MY LITTLE REBEL (Editando)

Capitulo 89:

Rose finalmente llego de su eterno viaje de un año con sus padres. Enserio se me hizo eterno. Ella ya sabía de mi enfermedad por supuesto, ya que hablábamos por skype muchas veces y aun que siempre me repetía que quería volver para estar a mi lado, yo siempre le repetía que estaba bien, y que ella siga con sus estudios. Al final, termino su año en Canadá y terminó su semestre de gastronomía. Al fin, pudo venir de vuelta ya para quedarse para siempre. Llego justo cuando casi cerraba mis ojos para dormirme, cuando Harry se fue a ver la decoración del matrimonio. A punto de cerrar mis ojos alguien abrió la puerta y eran ella vestida toda con ropa de nieve ya que Canada estaba helado y Niall a su lado sabiendo la sorpresa desde un comienzo. Nos abrazamos por horas y le termine de contar los detalles que no le había terminado de contar por skype. Despues de horas de conversación los 4, y de risas infinitas, se marcharon a las 6:30 de la mañana cuando enserio necesitábamos descansar. Se fue con Niall, a su casa, supe que fueron a hacer ya que Niall estaba desperado por irse a casa desde las 4, querían dormir juntos. No los culpo, es más, estoy feliz de ellos si puedan hacerlo. Y después de tanto tiempo de no verse… 

Me levante al “día siguiente” a las 2 de la tarde. Casi muero de un infarto al ver la hora cuando una enfermera me levanto. 

Tu: ¿Las dos?! –exclame sentándome en la cama 

Harry: Le dije que te dejaran dormir, pero dijeron que ya era hora de tus pastillas. –dijo lavándose los dientes desde el baño 

Tu: agh, demenlas. –estire la mano hacia la enfermera

Ella me entrego 5 pastillas cada una de diferente color y cada una mas amarga y más grande y también me entrego un enorme vaso de jugo de naranja. 

-Gracias –dije después de tomarme la última pastilla y dejar el vaso sobre la mesita de noche

La enfermera me tomo el pulso y luego se fue. 

Harry: Hola princesa –se acerco a mí y beso mi cachete derecho 

Tu: Hola mi amor. –sonreí al sentir sus labios sobre mi cachete 

Harry: Llego el gran día. 

Tu: Al fin. –sonreí ligeramente 

En ese momento la puerta chilló y entro Rose agarrada de la mano con Niall. 

Rose: Chicos, afuera. Chicas, spa y ¡a ponernos lindas! Sobre todo tú ________, ¡Hoy es tú día linda!

Reí al ver la emoción en sus ojos brillantes. 

Harry beso por última vez mi frente y salió de la habitación junto a Niall. 

Rose: awww son tan tiernos –junto las manos sonriendo y mordiendo sus labios inferiores- pero ahora. Es tiempo de que nos hagan la manicura, el cabello, tal vez un buen bronceado, o ¡No! ¡Tengo una magnifica idea! Nos relajaremos con una masajista y- 

Tu: ¡Rose! –reí- solo llama a una señora y empecemos con algo al menos. –me saque las sabanas de encima 

Rose: ¡Genial! –gritó emocionada sacando su móvil de su bolsillo

Rose y yo nos hicimos la manicura, pedicura, nos masajearon la espalda, el cuello y los pies. Después de relajarnos y sentirnos listas con piel suave y limpia, nos peinaron. Rose hizo unas trenzas en cabello y una rosca que la envolvió con las trenzas. Su cabello rubio termino todo cogido y hermoso. Yo opte por algo más sencillo. Agarre una peluca rubia clara y ondulada. 

Por ahora, tenía un gorrito en la cabeza, jamás me quedaba completamente calva frente a alguien. Excepto cuando en las noches Harry dormía y todo estaba oscuro, que yo dormía sin gorrito o peluca ya que me molestaba. Sostuve la peluca que me pondria mas tarde para el matrimonio en mis manos y la mire por un momento. En eso mi madre abrió la puerta y deje la peluca del matrimonio en el tocador alado mio. Mi madre estaba hermosa, tenía un vestido largo azul oscuro. Su cabello estaba recogido y tenía unas perlas hermosas como aretes. Un collar plateado que resaltaba sus ojos azules. Su piel suave y clara estaba con una base caramelo suave y sus mejillas algo rosadas. Se veía muy hermosa. 

Tu: Hola. –sonreí al verla

TM: ¡Pero qué hermosa! –sus ojos brillaron. 

