Irreconocible

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Examen, extra, Guadalupe, cañas, Pan hervido, cuento de enigma, ¡SEMIÓTICA! pero, pero ¡Yo soy le Pire Noël! No puedo, no sé ustedes, pero yo si me desvele, (por otra razón, pero si uno ya está despierto debe aprovechar, ¿no?) toda mi familia se desvelo conmigo; fue algo muy lindo porque nadie en mi casa habla francés y aun así quisieron hacerme compañía a mí y a Vero ¿valió la pena? sí, la verdad, sí, aunque hubieran sido los tres minutos de los webisodios, me hubiera encantado. Sobre todo la canción de Chat y Plagg. No revelaron lo que todos los fans querían, cierto, pero me entere de lo que yo quería, sip, el regalo. A mí me enseñaron que lo que te regalan no se debe regalar, pero si revisamos lo que Adrien dice, bueno, él piensa que si Marinette viera a Santa, ella se lo daría, eso me gusto; esa es la opinión que Adrien tiene de Mari, es una opinión favorable. Marinette es una persona que piensa en ayudar a los demás y quiere verlos felices. Déjenme decirles que eso es algo muy cercano al Adrinette, ¡VAMOS PARA 'LLA VERO! Espero en un futuro no muy lejano yo pueda ver mi Marichat en esplendor, por ahora, con esto estoy bien.

ESTOY EN EXAMENES FINALES, NO ME ACUERDO NI DE COMO ME LLAMO, MENOS DE EN QUE ME QUEDE EN LA HISTORIA. No soy una persona que se estrese, o al menos que demuestre que lo está (a excepción de un pequeño tic que tengo en el ojo derecho, pero nadie ve esas cosas). Mírenme ahora, debería estar estudiando para mi examen de mañana, en una materia en la que voy mal, pero no, noo, estoy aquí actualizando para ustedes (no es reclamo, al menos a ustedes no) ¡NO EXISTE UNA CARRERA FÁCIL! ¡No crean esas mentiras! Todas las carreras tienen lo suyo, lo fácil y lo difícil. Los que digan que tal carrera es fácil, es porque no la han estudiado, o son unos prodigios que todo lo que hacen les sale a la primera. NO SE METAN A ALGO QUE NO LES GUSTA ¡¡JAMÁS!! O sufrirán mucho. Yo amo mi carrera, pero... mis conocidos siempre hacen "esa" cara cuando les digo qué estudio. Si uno no estudia una ingeniería, entonces, no está estudiando nada, odio esa opinión.

Olviden mis problemas; yo sé porque están aquí, quieren su dosis semanal de "Fuego y Agua". Lamento si me retrase, pero tenía que escribir un cuento policiaco para entregar hoy, y, y lo tengo que volver a hacer, así que mejor acabo esto pronto.

La brisa soplaba agitando su cabello, su sonrisa reflejaba su seguridad absoluta, sus ojos estaban fijos en su objetivo. A su lado giraban sin parar un yoyo rojo en cada mano, sus brazos estaban desnudos, tenía un pantalón ajustado. Estaba frente a un hombre grande con una armadura que corría hacia ella. En un sólo instante la joven de pelo negro lanzó el yoyo rojo hacía un árbol y se elevó al momento que el hombre estaba por atacarla. Sujetada de la rama del mismo árbol la chica hizo señas al mismo hombre para incitarlo a atacarla, causando que él le lanzara una llamarada. Ella no esperó a que el fuego la alcanzara para lanzar el yoyo a otro árbol y balancearse hasta llegar a la espalda del hombre y enlazar sus pies y sus manos con ambos yoyos -¡JA! ¡Yo gano! ¿Algunas palabras de suplica? ¿Una disculpa?- -¡QUIERO LA REVANCHA! ¡ESTABA DISTRAIDO!- -Ki, esta era la revancha- -¡17 de 30! ¡YO TE RETO, CHENG!- -Ki, hazte un favor y admite que soy mejor que tú por una buena vez, antes que te lastimes o algo parecido- -No, no, una chica no puede ser mejor que yo- -No soy una chica- -¿ah?- -No, yo soy, yo soy ¡EL EMPERADOR DRAGON! ¡ESTE ES SÓLO UN CUERPO MORTAL EN EL QUE ESTOY ATRAPADO!- grito la chica al momento que sacaba una máscara roja de dragón y se la ponía para perseguir riendo al hombre que la tomó entre sus brazos y la levantó al aire -¡No puede ser es el poderoso Emperador Dragón! Debo someterme a su gran poder, ¡jamás podré vencerlo!-

Las dos personas corrían de un lado a otro riendo, el hombre alto la tomaba entre sus brazos y la alzaba sin ningún problema, ella tampoco oponía resistencia. Él era más alto que ella, su piel era blanca y su cabello castaño peinado hacia arriba, sus brazos y sus piernas eran muy grandes, cada vez que la sujetaba, Dalí_en sentía que iba a romperla. Ella reía a carcajadas, nunca había reído así; le hacía chistes al hombre sobre su velocidad y se burlaba de las veces que había perdido. Sin ninguna vergüenza se montaba sobre los hombros del hombre y le pedía que lo cargara ¿Desde cuándo sentía tanta confianza con las personas? Ella que se disculpaba de todo, que agachaba la mirada para pedir un favor, que bajaba la voz cuando le hablaban, que se cubría tímidamente el rostro cuando sentía vergüenza y que desviaba la mirada cuando su rostro se enrojecía ¿Dónde estaba esa Cheng? ¿Qué habían hecho con ella? ¿Quién era esa chica que removía los cabellos de ese hombre desconocido? ¿Por qué le tenía tanta confianza? -Tenemos que volver, dejémoslo por ahora- -Puede que esta vez me hayas ganado, pero no habrá una próxima- -Vamos, Ki, esa, ni tú te la crees, llevas diciendo eso desde, ¿desde cuándo?- -No descansaré, no lo haré hasta que te venza- -Me haré vieja antes que eso pase- La pelinegra miraba hacía bajo para platicar con el hombre que la cargaba, cuando levantó la vista logró verlo -¿Dalí_en?-

Fuego y AguaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora