien entrase en tu vida descolocando todos y cada uno de sus cimientos? ¿Qué pasaría si ese alguien lograra hacerte debatir aquello que considerabas correcto? ¿Qué pasaría si te vieras entre dos realidades?