Amor Antes que Facción: Divergente.

Capítulo 22.

Tris.

-¿Y bien, Tris?

Levanto la mano que había tratado de mantener oculta desde hace rato. Se la enseño en lo alto, con el brillante anillo adornando mi dedo índice.

Sus ojos se abren como platos y se le forma una sonrisa en sus labios.

-Me voy a casar.

Un grito agudo y ahogado sale de su garganta y no se detiene, sino que se acrecenta. Sonrío.

-¡Te vas a casar!

-Creo que eso fue lo que dije. - comento riendo.

-¡Tris! - grita alargando la i.

Cuando le dije a Christina que nos reuniéramos aquí, sabía que su reacción me haría querer taparme los oídos. Por suerte, decidí traerla al Abismo, donde los ruidos suelen suprimirse bajo el agua cayendo estruendosamente.

-¿Por qué no me lo dijiste ayer? - pregunta exaltada y complemente agitada.

-Porque era tarde.

-No vuelvas a hacerme eso. Da igual la hora. ¿Cómo fue? ¿Qué te dijo? ¿Dónde? ¿Qué le diji...

-Tranquila. Te lo contaré todo. No te exaltes. - la tranquilizo.

Ella se limita a asentir, pero con su euforia intacta.

《-¿Qué estará pasando por tu cabeza justo ahora, Christina?》

-Luego del cumpleaños, me llevó hasta la red por la que saltamos. Ahí me pidió matrimonio.

Su sonrisa se va transformando en plena incertidumbre.

-¿Y bien? ¿Solo eso? Vamos, Tris. ¿Qué te dijo? ¿Qué le dijiste?

-Mmm... creo que prefiero guardarme para mí sus palabras. Además, no recuerdo muy bien lo que me decía. Tenía la emoción reprimida. - Digo restándole importancia.

Pero bien me acordaba de cada palabra que él había dicho. Cada palabra la recordaba como si la estuviera escuchando de toda la vida.

《"-No quiero pasar ningún día sin ti. Quiero estar contigo a cada segundo y en todas las formas posibles. -otra vez, respira profundamente. - La estirada que saltó primero. La chica más valiente de toda Osadía. De esa chica estoy seguro que estoy enamorado. Beatrice Prior: ¿quieres casarte conmigo?"》

No podría olvidar sus palabras. No en un futuro cercano.

《-Hasta que mi memoria falle, hasta que no recuerde mi propio nombre; hasta entonces tus palabras estarán rondando por mi cabeza. Lo prometo.》

La cara de Christina se torna ligeramente sentida, pero no lo suficiente como para armar un berrinche a su estilo.

-Okay. Si así lo quieres.

-Chris, no te sientas...

-Shh - Me corta. - Tenemos muchísimo que hacer.

-¿Por qué?

-¡Es una boda! ¿Sabes todo lo que eso implica?

-Aparentemente, si lo supiera no te estaría preguntando.

-¿Boda? - la voz de Reachele, mi futura cuñada aparece desde las sombras. - ¿De qué boda hablan? - pregunta con precaución.

Christina me mira de reojo, esperando a que yo me pronuncie.

Levanto la mano derecha y el sol da en el ángulo perfecto para que el enorme diamante destelle.

-No esperaba que te enteraras por la discreción de Christina, pero ya está hecho.