Enséñame a amar (SS#1) (VR#3)

Capítulo 53: Verano lluvioso

BEN

Estoy estacionado fuera de la casa de Kate, mamá me prestó el auto por hoy luego de que almorzara con ella, lo que agradezco mucho ya que hace unas horas que no ha dejado de llover y sabe muy bien que este tipo de clima no me agrada para nada. La rubia me llamó un poco antes de la hora de almuerzo para decirme que hoy no estaba para salir a trotar ya que se había hecho algunas heridas en los pies —no me dijo cómo— y además, dudaba que yo quisiera salir a correr dada las condiciones climáticas.

—Ambos salimos ganando con esto —dijo desde el otro lado de la linea—. Yo descanso mis pies y tú no quedas empapado ni te enfermas como la otra vez, a cambio de eso podemos ir a comer y dar un paseo. Deja que te muestre ahora yo mi lugar favorito en la ciudad.

Y por supuesto que no pude decir que no, así que ahora espero con ansias a que abra la puerta del auto y me dé un beso. Mi turno terminó media hora antes y la llamé para avisarle, me dijo que si quería podía ir enseguida y que ella estaría lista. Le envío un mensaje y no pasa ni un minuto cuando llega hasta mí y justo como esperaba, me planta un beso en los labios.

—Te presento los veranos en el sur —dice mientras apunta hacia fuera en donde sigue lloviendo con fuerza.

—Creo que no podría soportar los inviernos aquí.

—¿Listo para conocer mi lugar favorito? —pregunta y distingo en sus ojos un brillo especial—. Tal vez no sea tan bonito como el tuyo y la lluvia lo arruine todo para ti pero es especial para mí.

—Todo lo que sea especial para ti será importante para mí, eso tenlo por seguro. ¿A dónde debo conducir entonces?

—En la siguiente cuadra dobla a la derecha y toma la avenida principal que lleva a la autopista, es un poco lejos. Nos tomará más o menos media hora.

Hago partir el auto y sigo sus instrucciones, le paso mi teléfono para que conecte la música y elige mi canción favorita, no sé si al azar o porque sabe que me encanta o porque también le gusta, me da igual la razón solo me importa que la llevo a mi lado y me enseñará el lugar más importante que tiene. Ni siquiera me importa la lluvia, supongo que eso lo hará todo más especial ya que esto es parte de su vida y ya con eso, me encanta.

Tal como dijo, el viaje dura media hora y ella pide que me desvíe de la autopista en una pequeña entrada de camino de tierra. Nunca había andado por estos lados, a la ciudad de Kate si vine un par de veces cuando era más pequeño a acompañar a mi madre a su academia pero nunca llegué a ver sus alrededores y lo lleno de vegetación que estaba. Hay árboles por todos lados, prados llenos de flores de colores, algo que jamás llegaré a ver en mi antigua ciudad ya que por el calor todo es más seco, solo nos tenemos que conformar con el bosque pero eso no es nada comparado con lo que estoy viendo.

Llegamos hasta una pequeña laguna y ella me pide que detenga el auto, nos quedamos en silencio mirando el color azul oscuro del agua. La miro de reojo y noto que está sonriendo, está feliz de estar aquí y quiero creer que parte de esa felicidad se debe a que la estoy acompañando. ¿Es mucho pedir eso?

—Es una lástima que llueva de esta forma, nos perderemos lo mejor —comenta con la vista perdida en el final de la laguna.

—¿Qué es lo mejor?

—Mi verdadero lugar, uno que quiero creer que nadie más que yo ni Zack conoce.

—Llévame a ese lugar —pido y ella clava su vista en mí, emocionada.

—Quedaremos empapados, no tienes que hacer esto por mí. Sé que no eres para nada fanático de este clima.

—Creí que estaba claro que haría cualquier cosa por ti.