Agarró mis manos y me miro con dulzura. 

TM: Tu igual Rose. 

Rose: Oh, gracias. –sonrió sin dentadura. Era la primera vez que ella veía a mi madre. Podía notar la sorpresa en sus ojos.- Oh, pero ¡miren la hora! .-dijo mirando falsamente su móvil- son las 6, debo irme a ponerme mi vestido. Vuelvo pronto, ¿Si? 

Supe que lo hacía para dejarnos un momento a solas “madre e hija”. Rose se marcho y finalmente nos quedamos solas en silencio. 

Ella se sentó en la camilla suspirando y miro hacia mi repisa. Estaba llena de todos los libros que habíamos leído Harry y yo. Yo me quede mirando hacia el espejo mientras la miraba de reojo. 

TM: ¿Has leído todos estos libros?

Tu: Harry los ha leído para mí. –sonreí sin dientes mirándome en el espejo al borde de las lágrimas. 

Me mire en el espejo por un largo rato mientras todo estaba en silencio. Vi la peluca el tocador y pensé si tan solo ese pelo pudiera ser mío. Si tan solo esta piel quemada y pálida no sería mía. Si tan solo esos momentos de felicidad duraran más tiempo. La comisura de mis ojos se lleno de lágrimas heladas y sentí que ese viento helado recorría mi sangre. 

TM: ¿Ocurre algo? –se acercó lentamente hacía mi 

Tu: No, claro que no. –Limpie la comisura de mis ojos- estoy bien. –dije con un hilo de voz

TM: Sé que algo pasa preciosa. –dijo casi susurrando a mi lado 

Sentí otra lágrima escaparse mis ojos. Me miré hacia el espejo, y con miedo y delicadeza me saque el gorrito que traía puesto. 

Me quede completamente calva. Sin ningún cabello en mi cabeza, mi cabello rubio, brillante y largo había desaparecido. Mi cráneo estaba tan pálido y débil que las venas se notaban. Me sentía tan débil y fea no podía verme sin que me provocara llorar por siempre. 

TM: ¿Es eso lo que te preocupa? –dijo suavemente 

La miré sin saber que decir. 

Tu: Sé que es estúpido. Tengo más problemas que solo eso pero- es que- me siento horrible. –mientras sollozaba 

TM: ¿Horrible? –dijo como si no conociera esa palabra- ¿Para quién? 

Tu: Para todos. Para Harry. 

TM: _________, ¿No lo ves, cierto?

Tu: ¿Qué cosa? –abrí mas los ojos 

TM: Que Harry está completamente y loco enamorado de ti. Es que jamás me imagine que un jovencito pudiera sentir algo tan grande como el verdadero amor. 

Tu: Tal vez solo siente pena por mí. Tal vez, si yo no estuviera enferma, ya me hubiera terminado. 

TM: No es así. Él enserio te quiere pequeña y quisiera que lo veas. Antes de entrar a tu habitación ¿sabes qué hace? Se seca todas las lágrimas y crea una sonrisa en su rostro y luego entra a alegrarte el día. 

Sonreí sin dentadura aún con lágrimas. 

TM: ¿Sabes que hace todas las noches? ¿Enserio tú crees que él jamás te ha visto sin peluca amor? 

Tu: ¿Qué? 

TM: Él otro día, no podía dormir y pensé que estaban despiertos ya que la luz aún estaba encendida. Pero al abrir la puerta, tú dormías, él… solo te observaba. 

Tu: ¿Me observaba? 

TM: Te contemplaba mejor dicho. Mira nena, sé que a veces sientes que él no estará tan enamorado si te ve sin la peluca, pero créeme, él enserio te ama. ¿Sabes cuántas veces me ha dicho lo preciosa que eres? Siempre lo dice. Lo repite mil y mil veces, lo susurra mientras te ve “pero que hermosa que es” Además que es tu corazón la que te hace grande. 

Tu: Pero- 

TM: Eres hermosa ____________, te lo juro. No necesitas ninguna peluca para serlo. Y sé que Harry piensa igual. 

Tu: ¿Enserio lo crees?

Mi madre sonrió dulcemente y sus ojos se iluminaron. Me acerco a ella y beso mi cachete. 

TM: Lo eres y tienes un corazón de oro. 

Sonreí. De alguna manera extraña consiguió convérseme. 

Tu: Gracias –susurre abrazándola fuerte