⚡One Shots Harry Potter⚡

Infiel (James Potter)

James te espera en casa todos los días, él llega siempre algunas horas antes que tú, hoy hacéis un año de casados, llegas a casa antes, incluso antes de que llegue James.

-Tía le va a encantar, ojala Edgar fuera algo mas romántico y me preparase algo así-dice tu amiga por el otro lado del teléfono.

-Tía es que ahora todo el mundo tiene niños, yo también quiero-dijiste tu mientras empezabas a encender las velas que habías colocado por la casa.

-Ya tengo ganas de ver una mini T/N o un mini James-chilla tu amiga por el móvil.

-Parece que estas más ilusionada que yo-sueltas una sonora carcajada y oyes la puerta abrirse, James ya debe de estar allí-Adiós, James ya llego-te despediste, colgaste el teléfono.

Te acercaste hacia el recibidor, donde James debía de estar dejando su abrigo, pero allí no solo estaba James, también había una mujer, y no estaban hablando precisamente, las manos de James se encontraban por debajo de la cadera de la chica, se estaban besando, y James no parecía querer apartarse.

Esperaste queriendo ver como James apartaba a la chica o decía tu nombre, o simplemente se arrepentía, pero eso nunca paso, al contrario, James pego a la chica contra la pared y empezaba a levantar su blusa, te alejaste, con un par de hechizos deshiciste toda la cena y decoración que habías preparado, te apareciste en casa de tu amiga, con la que habías hablado por teléfono hacia menos de diez minutos, una vez allí te desplomaste, comenzaste a llorar, casi no podías respirar.

James te había mentido, estaba con otra, apenas llevabais un año de casados, tan rápido se había olvidado de ti.

Con las pocas fuerzas que te quedaban llamaste a la puerta y le contaste a tu amiga todo lo sucedido, no paraste de llorar en ningún momento, tu amiga hacia todo lo que podía, pero tu estabas rota, cada vez mas preguntas rondaban tu mente: ¿Cuánto tiempo llevaría engañándote? ¿Habría mas mujeres?¿Estaría arrepentido? ¿Qué ibas a hacer? ¿Debías volver a casa como si nada? ¿Deberías contarle lo que sabes? ¿Debías dejarle? .....

-Tranquila, estoy aquí, yo no te mentiré nunca-decía tu amiga mientras acariciaba tu cabeza.

-Yo quería tener un bebé con él, imagínate que hubiese estado embarazada-decías en medio de sollozos- son las 9, a esta hora suelo salir de trabajar, ¿crees que debería volver?, es que no quiero verle pero...- continuaste.

-Tranquila, mañana le ponemos una demanda de divorcio, ese gilipollas no volverá a hacerte daño-dijo tu amiga mientras te abrazaba aun mas fuerte de lo que lo estaba haciendo.

-Cari......¡¡T/N!!-pregunto Edgar, el marido de tu amiga cuando se apareció en medio del salón.

-Ha sido James, T/N le ha pillado siéndole infiel-dijo tu amiga mientras se levantaba a besar a su pareja.

-Oh, pobrecita, el cabronazo de James no te merece, deberíamos hacerle sufrir......-dijo Edgar mientras se rascaba la cabeza.

-Oh no, ahí va una idea descabellada-dijo tu amiga mientras se volvía a sentar a tu lado.

-Vuelve a casa, mañana cuando James se haya ido llamamos, aremos que se arrepiente de todo el daño que te esta haciendo-dijo Edgar muy convencido.

Tu solo asentiste, tu amiga te acompaño al baño y con un poco de maquillaje todos los signos de que habías estado llorando desaparecieron.

Te apareciste en tu casa, pusiste una cara de cansancio como si llevases trabajando años.

-Que tarde has llegado, me tenias asustado-dijo James mientras corría a abrazarte.

-Si, estoy cansada, me voy a la cama-dijiste como escusa para no partirle la cara.

Subiste las escaleras de vuestra casa y cuando te tumbaste en la cama te diste cuenta de que las sabanas no eran las mismas que la mañana anterior, seguro había quedado perfume o algo de la otra chica y las había tenido que cambiar.

Desviaste tus pensamientos hacia otra cosa puesto que sino comenzarías a llorar, después de un rato finalmente caíste en los brazos de Morfeo.

-Cariño, me voy a trabajar, ya es hora de que salgas de la cama-te despertó James como todos los días.

-Vale-dijiste mientras dabas una vuelta en la cama y oías como James salía de la casa.

Corriste y llamaste a tu amiga, ambos aparecieron por red flu en tu casa en menos de lo que se dice squib.

-Bueno, he traído la decoración, manos a la obra- dijo Edgar con mas de seis bolsas en las manos.

Durante todo el día os dedicasteis a colgar cigüeñas, carteles, cunas... por toda la casa, también preparasteis una supercena, media hora antes de que James llegara Edgar te hizo tomar una poción que te hacia dormir.

James entro en su casa y como todos los días tenia pensado echar un polvo antes de que llegaras, pero no contaba con que se encontraría a su mujer dormida en el sofá y un montón de decoración que le decía que ibais a ser padres, rápidamente James le dijo a su polvo que se fuera y te despertó, mientras empezaba a llorar.

-Hey amor-te decía mientras empezabas a desperezarte.

-Que, ¿ya te has cansado de la otra?-dijiste mientras te incorporabas.

La cara de James se volvió pálida, no dejaban de salir lágrimas de sus ojos.

-Lo sabes-agacho la cabeza y comenzó a sollozar mas fuerte.

-¿Y todo esto?-pregunto James señalando toda la decoración.

-Que tengo un regalo para ti-dijiste intentando aguantar las lágrimas, ya habías llorado suficiente por el.

-¿Estas?-pregunto levantando la cabeza y tocando tu barriga.

-Oh no, es esto-sacaste unos papeles de detrás de ti y se los entregaste.

-¿Di-divorcio?-pregunto James mientras las lágrimas de sus ojos se volvían mas abundantes.

-Si, yo no puedo estar con alguien que no me ama-dijiste mientras empezabas a dejar que las lágrimas bañaran tus mejillas.

-Pero yo te amo-dijo mientras dejaba la hoja en la mesita del te y te cogía de las manos.

-¿Y por que estabas con ella?-preguntaste medio gritando.

-Pues, no sé, pero sé que te quiero-dijo a lo que tu negaste con la cabeza.

-Adiós James, dormiré en la habitación de invitados-dijiste mientras te levantabas y te ibas hacia la habitación.