Quédate por siempre waxo

Acepto

-¡LLEGÓ LA COJA! -gritó Min Yoongi en cuanto lo vió bajarse del auto con dificultad.

¿Cuánto había pasado ya? ¿Más de un mes? Casi dos meses que no veía a sus amigos, ni tiempo tenía con todas las curaciones y terapias a las cuales debía acudir. No dejaron de hablar en ningún momento pero el tiempo para verse fue escaso.

La recuperación de Jungkook iba mejorando cada vez más. La puñalada no fue tan superficial como la primera vez, esta vez había sido muy profunda lo cual causó una gran pérdida de sangre. Recibió donación de sangre por parte de Ramón, Hoseok y Jimin, con ellos tres fue suficiente.

Ahora se encontraba mucho mejor. Le costaba un poco caminar por el parche que tenía al costado que fue apuñalado, pero eso estaba demás. Jungkook está sano, está vivo.

-Quizá no debí haber venido... -susurró Jungkook mientras se sostenía del brazo del chico.

-¿Por qué dices eso? –preguntó.

-Jimin está ahí.

-¿Ese es el chico del cual me hablaste, verdad? –asintió- oh chucha...

Siguieron caminando acercándose hacia los 4 chicos que esperaban ver a su amigo.

-¿Qué piensas hacer? –dijo el chico.

-hablar con él... no lo sé –mordió su labio- ¿al menos me veo bien?

-todos se ven bien cuando asisten a una boda –le sonrió.

{Jungkook}

El Juanito me dejó al lado de los chiquillos y se fue rajado al auto para contestar a otra llamada de uber. Juanito culiao buena onda. Se mamó toda mi historia desde mi casa hasta Chicureo. Le conté mi viaje de Corea a Chile, a los wachos que conocí, cuando me apuñalaron y mi historia de amor gay con Jimin.

Hace mucho tiempo que no veía a los cabros, los extrañaba mucho. Me hacían falta aunque siguiéramos hablando por WhatsApp, pero no es lo mismo que en persona.

Todos se acercaron a saludarme. Todos excepto Jimin que se quedó sentado observando a lo lejos. ¿Tan malo fue lo que hice para que ahora me ignore de esa manera? ¿Por qué eres así?

-Weón, ¿cómo has estado? –Dijo Hoseok mientras me abrazaba- ¿Cuánto tiempo ha pasado ya? Creciste kukito.

-Solo fueron dos meses más o menos –sonreí- Los extrañé po.

-Nosotros igual te extrañamos –Taehyung apretó mis mejillas- lindo mi niño.

-¿todavía te duele el tajo? –preguntó Yoongi.

-¿Ya no teni raspadito de queque?

-estoy terrible parchado weón, me pusieron como una toalla higiénica en la wea.

-uuh, aers tu vagina sangrante -Tae de inmediato intentó subirme la camisa.

-está parchado ¿no lo escuchaste? -la voz de Jimin se hizo presente.

Hace dos semanas que no sabía nada de él. Veía todos los mensajes del grupo, pero ni hablaba. Mis mensajes y llamadas no las atendía, no sé cómo es que se pudo molestar por algo así.

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Mi mamá me sacó la chucha cuando le dije. Me hizo toda una charla que si estaba seguro de hacerlo, que ella encontraba que las cosas iban muy rápido, que con suerte sabía limpiarme el poto y ya estaba haciendo cosas de grandes.

-¡Primero tu papá y ahora tú! –Exclamó- Jungkook, mi amor, aún eres un bebé.

-Ya tengo 18 años –gruñí.