Different Mind

Ella se ve...diferente

Josh

Por fin había llegado a casa luego de entregar la mercancía. Sin duda estaba agotado, en especial por que un policía local casi nos descubre y Paul y yo tuvimos que detenerlo. El chico, pues el policía era muy joven, unos cuatro años mayor que yo, me había perseguido hasta un callejón. Pude arreglármelas con unos cuantos ganchos, pero Paul fue el que dio el remate final. No lo matamos, pero estoy seguro de que lo dejamos en coma. Algo es algo.

Además, el chico daba buenos golpes. Me dolía especialmente el de mi costilla. Sí que me había sacado el aire. Paul ni siquiera tenía un rasguño. No dejaba de sorprenderme. Una característica de Paul es que es muy limpio, hace muy bien su trabajo sin dejar rastros. Sus nudillos estaban un tanto hinchados pero ni siquiera podía ver sudor en su frente. En cambio yo pareciera que me hubiese enfrentado a una pandilla, con la ventaja de que yo gané, por así decirlo.

Me despedí de Paul con la mano y caminé hasta mi casa. Con fatiga, saqué las llaves de mis pantalones. Esperaba poder inventar una buena excusa para mamá cuando me vea así. La más básica era que quisieron asaltarme o que me “tropecé” pero no iba a creerme. Tenía que ser más ingenioso esta vez.

Luego de estar un rato frente a la puerta como un tonto y además, con las llaves en la mano, me acordé de entrar cuando escuché dos risas que ya había oído antes.

Sabían que eran Sue y Tyler. La de mi hermano podía reconocerla hasta en la China y la de Sue bueno…no lo sé, porque esta todo el tiempo con mi hermano igual que un chicle ¿Qué acaso no se separan nunca?

Me giré para verlos y me quedé más bien estático. Oh por Dios ¿Qué chica era esa? ¿De dónde la habrá sacado Tyler? Más bien, la pregunta era ¿Por qué esa chica esta con el marica de mi hermano? Obviando esa parte, la chica era preciosa. Ojos celestes, tez pálida y mejillas rosas. Su cabello rojizo y castaño era corto casi al ras de las orejas, un flequillo largo del lado derecho que le llegaba hasta la mandíbula. Sus cejas finas y su sonrisa, por Dios, su sonrisa era…era maravillosa. No había visto una chica así en años. Tyler y la chica llegaron hacia mí y luego de reírse sobre algo que desconocía se detuvieron y se me quedaron viendo. Personalmente ignoraba a Tyler, solo podía ver a la chica. Ella me miraba con una ceja alzada y una mueca en su boca. Hasta de esa forma era hermosa, por Dios, que ojos.

-          ¿Josh?- preguntó ella-. ¿Estás bien?

¿Eh? ¿Cómo conocía mi nombre? ¿Me habrá espiado? ¿Estudiaría en la escuela y no me he dado cuenta? Por favor, si en algo soy bueno es en notar chicas lindas al instante.

-          Nos vemos mañana, querida- se despidió Tyler de ella con un abrazo.

Wow, esperen ¿Desde cuándo Tyler está con chicas como ellas? Sé que la homosexualidad atrae a las mujeres en el sentido de la confianza pero… no comprendo. ¿La tenía escondida?

Ella le dedicó a mi hermano una sonrisa y se despidió de mí con un ademán. Todavía estaba perplejo intentando procesar la información, sin notar que Tyler me miraba con picardía.

-          ¿Y tú que te traes?- le insinué-. ¿Quién es ella?

-          ¿Qué quién es ella?- repitió el con todo el asombro del mundo. Ahora mismo se merecía un golpe por irónico-. ¿No sabes quién es?

-          Si lo supiera, idiota, no te estaría preguntando.

-          No puedo creerlo- exclamó riendo-.Es Sue Wiltmore.

Mi quijada, y es literal, llegó hasta el suelo. ¿Qué diablos era todo esto? ¿Cómo ella puede ser Sue, Sue Wiltmore, la misma que me odia y golpeó recientemente a Donovan? Mi cara de estupefacto no era normal. Comencé a reflexionar, por Dios ¿Cómo pude decir todas esas cosas sobre ella? No es posible. Había alardeado de más. Esa Sue, era muy diferente a la Sue que ya había visto.