11:30 PM
Estaba durmiendo tan plácidamente cuando en plena pesadilla, me di la vuelta en la cama y me caí al suelo. Tan pronto como me caí abrí los ojos y miré a mi alrededor, soltando un suspiro de alivio. Me levanté y volví a meter en la cama mirando hacia el techo pensando en que hora me había acostado ayer para dormir hasta tan tarde. Poco a poco recordé el día anterior y comencé a pensar en Jeremy. Después del beso de ayer se fue a su casa sin decir nada, sin ni si quiera un ''buenas noches'' ¿Qué le pasaba? Me di la vuelta en la cama y cogí el móvil que se encontraba en la mesita de noche, lo desbloquée, entré a la agenda de contactos y busqué la J, después me lo llevé a la oreja.
-Hola.- Contestó Jeremy al otro lado.
-Hola..- Murmuré.- Jeremy, esto yo.. quería pedirte perdón por lo del otro día, no era mi intención mentirte, pero estaba tan confuso..- Me encogí de hombros siendo consciente de que el no me vería y me rasqué la pierna con la mano libre que no sostenía el teléfono.
-Prefiero que me lo digas a la cara.- Contestó Jeremy.
-Vale, ahora me paso por tu casa, ¿estás?.- Pregunté levantándome de la cama, yendo hacia el baño.
-Sí. Hasta ahora entonces.- Colgó.
Dejé el móvil sobre el lavamanos, me desvestí y me di una ducha rápida. Salí, me sequé y me vestí con lo primero que encontré; pitillos negros, camiseta gris y zapatos negros. Siempre solía vestir de 3 colores: blanco, negro o gris. Siempre me han gustado, mucha gente piensa que soy muy serio por vestir de colores poco vivos y alegres pero de seriedad tengo lo mismo que un cómico ; nada. Volví al baño a por el móvil y lo cogí, guardándolo en el bolsillo de atrás del pantalón. Bajé al piso de abajo y salí por la puerta con prisa, yendo hasta la casa de Jeremy. Timbré y a los pocos segundos me abrió en chandal, mirándome de arriba abajo.
-Hola..- Susurré, mirándole con una gran sonrisa.
-Hola.- Respondió.
-Perdón Jeremy.. no era mi intención mentirte, en serio..- Agaché la cabeza un poco, recorriendo su cuerpo hacia abajo con mi mirada.
-¿De verdad?.- Jeremy agarró con su mano mi barbilla y me levantó la cabeza, haciéndome mirarle a los ojos.
-Sí.- Mantuve la cabeza alta y le miré a los ojos, viendo como poco a poco iba sonriendo hasta abrazarme con fuerza.
-Vale peque, pero por favor no me mientas más..- Apoyó su barbilla sobre mi cabeza y hundí mi cara en su pecho, cerrando los ojos con fuerza. Aquello me había terminado por romper, no quería mentirle más, pero tampoco quería que se enfadara.. Y quizás contarle que me llevo bien con Cameron era un poco egoísta por que sí, aliviaría mi conciencia pero arruinaría la suya. No sabía que hacer, estaba hecho un completo lío. Me abracé más fuerte a él y acaricié con mis labios su pecho, cobijándome en él. Poco después me invitó a entrar a su casa y subimos a su habitación, donde nos fumamos un par de porros y estuvimos un buen rato abrazándonos y besándonos. Sylvia me invitó a comer así que me quedé a comer con la agradable familia de mi novio.
3:00 PM
Como quedaban a penas 4 días para el concurso, nada más acabar de comer Jeremy me llevó a mi casa para coger las cosas e ir al polideportivo para encontrarme con Melissa y los demás mientras el se iba a pasar la tarde con Ryan a jugar al baloncesto o sabe dios lo qué. Queríamos ganar este concurso fuera como fuera, sería una gran oportunidad para promocionar a Melissa y convertirse en la gran bailarina que quería ser ; aparte de una recompensa enorme por todo el esfuerzo que estábamos haciendo.
3:30 PM
Jeremy me dejó en la puerta del polideportivo, dónde se encontró con Ryan y se fueron juntos, despidiéndose de nosotros con un pequeño abrazo y un beso. Las dos parejas que iban juntas a casi todos lados, era perfecto ; mi relación con Ryan había mejorado, ya no me celaba de él, entendía perfectamente que eran como hermanos y que ninguno tenía intención de nada con el otro y Melissa se había convertido en mi mayor apoyo aparte de Jeremy, aunque a veces él se celara un poco de ella, pero supongo que con el tiempo eso se pasa. Entramos juntos al polideportivo y fuimos hasta el aula que teníamos asignada. Como había confianza con Melissa y no había nadie más, me cambié allí ; me daba pereza ir a los vestuarios y como no me había dado casi tiempo de cambiarme en casa pues tenía que hacerlo. Una vez me puse mi querido chandal negro y la camiseta con motivos extraños / árabes, Melissa puso la música y comenzó a hacer sus pasos mientras yo hacía los míos. Eran algo difíciles sin pareja, pero lo podía llevar. Posteriormente llegó Cameron, quien se unió a nuestros ensayos pre-ensayo. De pronto el reproductor de CD's dejó de funcionar.
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''They don't know about us''
Teen Fiction''Era un camino de rosas, pero no todas estaban libres de espinas.''