Capítulo extra.

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Reachele

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Reachele.

El tiempo se ha hecho polvo detrás mío. Semanas y semanas han pasado hasta que miro atrás y me doy cuenta de todo lo que he vivido y todo lo que luchado por lograr ésto.

Pasar primera en la iniciación  tiene sus ventajas y como todo lo demás en el mundo, sus desventajas.

Te ofrecen una infinidad de posibilidades aquí, pero sobre todo el liderazgo. Se empeñan al máximo por lograr que te conviertas en líder de tu facción.

Hablé con mi hermano respecto al liderazgo. Me dijo que durante la iniciación yo había demostrado múltiples capacidades de un liderazgo increíble. No lo pongo en duda: yo misma me sorprendí en momentos como el juego de la bandera.

Le dije a Max, uno de los líderes de ésta facción, que me lo pensaría un poco. 

Hoy tengo la cabeza revuelta de ideas. Una parte de mí quiere ser líder de ésta facción, llegar a lo más alto y demostrarme a mí misma que valgo mucho más de lo que solía pensar cuando era una simple Sin Facción; en ese entonces me sentía vacía e incompleta, sentía envidia por los que tenían una facción a la que pertenecían. Me mal decía a mí misma por lo que no tenía. Sentía la mirada de todos por sobre mí: algunos me miraban con pena y otros incluso, con repugnancia. Esa era la parte de mi vida que siempre escondí de todos, incluso de mi madre. Solía llorar por las noches en mi incómodo colchón, cuando tenía demasiado frío si quiera para moverme.

Pero estaba esa parte. Esa parte que me decía que no debía hacerlo, que tenía miedo de hacerlo.

Durante la iniciación aprendí a controlar el miedo. Al principio era terrible. Tengo doce miedos.

Caer por el Abismo.

Volver a vivir con los Sin Facción.

Morir extrangulada.

A las arañas.

Miedo a la muerte de mi hermano.

A la oscuridad.

Miedo a quedar en ridículo.

A matar a una persona inocente. Ese miedo, según Tobias, lo compartimos.

Miedo a volverme cruel.

A las agujas.

A morir apuñalada.

Y el último, mi peor miedo, que descubran mi divergencia.

Sí, soy divergente. Fue mi hermano quién me lo dijo luego de atravesar mi primer paisaje del miedo. Como yo jamás tuve la Prueba de Aptitud, no tenía idea de que era divergente. Tobias me dijo que no se lo dijera a nadie, que él y Tris también lo eran y que nadie debía saberlo jamás.

Mi madre me había contado sobre la divergencia y todos los peligros que implicaba. Sin embargo, mi hermano me explicó que Erudición ha estado muy atenta a la aparición de ellos y me explicó cómo debería actuar en determinadas situaciones.

Amor Antes que Facción: Divergente.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora